Codicia&Altruismo | KaiSoo |

IV

-Kai, despierta. -Kyungsoo con uno de sus libros en la mano seguía agitando a su amo.

-¿Que mierda quieres ahora? ¿No ves que estoy durmiendo? ¡Respeta a tu amo! -Su mirada se dirijo al libro que sostenía Kyungsoo en la mano-¿Por qué tienes eso en la mano? ¿Quién te ha dado permiso a cogerlo?

Kyungsoo tragó saliva al ver el malhumor del amo, la amabilidad había desaparecido de la nada. Levantó el libro y señaló el pequeño nombre D.O.

-¿Te gusta este escritor?

-No sé quién es, pero me gusta su forma de escribir. Lo admiro mucho. -Levantó una ceja -¿Por qué quieres saber?

-Porque...D.O es mi apodo. -Miró fijamente al menor que seguía sin entender.

-¿Y?

-Estas obras son mías, las escribí yo.

Kai se quedó mirando a Kyungsoo como si le hubieran dicho algo extraño, entonces su cara se volvió totalmente roja y el mayor lo notó, por un momento creyó que le había subido la fiebre de nuevo.
Se acercó de nuevo a la estantería y colocó el libro en su lugar, esbozó una sonrisa y volvió a acercarse a Kai.

-Entonces me admiras, ¿eh?

-¡Estás mintiendo! ¿Cómo podría saber que realmente eres tú quien escribes tales bellezas?

-¿Necesitas pruebas? -Se cruzó de brazos -En mi habitación tengo a medio terminar la continuación de esa novela, justamente la que tienes tan bien colocada ahí.

El rostro de Kai era un poema, no sabía cómo reaccionar o qué decir, sólo miraba a Kyungsoo como si acabara de descubrir un nuevo mundo. Entonces comenzó a sentirse mareado y se acostó de nuevo con una expresión de sufrimiento.

-Lo siento, esto es tan repentino, necesitas descansar.-Kyungsoo se levantó y puso una mano en la frente caliente de Kai -Te dejaré tiempo para descansar, iré a mi habitación a dormir un rato.

Cuando se alejó un poco de la cama de Kai sintió una mano agarrarlo por la muñeca, evitando que se moviera del sitio. Se giró extrañado y vio el rostro de Kai con los ojos cerrados y la respiración agitada.

-No te vayas...me encuentro muy mal...Do. -Lo último sonó como una súplica, no pudo negarse más y al ver el malestar de Kai su preocupación aumentó. Agarró una silla que estaba junto al escritorio del dueño de la habitación y se sentó al lado de Kai.

-¿Cuánto de fiebre crees que tienes más o menos? Puede ser peligroso.

-...No lo sé.

Viendo el rostro de Kai, su voz quebrada y su cuerpo levemente temblando pudo suponer que estaba cerca de los cuarenta grados de fiebre, cosa que le preocupaba pues era muy peligroso.

-...Llama a Krystal. -

-¿Qué? No. -De alguna forma eso lo molestó, se había preocupado tanto por el chico y ahora llamaba a otra persona.

-¡Llama a Krystal! -Kai sollozó, Kyungsoo lo miró más que asombrado. ¿Por qué tan débil de repente?

-¿Por qué quieres que la llame?

-...Ella es como mi...madre...-Se encogió entre las sábanas de la cama -Mi madre ya no está aquí jamás.

En ese momento Kyungsoo sintió más confusión que nada, no sabía eso de Kai, probablemente tuviera que ver con su horrible personalidad. Ahora quería abrazarlo y consolarlo, pero sería muy raro para los dos actuar así de afectivos cuando llevan prácticamente un mes rechazándose y tratándose como extraños.