Mi Profesor Favorito [Ryuga x Kyoya] (EN EDICIÓN)

Capitulo 4..

Lo se, lo se...Merezco la muerte :'v

Pero aja, mas vale tarde que nunca (Típica escusa que usan las personas que llegan tarde xD)

Como sea, saben que los amo y lo que me duele no serles fieles en cuanto a las actualizaciones u.u

Aquí está el nuevo cap qwq

Muchas gracias por todo por no olvidar mi humilde fanfics qwq

Sin más, espero les guste uwu

-¿Alguna vez le han dicho que se ve muy sexy cuando hace eso?-

Ok, ahora si estabas preocupado, tu propio alumno estaba tratando de coquetear contigo.

-No- respondiste- Y la verdad se me hace muy incómodo viniendo de un estudiante, mucho más si es un hombre- comenzaste a caminar alejándote de él, ya comenzabas a creer que fue mala idea tomar la responsabilidad del chico- Creo que ya deberías irte a tu casa, no deberías estar por ahí tu solo- dijiste seriamente.

-¿Usted se está preocupando por mi?- preguntó con un tono divertido comenzando a seguirte. ¿Cuándo llego al punto de comenzar a hablarte de Usted?

-Es mi deber como tu tutor, niño- dijiste caminando tranquilamente, no le demostraras que esa situación se estaba tornando mucho más incómoda para ti.

-¡¿Niño?!- le escuchaste decir casi como si eso le hubiese dolido, y cuando te diste cuenta ya lo tenías frente a ti. Tu espalda estaba contra la pared más cercana y tenías su rostro muy cerca del tuyo- No, no. Sensei. Usted no entiende...- Ryuga estaba sonriendo engreídamente, pero su mirada te decía que quería matarte en ese momento. Eso hubiera sido aterrador si tú no fueras el profesor de ese chico- YO...- se señaló a él mismo- No soy un niño, soy todo lo contrario a eso. Y puedo probárselo de la forma que usted prefiera...- cada vez Ryuga se acercaba más a tí y ahí es cuando te diste cuenta de que eso ya debía de terminar.

-Como digas, sólo ya vete a tu casa- dijiste rápido escabulléndote fácilmente de su cercanía y comenzaste a caminar más rápido.

-Ay, que lastima. Yo pensé que el Sensei quería su libro de vuelta- al escuchar eso paraste en seco, habías olvidado completamente que ese chico tenía tu tan preciado libro. Lo miraste por encima de tu hombro, el chico tenía una sonrisa triunfadora, imaginaste que sería por lograr su cometido de captar tu atención nuevamente. Sus facciones era tan fáciles de leer que no tenías que esforzaste para saber lo que estaba pensaba. El sacó una de sus manos detrás de su espalda y pudiste ver que tenía tu libro entre sus manos- ¿No le interesaría quedarse un rato más?- preguntó comenzando a caminar lentamente hacia ti.

-Eso es jugar sucio ¿sabías?- dijiste acercándote a él de la misma manera mirándolo con cierto enojo.

-Yo quiero jugar sucio con usted, Sensei- susurró sólo para que tú lo oyeras sin dejar de sonreírte cuando ya ambos estaban frente a frente.

Espera... ¿Qué?

Esa oración tenía doble sentido. Sus finos ojos ámbar pareciera que fueran a devorarte y la manera en la que te sonreía no ayudaba mucho.

¡¿Cómo demonios tu alumno podía llegar a ser tan sexy?!

Espera otra vez... ¡¿Acosa dijiste "Sexy"?!

Ok, ya te estás volviendo completamente loco.

-¿¡Q-Qué clase de cosas estás diciendo, niño engreído?!- retrocediste una par de pasos, estabas nervioso, eso ya había llegado a incomodarte lo suficiente como para sonrojarte por lo que tu alumno te estaba diciendo.

-¿Acaso lo puse nervioso, Sensei?- él nuevamente comenzó a acercarse a ti- No me diga que malinterpretó mis palabras... ¿Tiene la mente tan sucia?- siguió acercándose a ti sin dejar de sonreírte arrogantemente, como si se sintiera tan superior a ti cuando sólo era un niño.

