Capítulo 28

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-Louis... cuanto tiempo sin verte...- fue todo lo que pudo decir la chica

-lo mismo digo...- ambos estaban perplejos, tanto tiempo distanciados y ahora, el destino los había vuelto a unir, era simplemente imposible

-¿Supiste que Elizabeth desapareció?- se atrevió a preguntar, y una alarma se encendió dentro de Louis, algo le advertía que tenía que salir corriendo de aquel lugar lo más pronto posible, pero, ¿Cómo hacerlo sin parecer sospechoso?

-si, eso escuché...- fue lo único que pudo decir

-¿Estás ocupado?, porque iba a ir a ver a Zayn y...-fue interrumpida por el chico

-si, estoy ocupado, pero, ¿Te parece si nos mañana por la noche aquí? Tengo algo que decirte...-

-si, claro, pero...-

-lo siento, tengo que irme- y si esperar respuesta dio media vuelta y se alejó, dejando a la chica totalmente aturdida


***

Liam se encontraba en posición fetal y no dejaba de repetir su nombre en un susurro, el nombre de la chica, "Elizabeth", repetía y las lágrimas descendían como cascadas por sus mejillas, ya no podía soportarlo más, estaba perdida y él tenía que encontrarla, aún existía una pequeña chispa de esperanza en su interior.

Algo le decía que aún tenía oportunidad, si tan sólo la encontrara, quizás podría hacerla cambiar de opinión con respecto a su decisión.

Su apariencia no era para nada buena, tenía unas gigantescas ojeras, los ojos rojos e inchados por la falta de sueño, tenía el cuerpo adolorido y no se había afeitado, apenas y tenía fuerzas para bañarse, todo le costaba trabajo, incluso levantarse y acostarse.

Se preguntaba cómo estaría Niall y si Zayn había hecho algo por ayudar, también, lo extrañaba a él, su vida no era la misma desde que el moreno había dejado de hablarle, sus pensamientos fueron interrumpidos por el sonido de su celular que sonaba desde su bolsillo, lo tomó entre sus manos y contestó la llamada

-¿Qué?- dijo apenas contestó, ya no le tenía respeto a su padre

-¿Acaso es forma de hablarle a tu padre?-

-¿Acaso es hora de llamar?- contraatacó, pues eran al rededor de las tres de la mañana

-Necesito que vengas-

-¿Ahora?- dijo Liam casi con un suspiro

-si- contestó su padre tan frío como el hielo

-¿Del uno al diez que tan urgente es?- dijo en un intento desesperado por salvar su noche

-diez- Liam cortó la llamada y soltó un suspiro, se levantó de la cama y se vistió, para luego encaminarse hasta la torre central, en dónde se encontraba su padre, al llegar se adentró en su oficina y se sentó frente a él, como siempre

-bueno, ya estoy aquí, ¿Qué es lo que quieres?- dijo más que irritado, pues prefería pasar la noche en vela pensando en Elizabeth que estar sentado frente aquel hombre

-hay un rumor sobre ti- comenzó su padre

-¿Y?- la conversación lo irritaba cada vez más pues un rumor no le parecía motivo para estar ahí a altas horas de la madrugada

-se dice que buscas a una chica, una prisionera que al parecer desapareció dentro de la prisión- Liam comenzó a ponerse nervioso, las manos comenzaron a sudarle, comenzó a temblar de pies a cabeza, pero no debía mostrar que estaba nervioso, debía mantener su expresión neutral

-¿Y eso a ti qué te importa?- estalló en un intento desesperado por  ocultar los nervios que lo comían por dentro

-no puedo permitir que mi hijo que es un ejemplo para el país se enamore de una criminal- dijo a la vez que azotaba su puño en la mesa -¿Es verdad?, ¿El rumor es cierto?- Liam se petrificó sin saber qué decir

***

Louis regresaba a casa con una maleta en la mano, dentro tenía hilo, aguja, una jeringa y  un poco de anestesia, todo esto lo había cambiado por droga, era para Elizabeth, tenía que curarla, él corría a toda velocidad y si fuera posible volaría, en su mente sólo había espacio para un pensamiento: Elizabeth.

Al llegar entró rápidamente en el cuarto en dónde Elizabeth se encontraba, la encontró entrecerrando los ojos por la pérdida de sangre, su playera que antes era blanca se había teñido de color rojo, y había un pequeño charco al rededor de la silla en donde Elizabeth se encontraba.

Louis abrió la maleta y extrajo la jeringa y la anestesia, quitó su playera de la herida de la chica, sobresaltándola

-Louis... ¿Qué haces?- dijo ella con un hilo de fuerza

-voy a curarte, pero no quiero que sufras, es por eso que voy a dormirte- los ojos de la chica se abrieron como platos y por un momento pareció volver a la vida

-¡No!, ¡No lo hagas!- dijo sobresaltada

-si no lo hago sufrirás-

-no importa- 

-Elizabeth... ¿A qué le tienes miedo?- dijo

-a no despertar... no por mi sino por Niall, ¿Qué será de él?-

-todo va a estar bien...- aseguró

-¿Lo prometes?-

-Lo prometo-

-¿Podrías cantar?- rogó, Louis la miró en silencio por unos instantes pero finalmente cedió

-De acuerdo...- dijo mientras preparaba la anestesia -In the dark, and I'm right on the middle mark, I'm just in the tier of everything that rides below the surface...- la chica cerró los ojos, disfrutando de la melodía que salía de los labios del castaño.

-And I watch from a distance seventeen, and I'm short of the others dreams of being golden and on top- Louis introdujo la jeringa con anestesia lentamente en la herida de la chica -It's not what you painted in my head, there's so much there instead of all the colors that I saw- lentamente la jeringa fue soltando su líquido en la herida de la chica.

-We all are living in a dream, but life ain't what it seems, oh everything's a mess- sacó la jeringa lentamente de la piel de la chica -and all the sorrows I have seen, they lead me to believe, that everything's a mess- la voz del castaño se escuchaba cada vez más lejos a los oídos de la chica, que lentamente iba perdiendo fuerzas -But I wanna dream, I wanna dream, leave me to dream-fue lo último que la chica escuchó, antes de transportarse a otro lugar, un lugar en dónde el dolor no existía, y no había preocupaciones, sólo estaba ella, libre y en paz, el miedo se había esfumado, se sentía en paz, podía descansar

Coldingley PrisonDonde viven las historias. Descúbrelo ahora