-Alonso.- dijo la chica una vez que el coche había arrancado. -¿Puedo hacerte algunas preguntas?
-Claro.- dijo el chico.
-¿Por que eres un ángel? O bueno ¿Naciste siendo ángel? O moriste y luego te convertiste en ángel ¿Tienes Alás? ¿Por que no las veo? ¿Pue.- el chico la interrumpió soltando una carcajada.
-Espera, esta bien que ya no respiras pero se supone que al hacer preguntas tienes que dejar una pausa para que te respondan.- Y esa hermosa sonrisa no salia de su rostro -Bueno te responderé: Yo tenia familia, amigos y una linda novia llamada Valeri, era un buen chico siempre aplicado en mis estudios, pero un día me enoje con mi hermano no recuerdo por que pero tenia que ver algo con mi novia, salí de la casa hecha una furia y no estaba consiente de nada, camine sin rumbo con la cabeza agachada, hasta que escuche un grito, era de un pequeño niño al cual se le había ido su pelota a la calle, corrió tras ella, su madre se encontraba platicando con una señora, el niño no se dio cuenta que un auto se aproximaba a una velocidad un poco rápida, yo corrí y empuje al niño siendo hací que el coche impactara conmigo. Eso es todo lo que recuerdo, y el arcangel con el que estabas platicando antes, me dio este puesto por haber hecho aquello.- dijo esto en un tono triste y aquella hermosa sonrisa se había borrado de su rostro.
-Yo... Lo lamento no debí preguntar.- dijo Kenia compadeciéndose de él.- ¿Y has vuelto a ver a tu familia?
-Si, los vigilo constantemente. ¿Tu no quieres ver a la tuya?
-No.- dijo Kenia insegura claro que quería pero no... Por que ella estaba segura que ellos estarían mejor sin ella, y en estos momentos con un estorbo menos mas que felices y no quería ver la triste realidad.
-¿Por que?- fue ahora Alonso quien pregunto.
-No quiero, se que estarán felices sin mi, prefiero quedarme con la idea de que nunca me pusieron atención por sus trabajos, que por el hecho que nunca me quisieron.- y era verdad. Nunca se interesaron por ella y si los vio llorar el día de su entierro fue por que De alguna manera sentían lastima. O al menos eso creía ella.
-Deberías de hacerlo eso en cierto modo responderá algunas de tus preguntas. Pero si no quieres tranquila no te obligare.
-Gracias.- dijo Kenia y se dio cuenta que el auto ya había parado. Observo por la ventana, una linda casa se encontraba.
-Esta sera ahora nuestra casa.- le dijo Alonso con otra sonrisa -Se te asigno todo lo necesario para estar cómoda y parecer una chica normal. Y cuando tengas que ir a ver a Abraham sera mejor que me digas y hací yo te llevo y te recojo.- le guiño un ojo y le hizo entrega de una copia de las llaves de la casa.
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"La Noche" ||Abraham Mateo||
Teen FictionÉl salvó su vida. Y ella no con vida salvara la suya.