CAPÍTULO 50

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Un dilema comenzaba a crecer dentro de la cabeza del chico ¿de verdad sentía atracción por Kenia? O solo era simple calentura. Tras horas de tener un debate interno llegó a aquella conclusión... No podía permitirse querer. ¿Alguien tan desastroso como él estando con alguien tan desastrosa como ella? se convertiría en un completo caos. Ya había suficiente drama pasando al rededor de su vida como para dejar que cayera otro encima suyo, era mucha carga para alguien tan joven, así que no, no se permitiría sentir algo más.

El error de Abraham al pensar aquello fue "dejar que cayera otro encima suyo" Kenia no le habría echado una carga, lo hubiese ayudado a cargar todo, haciéndose uno mismo.

Sus ojos comenzaban a cerrarse de a poco, no se había dado cuenta de lo agotado que estaba y no tardo mucho en caer en los brazos de morfeo.

«Perdoname Abraham, yo no...- fue interrumpida.

—¡BASTA! ¡CALLATE! No quiero escuchar ni una miserable palabra salir de tu jodida boca, eres igual a ellos. ¿eso estabas buscando? ¿solo querías lastimarme? Si tu objetivo era ese, lo lograste, felicidades. Ahora te pido que desaparezcas de mi vista y que no regreses JAMÁS ¿entendiste?- tomó aire —Eres lo peor que pudo haber cruzado por mi vida.-

La chica secó sus lágrimas tenía los ojos rojos al igual que su nariz, la frente le sudaba y su piel estaba más pálida de lo normal. No se creía lo que había escuchado, con el corazón en la mano y el autoestima por los suelos, se retiró.

—¡ARG!- gruño en alto el chico y tiró todo lo que había sobre su escritorio. Estaba destrozado

Narra Abraham.

Mis sentidos comenzaron a reaccionar, me levante de tirón ante aquella pesadilla ¿que había sido eso? La camilla estaba empapada por mi sudor, ahora no podía ni dormir tranquilo.

Volví a recostarme, trataba de aclarar mi mente y quitar de mi cabeza esas imágenes.

«Vamos Abraham, piensa en otra cosa» me repetía a mi mismo, pero no podía, tenia un hueco dentro de mi, un vacío muy grande, jamás había sentido algo así con alguna pesadilla, era horrible.

La imagen de mis padres se hizo presente, me parecía muy irónico y triste estar internado en un hospital y que ellos posiblemente no estuvieran siquiera enterados que no estoy en casa. Todo esto me resulta una completa basura.

"La Noche" ||Abraham Mateo||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora