Maratón 2/3 (LEAN LA NOTA POR FAVOR)
Recuerdo que cuando era pequeña mi madre antes de irse a Italia con mi padrastro me decía "Lo peor que te puede pasar es olvidarte de quién no deberías ser" Lo siento mamá, no tenías razón.
《¡Idiota, idiota, idiota!》-. Era lo único que pasaba por mi cabeza.
Mi mirada se enfocaba en el piso mientras sentía mis mejillas arder como el infierno.
Traté de ocultarme detrás de Nicole, pero ya era demasiado tarde, Cleytom me había visto.
-¿Viannela te sientes bien?-. Mi respiración era pesada, mi pecho subía y bajaba con velocidad, y en verdad me sentía avergonzada, de verdad que sí.
No respondí, y me giré para ver si Cleytom aún se encontraba ahí, pero para mi suerte ya se había hido.
-Sí-. Dijé con la cabeza baja.
-Pero hace un minuto...
-No quiero hablar de eso... Por favor-. La interrumpí.
Ni siquiera sé porque me alteraba, supongo que Cleytom había provocado esa horrible sensación en mi.
Estaba asustada. Estaba asustada de Cleytom.
Dicen que pensar en temerle a una persona es nada más algo psicológico que se crea de manera mental, pero la verdad es que eso empieza a través de momentos desagradables vividos con otra esa persona.
Desagradable, ¿Como puedo definir eso?
Los recuerdos llegan una y otra vez y inundan mi cabeza como si de un mar se tratara.
Su lengua en mi oreja, sus labios sobre mi cuello, su pierna entre las mias...
Estoy segura que desagradable no era a lo que me refería.
Escalofriante, esa sería la palabra correcta.
Y por si fuera poco, un camino de cosas sin fin sofocó mi cabeza al pensar qué hubiera pasado si no hubieran abierto la puerta en ese momento.
Él me hubiera...
-¡SE ACABÓ LA HORA DE LA DUCHA!-. Anunció uno de los guardias para que después otro dijera lo mismo en un idioma diferente, ya me había dado cuenta de que en realidad me encontraba con chicas de otros lugares, bastantes lejanos diría yo-. ¡TODAS A LAS RECÁMARAS, EL TRABAJO EMPIEZA AHORA!
Trabajo, chicas, prostíbulo...
Lágrimas salen involuntariamente de mis ojos, no quiero, o más bien no puedo hacer eso, y menos ahora que nadie recuerda siquiera mi existencia.
-Ela calmate-. Me sorprendo al escuchar el apodo "Ela" mi padre solía llamarme así-. Tienes un hombro en recuperación, dudo que vayas a ese lugar-. Me tranquiliza Sandra.
Todas se ponen la ropa que llevaban anteriormente.
-¿Y qué pasará con ustedes?-. Evie le hizo unas señas detrás para que se callaran.
-Mmm, pues...
-¡Abran paso, es una emergencia, he visto un nuevo guardia muy guapo en el corredor!-. He aquí dónde Vanessa hace su acto de presencia.
-¿Estás conciente de que no es de nuestro grupo por lo tanto no habla español verdad?
-No se necesitan palabras cuando se tiene el lenguaje del amor-. Dice esta con una falsa sonrisa-. En este caso, hacerme la desmayada en sus brazos-. Dice corriendo hacía donde el chico.
-Nunca cambia-. Exclama Nicole a Evie la cual asiente cabizbaja.
No tan lejos se puede ver a Vanessa la cual hace prácticamente un drama de una vieja telenovela para caer en sus brazos al estilo Hollywood.
Nos dispersamos por diversas áreas conducidas por esas personas las cuales nos comían con la mirada, yo sólo me aseguré de seguir directo con las demás hasta que en un abrir y cerrar de ojos ya sólo quedabamos las de habla española.
-¡GRUPO 4, 2 Y 6 A LA DERECHA, LAS DEMÁS 1, 3 Y 5 AL IZQUIERDO!-. Todas empezaron a organizarse entrando en las extravagantes habitaciones con luces de colores y cosas exóticas.
Al darme cuenta ya estaba en una habitación distinta a la anterior con las chicas que me acompañaron la otra vez.
-Si te lo preguntas somos el grupo 3-. Dijo una chica mientras se ponía unas largas medias que no parecía ropa de tanto que dejaba al descubierto-. Por cierto, salimos en 5 minutos.
-¿S-salir?-. Pregunto sintiéndome estúpida, es obvio, espero algún comentario sarcástico o fuera de lugar por parte de... espera un momento-. ¿Dónde está Vanessa?
Todas se miran buscando a sus alrededores.
-Creo que la ví enganchada al pie de un lindo guardia en el sector de Ucrania.
-¿Ucrania?¿Y eso existe? Ya quiero ver su cara cuando lo oiga hablar-. Dice una en tono de burla.
-Chicas 3 minutos.
Nicole me tira una especie de vestido plateado con mucha escarcha que deja completamente la parte de la espalda descubierta.
-Pontelo antes de que entren los demás, por ahora serás mesera hasta que te mejores, necesitas ir sabiendo de qué va esto-. Dice sin darme tiempo a preguntar.
No digo nada, por más que quiera negarlo, prefiero ir con ellas a quedarme sola en esta habitación mientras esos depravados infelices me observan.
Hago caso a lo que me dice y me pongo el vestido.
-Espera falta algo-. Otra de las chicas me hecha perfume mientras Sandra me maquilla ligeramente-. Okay, ya estás lista.
-¡SUELTAME TONTO!-. Grita Vanessa mientras es cargada como un saco de patatas en los brazos de Harold.
-¡Tres años Vanessa! ¡TRES PUTOS AÑOS! Y ya has ligado con todo el escuadron a excepción de mi, no puedo creer que me hayas estado engañando con ese grigo, ¿tan difícil el aceptar que me amas?-. Dice frunciendo las cejas y con tono de decepción.
-En primer lugar, yo no te estoy engañando con nadie por que no somos NADA, sólo estás molesto porque eres el único con el que nunca me acostaré NUNCA-. Lo señala con un dedo-. En segundo, no te pertenezco, tu jefe nos tiene secuestradas por lo tanto eres su pañuelo desechable. Y en tercer lugar... ¡QUE NO TE AMO JODER!
Él abrió la boca para decir algo pero fue interrumpido.
-Hora de salir.
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Inocencia Destruida.©
DiversosRozó mi cuello y dejó un último mordisco en mis labios para dirigirse a mi oreja haciéndome gemir descaradamente por su agitada respiración sobre mi. -Espero que te gusten los animales... Porque soy totalmente una bestia-. Me susurró de manera sens...