CAPITULO 25

243 26 12
                                    

Kenia se subió al auto de Alonso, estaba triste, él no tenia por que a verle contestado así, pero sabia que estando él en ese estado seria mejor dejarlo solo para que pensara bien las cosas.

Alonso la miro, de verdad se veía triste, quería preguntarle que pasaba pero tenia miedo de hacerla sentir mal. Se quedo callado un momento, pensando en que decirle sin echar a perder las cosas.

-¿Paso algo?- Hablo por fin Alonso, no iba mal.

-No.- respondió Kenia sin ser grosera, mas bien demasiado triste.

-Te noto algo triste.- Quería saber que había pasado, no dejaría de insistir.

-Alonso, no quiero ser grosera, pero no quiero hablar de eso.-

-Quiere decir que si a pasado algo.- Arranco el auto -Kenia, puedes confiar en mi.- dijo mirándole.

-Se enojo conmigo.- Kenia tenia tantas ganas de llorar, sin darse cuenta que al pronunciar esas palabras sus ojos se cristalizaron.

-¿Por que?- pregunto Alonso.

-Le di mi opinión, pero al parecer no le gusto, me dijo que no importaba y estaba bastante molesto, discutimos, y preferí.- continuo hablando pero Alonso la interrumpió.

-Dejarlo solo, eso es lo que has echo.- A Kenia le dolía aceptarlo pero lo había echo, lo dejo solo, estaba llorando, sintió una punzada en el corazón, lo primero que prometió y lo había defraudado.

-Para el auto.- dijo Kenia echa un mar de llanto. -¡Alonso deten el auto!- este freno en seco, Kenia salio del auto y corrió de regreso lo mas rápido que pudo, observo la casa de Abraham a lo lejos.

Cuando llego frente de esta, toco la puerta, esta fue abierta por Abraham del otro lado, también. Con los ojos hinchados, se miraron un rato, y sin esperar más Kenia se lanzo a sus brazos. Esto era realmente raro pensar que hace minutos estaban enojados, pero ellos entendían muy bien la bipolaridad.

-Lo lamento, lo lamento, lo siento, por favor, perdona me.- susurro Kenia en sus brazos. -No te dejare solo ¿okey?, no lo haré. Nunca.-

-Yo... No quería decirte aquello, no lo pensé.- Abraham la apretó aun mas fuerte en su pecho, había sido un completo idiota.

Kenia se quedo otro rato en casa de Abraham, ambos platicaban de cosas sin sentido alguno, reian, en tan poco tiempo habian entablado una linda amistad.

-Cuentame mas de ti.- dijo Abraham y se comió otra palomita de maíz.

-¿Como que? Mi vida no es interesante.-

-No digas eso, todos tenemos algo que contar.

-Conocí a mi ídolo.- dijo Kenia con una gran sonrisa, Abraham la observo divertido.

-¿Y consideras guapo a tu ídolo?.- dijo Abraham, una linda sonrisa se asomaba es su rostro.

-Si, esta muy guapo.- Abraham se sorprendió por la seguridad de Kenia, este se sonrojo. -Te ves lindo sonrojado.

-Me siento acosado.- dijo Abraham.

-¿Enserio Mateo? Miles de chicas te hacen comentarios mas obscenos y tu te siente acosado por que te digan lindo.- Dijo Kenia en un lindo tono de voz. -¿Podrias decirme el comentario mas obsceno que te han hecho?- Pregunto Kenia, Abraham se puso a pensar y luego se le vino a la mente.

•~•~•~•~•~•~•~•~•~•~•~
Reconciliación 7u7

Hey como están? Yo estoy mal... Muy mal... El mundo me odia y estoy triste por una estupidez y Tofo esto es tan confuso. Mañana me volveré loca y veré tomates callendo del suelo D': puta vidah.

Bye💜

"La Noche" ||Abraham Mateo||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora