-Adelante.- dijo Abraham al escuchar que llamaban a su puerta.
-Dice mi madre que bajes ya a desayunar.- Le dijo Tony en un tono serio y serró la puerta. Otra ves la misma rutina, esa era toda la conversación que tenían en el día y eso realmente entristecía a Abraham, ya ni siquiera le decía enano.
Se levanto de su escritorio, estaba componiendo, eso era algo que lo distraía mucho.
Salio de su habitación y bajo a desayunar como su hermano le había indicado.
-Buenos días.- dijo Abraham entrando en la cocina pero nadie respondió, Antonio estaba leyendo el periódico ignorándolo por completo, Tony con unos audífonos puestos y Susana no se encontraba en la cocina.
Puso su vista en la mesa en donde se encontraba un plato con 2 huevos estrellados y un jugo de naranja, los tomo y se los llevó a su cuarto de regreso. No iba a desayunar en un ambiente así.
Entro a su cuarto, y serró la puerta. Se sentó en su escritorio e hizo a un lado las hojas con la pequeña letra escrita. Se dispuso a comer pero, cuando metió el tenedor a su boca le supo realmente mal, tomo jugo para que se le pasará pero no sirvió de nada. Corrió al baño se cinco frente a el escusado y vomito lo poco que había comido, extrañamente también había vomitado la cena anterior.
Regreso a su habitación por el plato, lo tomo y vio con asco aquella comida, bajo las escaleras poniendo el plato en el fregadero, se dirigió hacia las escaleras con la esperanza de subir y quedarse en su habitación pero no fue hací la voz de su padre lo detuvo.
-Abraham.- dijo este sin despegar la mirada del periódico.
-Dime.- dijo el chico en respuesta.
-¿Con quien hablabas anoche?- Abraham recordó a Kenia, y una sonrisa salio de sus labios.
-Hablaba por teléfono.- dijo este, en escusa, no le gustaba mentir y menos a su familia pero no podía decirle que alguien se había metido en la casa.
- ¿a si? ¿y con quien? Si se puede saber.-
-Con una amiga.
-¿Con Virgo?- le pregunto Antonio, levantando la vista del periódico, a él siempre le había parecido la idea de que su hijo saliera con Virgo ella era una buena chica, pero Abraham solo la consideraba su amiga. ( para las que no sepan Virgo es la mejor amiga de Abraham en la vida real y también lo sera aquí en el libro)
-No, otra amiga.- Abraham vio como el rostro de Antonio regresaba al periódico ¡Enserio nunca podrá verlo mas de 3 segundos a los ojos cuando hablan!
-Esta bien.- dijo Antonio y Abraham regreso a su habitación.
De verdad le cansaba que no le mirasen a los ojos cuando hablaba y también le cansaba el simple hecho de que su familia ya no fuera la misma. Necesitaba hablar con alguien, pero bien sabia que Kenia no vendría hasta la noche, así que decidió llamar a alguien más.
Tomo su celular en las manos para luego pasárselo a la oreja.
-¿Hola?- dijo la dulce vos que él tanto adoraba.
ESTÁS LEYENDO
"La Noche" ||Abraham Mateo||
Teen FictionÉl salvó su vida. Y ella no con vida salvara la suya.