-S-Sólo dame mi libro- trataste de quitárselo de un sólo manotazo alzándote en puntillas pero el alzó aún más su brazo alejando tu preciado libro hasta el punto de que no pudieras ni tocarlo ¿Por qué tenía ese chico que ser más alto que ti? Se supone que tú eras mayor. Estúpida genética.

-Wow, no sabía que usted podía llegar a ser tan atrevido, Sensei...- sus facciones demostraban que estaba emocionado. No entendiste muy bien lo que Ryuga te dijo, no estabas muy seguro de a qué se refería, pero luego te diste cuenta de que su cara estaba a tan sólo unos centímetros de la tuya.

Te pusiste aún más nervioso cuando notaste que esa sonrisa encantadora se formó de nuevo en sus labios, un hombre con una sonrisa como esa debería sacarle más de un suspiro a cualquiera que se parara en frente. Lo hacía ver tan perfecto y maduro que debía ser ilegal. Sentiste su mano colocarse en tu cintura y te pegó un poco más a él sin darte posibilidades de escapar. Tenías que pensar en algo rápido.

Y fue ahí cuando una brillante idea cruzo tu mente...

-Aún no me conoces lo suficiente, niño...- dijiste meloso sonriéndole coquetamente casi imitándolo, entrecerraste tus ojos haciendo que se va más convincente y colocaste tus manos en su cuello pegándote mucho más a él-*Cálmate...Cálmate*- te dijiste a ti mismo cuando sentías que tus manos temblaban y la sonrisa en tu rostro estaba a punto de desaparecer, ¿por cuál razón? Bueno, Ryuga comenzó a bajar "discretamente" su mano por tu espalda, haciendo que te pongas aún más nervioso- No sabes qué cosas puedo llegar a hacer...--volviste a susurrar provocativamente-*Concéntrate, Kyoya...*- te dijiste a ti mismo.

-¿Así? ¿Cómo cuales?- susurró roncamente acercándose cada vez más a tu cara.

-*¡¿Cómo demonios voy a concentrarme si me está mirando de esa forma?!*- gritaste para tus adentros. Ryuga bajó su otra mano, la que tenía el libro, la que te importaba; y la colocó también en tu cintura sosteniéndote fuertemente contra él- ¿De verdad quieres saber...?- susurraste casi inaudible al tenerlo tan cerca para que sólo él pudiera escuchar. Ambas respiraciones de mezclaban y sus narices se rozaban levemente -*Sólo un poco más...*- te dijiste mientras "juguetonamente" tratabas de escapar de los labios de Ryuga, si él te intentaba besar movías tu cabeza a un lado o la echabas para atrás.

-Porque no me lo enseñas...- sus palabras salieron casi en un gruñido, eso se escucho tan condenadamente sensual que se te erizaron los bellos de la nuca, pero debías seguir con tu plan. De verdad a veces olvidas que ese chico es sólo un niño.

-Bueno...- fuiste acercando tu cara lentamente a la de él, entrecerraste más tus ojos casi completamente, Ryuga hizo lo mismo, estabas a punto de besarlo, sólo unos milímetros más...

Y antes de que él se diera cuenta ya lo habías tumbado al suelo con ayuda de una llave de lucha que tu padre te había enseñado cuando eras más joven, y que por cierto no era la primera vez que la usabas con chicos como Ryuga.

-No me vuelvas a tocar ¿Entendido?- le dijiste entre dientes mirándolo con despreció. Un asesino cualquiera ya estaba en entre tus manos nuevamente y pudiste al fin caminar tranquilamente hacia la salida y para de una vez por todas irte a casa.

Veamos si a ese chico le seguirán quedaban más ganas de tratar de insinuársela contigo.

De nuevo lamento el retraso, esto es lo que pasa cuando tienes patria :'v

Puta Venezuela TnT

#VenezolanaForever :'v

Espero que les haya gustado el capítulo, de verdad haré lo posible por actulizarles el lunes de la semana que viene u.u

Los espero a la proxima.

Espero sus encantadores review, saben que me encanta cuando comentan *-*

Nos vemos >wo

Besos <3