*Ailey*
Después de despedirnos de los chicos, caminamos hasta el Audi de Lana y le pedí a Laine que fuera en el asiento delantero para dejarme caer en el asiento trasero.
—¡Dios! Esto duele como el infierno— dije mientras las lágrimas me llenaban los ojos. Lana se rió pero me miró preocupada ya que nunca maldecía.
—Podemos pasar a mi casa para darte hielo... Así se te calma un poco— Lana asintió por mi. Yo estaba más preocupada en el dolor en mi rostro.
Lana se estaciono afuera de la casa de Laine. Era una casa pequeña pero se veía muy hermosa, Laine nos hizo pasar y se apresuró a ir a la cocina, supongo, Lana y yo nos fuimos a sentar a la sala
—Es bonita— me dijo Lana
—Es acogedora... Cálida...— Laine regreso con un paño lleno de cubitos de hielo, el cual me hizo soltar un suspiro cuando lo coloque en la zona afectada.—Oye Delaine de quien es ese Aud...— la voz de Kate se apago en cuanto nos vio. Se quedó callada durante varios minutos sin saber que hacer.
—Lo siento— su disculpa fue casi arrancada de sus labios
—Tú no tienes porque disculparte— Laine miró a su prima molesta, era genial como se parecían, Lana era como mi hermana, me hubiera gustado tener hermanos, primos o algo.
—Vendré después — Kate salió sin esperar respuesta por parte de Laine.
El ambiente se sentia tenso después de eso, era notable que Laine estaba furiosa.
—Eh Laine... Esa Harley es tuya...— la chica me sonrió, cuando veníamos entrando la vi en un costado del patio.
—Si, es un modelo ya antiguo, pero me gustan las motos— se sonrojo un poco.
Cuando se me calmo un poco el dolor nos fuimos, ese día Lana se quedaría a dormir conmigo y aunque había una habitación especial sólo para ella, siempre dormía conmigo
—Creo que deberías llamar al doctor— me sugirió cuando entramos a mi habitación
—No Jessica me acaba de dar unos anti-inflamatorios— Jessica era una de las chicas del servicio con las que más contacto tenía ya que era la encargada de mi habitacion.
Lana asintió y nos preparamos para dormir, esa noche, gracias a los analgésicos y que Lana, estaba conmigo, pude dormir un poco más
El viernes de esa semana llego demasiado rápido. Cuando entre a Historia el único lugar vacío era junto a Aidan. Desde la primera semana no nos habíamos sentados juntos, sentí como mi corazón se aceleraba con forme me acercaba, mi pie se enredo con no se que cosa y de no ser por él habría caído al piso.
Nuestras miradas se encontraron por un instante, mientras me ayudo a incorporarme.
—¿Te quieres romper la nariz de verdad?
Yo solo negué aturdida por la intensidad de sus ojos verdes. Ese fue el único contacto que tuvimos durante los 15 días, tiempo en el que se hizo aun mas distante conmigo.
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¡Hey! Estoy de regreso con esta historia. Pues tengo pensado al menos subir un capitulo por semana, la cosa quedaría así:
Domingos: La Parte Mas Dura Es Dejarte
Lunes: La Música Que Nos UnióLos invito a mis otras historias
Gracias, voten y comenten
Les<3
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La Música Que Nos Unió
Novela JuvenilAiley, es una chica frágil y prácticamente sola, vive en una enorme y fría mansión con un padre, el cual es el más rico del país pero que sólo impone y nunca esta... El único rayito de luz en su vida es su mejor amiga Lana, una chica alegre que se e...