La Música Que Nos Unió

34. Déjame en PAZ

— Será divertido Kate— la pelinegra miró a su prima sin mucho entusiasmo

— Mientras este Ailey, nada es divertido— susurro por lo bajo, por culpa de esa mojigata Raich estaba enojada con ella, pues no se había enterado de lo suficiente.

Una bocina sonó a lo lejos

— Vamos, es Ailey— la morena salió primero seguida de su prima.

Dentro del auto ya estaban Ailey, Lana y Allison, todas parecían emocionadas.

Kate, rodó los ojos.

Como en la presentación pasada Aidan y Dev llegaron antes que ellas, pero ahora había una diferencia, Dalan Tonny estaba sentado sobre uno de los bafles.

Delaine chillo emocionada y corrió a sus brazos, Dalan la beso con pasión, haciendo que a la chica le temblaban las piernas.

— ¡Hey Ailey!— la pelinegra se topó con el chico de los tatuajes, que se acercaba de ella — ¿Volverán a cantar?

— James, si, mi novio y un amigo vinieron a prepararlo

— ¡Oh! ¿Es el rubio de ojos verdes?— las mejillas de Ailey se sonrojaron y tanto James como Kate, que estaba junto a ellos, notaron el brillo en sus ojos

— Sí — la pelinegra reparo en Kate— James, te presento a Kate, la nueva integrante de la banda, hoy será su primera presentación.

El tatuado al ver que Ailey ya estaba ocupada y al parecer muy enamorada miró con interés a la otra pelinegra, que también era una belleza, si bien Ailey tenían rasgos delicados haciéndola ver como una princesa o una muñeca, Kate tenía una belleza más salvaje, esos ojos claros resaltaban con su cabellos negro y piel aceitunada, era como una amazona.

Cuando James y Kate se sonrieron de algún modo Ailey supo que se tenía que ir. Dio la vuelta y chocó contra alguien no le costó nada reconocer el aroma de su novio

La pelinegra sonrió y deslizó sus brazos por la cintura del chico

— Te extrañe— escucho la risa amortiguada de Aidan en su pecho.

El rubio también la abrazo, cada vez lograba que Ailey fuera más abierta a la hora de demostrar sus sentimientos, los primeros días de su relación parecía un pajarito asustado.

— ¿Estás lista hermosa?

Ailey se separó de él y le sonrió

— Sí, hoy tengo menos nervios, además mi padre sabe que estoy aquí— Aidan la miró preocupado, si bien Ailey le decía que todo estaba bien, Lana se había encargado de describirle a Marcus Harford y su amor por el dinero y las apariencias— no te preocupes, sabe que el club es de los Motley.

Al verla sonreír, Aidan también lo hizo. Estuvieron juntos abrazados y besándose hasta que les tocó pasar, Allison, Lana y Delaine hicieron lo mismo con sus respectivos novios. Kate había desaparecido con James pero sólo Ailey lo sabía.

(...)

La presentación había sido mucho más exitosa que la vez anterior, Kate había aportado justo lo que Ailey esperaba.

La pelinegra sonrió feliz, al ver que su padre no había enviado a Brian, podría estar con Aidan sin problema alguno, todas habían decidió estar con sus novios después de la presentación.

— ¿Lana? — la rubia de giro encontrándose con Laine, Dev había ido a buscar sus cosas, pues ya se iban a retirar

— ¿Qué sucede?

— ¿Podría ir a quedarme contigo? Me he peleado con Dalan y...— la chica desvió la mirada, Lana se tenso

— ¿Te hizo algo? Laine sí te tocó yo...

— ¡No! Jamás lo haría— la morena se secó una lágrima— es sólo que últimamente hemos estado peleando y él, él ha estado bebiendo, no se porque, no quiere decirme, ni a Kevin, pero sí voy a casa irá más tarde y yo... no quiero verlo, se acaba de ir ¿Puedo ir a la tuya?

— ¡Por supuesto que sí! Eso no se pregunta, Dev acaba de ir por mis cosas y nos iremos a casa

— Siento arruinar tu noche

— Hey, somos amigas y tu me necesitas. No arruinaste nada. Además apenas tenemos 18 ni siquiera podemos beber

Lana logró sacarle una sonrisa. En ese momento llegó Dev con una mirada de Lana, el chico supo que algo andaba mal y no dijo nada sólo sacó a las chicas de ahí.

(...)

Kate se sentía ligera, hace mucho que no se divertía como esa noche, su cuerpo flotaba entre los que bailaban, no había Raich, no había chantajes, no había pasado, solo los labios de James sobre los de ella.

Sí, el chico tatuado había aprovechado el momento y ahora se estaban prácticamente follando la boca.

Kate quería olvidar todos sus problemas, en ese estado era consciente de lo linda que era Ailey, de lo mucho que amaba a su prima y del porqué Allison y Lana la odiaban

Muchas horas después negaría haber tenido esos pensamientos, pero eso noche, esa noche sólo quería olvidar.

— ¿Donde carajos estabas? — con la lentitud característica de su estado miró hacia quien le hablaba, lo veía borroso pero aún así lo reconocería donde fuera

— No, te interesa— el chico la fulminó con la mirada— vete y déjame en PAZ

— ¿Te fuiste a revolcar con ese musiquillo de quinta, cierto?

Kate no pudo evitar reírse, a él no le importaba ella, sólo estaba ahí para atormentarla, como a él le gustaba hacerlo y ella era tan tonta como para dejarlo.

Antes de que su precario estado la dejara reaccionar ya había sido llevada al callejón detrás del club, su mente reaccionó cuando sintió sus labios sobre los de ella.

(...)

— ¿A dónde vamos? — le preguntó Ailey a su novio, el solo le sonrió, como las pasadas 10 veces que le preguntó

— La paciencia no es una de tus virtudes

Aidan sonrió al ver a su novia hacer un puchero

— Sabes, es la primera vez que estoy fuera de mi casa después de las 10— Aidan tomo su mano y le dio un beso en la palma— pero me gusta estar contigo, no me importa la hora que sea.

Aidan aparco en una zona oscura, Ailey fue consciente de los árboles que los rodeaban. Comprendió que estaban fuera de la ciudad, tenía muchos años que no salía de la urbe, odiaba los autos a velocidad y las carreteras estaban plagadas de ellos, pero con Aidan perdió el sentido de dónde iba.

Aidan abrió su puerta y la ayudó a bajar, caminaron tomados de la mano unos metros. Al atravesar los árboles se encontró con un pequeño acantilado, desde el cual se podían apreciar las luces de la ciudad, coronada por las estrellas

Aidan la envolvió con una manta y se sentaron sobre la yerba, ella entre sus piernas

— Aidan... te quiero

El rubio sonrió y la apretó contra él, eso era el paraíso para él

— Yo tambien te quiero Ailey