En el capítulo anterior...
- Hina... yo... no llores... te diré que pasa en Suna, verás que no es para tanto, pero por favor no llores – Me trató de consolar como una niña pequeña – Si Naruto se entera de que te hice llorar, me va a matar, y no quieres que tus hijos crezcan sin una abuela ¿verdad? – Me dijo en broma tratando de calmarme, y debo decir que una vez más había dado resultado.
- Lo siento Kushina-san – Me disculpé por orillarla a esto – Créeme que lo que menos quiero es que hagas algo que no quieres
- No te preocupes Hina-chan, ahora que lo pienso, debí decírtelo desde que me dijiste que estabas preocupada, pero Naruto me pidió que no te dijera nada – Me dijo.
- ¿Naruto? – Pregunté aún más confundida.
- Mi hijo me va a matar – Dijo en un susurro que pude escuchar – Si, lo entenderás cuando te cuente lo que paso esta mañana – Me dijo mientras me llevaba a uno de los sillones para que nos sentáramos.
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- Esta mañana desperté y fue extraño ya que por lo general es Minato quien me despierta, pero el aún estaba dormido, así que supuse que aún era muy temprano – Comenzó a narrar mi suegra— Baje a la cocina por un vaso de agua y al mirar por la ventana me di cuenta de que aún no amanecía, así que supuse que me daría tiempo de preparar el pastel y darle la sorpresa a Minato, pero cuál fue mi sorpresa al descubrir que no tenía nada de lo necesario, ni siquiera harina dattebane! – Algo me decía que Kushina intentaba alargar la historia para hacerme olvidar el tema
– Entonces regresé a nuestra recamara. Minato ya estaba despierto y le conté de mi antojo, él se ofreció a comprarlo, al principio no me agradaba la idea pero Minato continuo y propuso que los invitáramos a ustedes a compartirlo con nosotros. Incluso íbamos a invitar a tus padres, por Hana-chan no hay problema pero Hiashi – Dijo recordándome una vez más la rivalidad desde la infancia de ambos
– Después de que yo me di un baño, salimos a la aldea, ya comenzaba a amanecer así que supusimos que tus padres ya estarían despiertos, por eso decidimos ir primero a hablar con ellos, y estábamos en lo cierto – Sonreí ya que era cierto que en la familia Hyuga, los mayores despiertan antes del amanecer y los niños deben despertar poco después de la salida del sol.
– Y sin quererlo fue buena idea ir a esa hora, ya que encontramos tanto a Hana como a Hiashi, les contamos la idea y ambos concordaron en ir. Al salir de la casa de tus padres se me ocurrió la idea de que fuera una sorpresa para ustedes, así que en lugar de ir a su casa a avisarles decidimos ir a la oficina de Naruto y lograr que le dieran el día libre – Escuchar eso me deprimió un poco ya que me hubiera gustado que Kushina-san hubiera podido cumplir su propósito
– Incluso ya estaba pensando en hacer un clon y transformarlo en Naruto, después de todo conozco tan bien a mi hijo que podría actuar como el dattebane! – Declaró
– Solo que tendrías que cambiar el 'Dattebane' por un 'Dattebayo' – Le recordé y una media sonrisa acudió a mí al recordar a mi rubio, y estaba segura que si esa palabra hubiera sido pronunciada por su voz, mi sonrisa hubiera sido completa
– Claro, tienes razón Hina-chan – por un momento Kushina guardó silencio conservando la esperanza de que yo hubiera olvidado el tema e iniciara con uno nuevo, pero no fue así, decidí guardar silencio y comunicarle con mi mirada que deseaba que continuara
– Fuimos a la torre Hokage y en cuanto llegamos a la puerta de la oficina de Naruto nos encontramos con Shikamaru – Continuó resignada y sabiendo que había llegado a la parte en la que ya no podía alargar más las cosas.
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Creo que estoy embarazado
FanfictionDespués de tres años de casados ¡Naruto y Hinata serán padres!, pero... Naruto tendrá que experimentar en carne propia lo que significa estar embarazado.