Listo.
La pistola cargada, ¿a quién le cae el primer disparo?Tu escoges, si a la cabeza o al pecho, ya sabes que no puedes remplazarlos.
No podemos pensar con el corazón ni sentir con el cerebro.
Y si hago mis tripas estallar, salirse de mi cuerpo.
La boquilla en mi vientre.O te mato a ti, uno en el pulmón, para que te explote como una piñata o un globo.
Estamos llenos, de purpurina y algodón de azucar, estamos hasta el tope de sentimientos.
Ya no puedo seguir rebalzando.
Bajo el arma a mis pies.
Y si le disparo al sol, así nos deja de molestar los ojos.
De paso le doy un tiro a la luna, tal vez las noches sola me duren menos.El pecho me bombea, vibran mis tímpanos, mis manos tiemblan.
Las pistolas siempren están frías.La subo a mi craneo.
Te jalo del brazo y tiemblas, miedoso, nos estoy salvando.
Así que aférrate fuerte de mi espalda.
Mi pecho se abre, empieza a liberar su magia, su olor a rosas.La pongo en tu nuca y un click mudo.
Veo como embarramos de amor todo el piso.
Un beso es como una bala incrustada el cuello.
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Sigo Sintiendo
PoetryQuítame estos sentimientos de la cabeza, hazlos desaparecer. Así cómo hiciste con todo. Mis lágrimas. Vivo encerraba en latidos, hazlos desaparecer.