One More Time -2min- FINALIZADA

4. Una vista al pasado: Parte II

– ¡No lo pares!– Gritaba Yun Min tratando de quitarle el curioso control remoto a Onew.

– ¡Eso es para mayores. Pervertida!– Lo alejaba de su alcance, desapareciendo la gran imagen que mostraba parte de la historia de los progenitores de la niña que tenía a cargo en su nueva misión

– ¡Pero está en lo bueno!

– ¡Cochina!

– ¡Déjalo!

– ¡Que no!

– ¡Solo un momento!

– ¡Te dije que no! ¡Niña rara!

– ¡Aburrido!

– ¡Pervertida!

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– Basta ,Minho.– Gemía Taemin a medida que sentía su cuerpo caer a la cama y rebotar en seco.

– Te necesito.– Repetía una y otra vez, levantando con suma delicadeza el camisón de su extrañado "fanático" mientras se acercaba con el rostro envuelto en el placer que lo dominaba sin cuidado.

Se rodeaban en un caluroso y excitante aura. Y lo peor para Minho, era grandioso inundar sus fosas nasales con el aroma suave que el pelirrojo emanaba, que sus tímpanos se deleitaran con los pequeños gemidos ahogados a causa de las estimulaciones bucales que hacía en un pezón. Poco después, fue hasta su boca a devorarla, envolverla por completo en su aliento y su saliva consumida por el alcohol.

¿Grandioso? Era la gloria.

El olor del licor digerido por Minho no era nada agradable, pero sus manos y sus labios hacían un trabajo exquisitamente perfecto en el pecho de Taemin. Simétricamente delicioso.

Dos movimientos bruscos del alto y el menor le daba la mejor vista privada de ropa que sus ojos pudieron haber captado en sus 21 años de vida.

Finos besos sin control, algo que solo los dos podían hacer realidad a medida que el castaño terminaba de deshacerse de su ropa con ayuda de Taemin.

Minho seguía con sus caricias hasta el último rincón del cuerpo desnudo de Taemin. Su piel era incomparable a cualquiera que haya disfrutado durante años, hasta podía alagarlo diciendo que era mucho mejor al de una mujer.

Suspiros deseosos del menor se vuelven a incrementar, pues Minho empezó un placentero movimiento, frotando sin piedad alguna sus miembros, tornándose duros y algo elevados.

Ese roce que llevaba más allá del cielo al pobre Taemin rendido a los pies del actor. Quería, mas no podía detenerse, empujarlo y gritarle: "Consigue tu objetivo en otra persona, ya me cansé de ser tu juguete".

Desgraciado, lo hipnotizaba con su magnífico contacto íntimo.

Perdido en su mente y en las sensaciones, Taemin no se dio cuenta de que el alto bajaba peligrosamente desde sus labios, hasta más allá de su ombligo.

– ¡Minho!– Taemin gimió descaradamente, sintiendo el vigoroso calor que suministraba la boca y la lengua del mayor en su miembro.

El mayor succionaba gustoso la sinhueso del joven bajo su moreno cuerpo, preparándolo poco a poco para la noche más escandalosa que los dos universitarios hubieran vivido.

Taemin pasaba su ágil lengua por todo el contorno del miembro de Minho, sintiendo las venas brotadas de su alrededor y su contextura maciza, a la vez haciendo movimientos de vaivén enloqueciendo igualmente al mayor esta vez acostado en cama, disfrutando de las estimulaciones torpes del virgen.