Ariana estaba sentada en el sofá, moviendo sus piernas con inquietud, con la vista en el suelo. No podía quedarse ahí sentada sin hacer nada. Necesitaba moverse. Al momento de querer pararse, el teléfono suena. Ella lo coge desesperada y suelta un bufido al atender.
— ¿Quién habla? — dice rápidamente.
— ¿Señorita Grande? — habló su abogado.
— Sí, soy yo. ¿Qué pasa?
— Sólo quería recordarle que mañana temprano venga a mi oficina para terminar lo último de nuestro informe. Es muy importante ya que en unos días será los papeleos de su divorcio y...
— Estoy ocupada. No es el momento — ella colgó.
Ariana bajó su cabeza. Quería llorar, estaba tan preocupada y estresada. Harry bajó las escaleras, y vio a su esposa en el sofá. La oyó sollozar y no dudo en acercarse a ella. Se sentó a su lado y pasó su brazo alrededor de sus hombros. Ariana levantó su cabeza para verlo, ella medio sonrió y dejó caer su cabeza sobre el pecho de él.
— No puedo con esto, Harry. Estoy muy nerviosa. Es nuestro pequeño hijo, ¿qué es lo que lo hizo irse de esa manera? — murmuró con su voz quebrada.
— No tengo idea. Con todo lo que está pasando con nuestros arreglos de nuestro divorcio he estado tan ocupado como para hablar con él...
— Igual. — ella le miró.
Se quedaron mirando, sus ojos se conectaron. Harry cogió la mano de su mujer, y con ese simple toque, Ariana se sintió apoyada, que es lo que más necesita para sentirse tranquila.
— Todo saldrá bien, ¿qué tal si salimos a buscarlo por nuestra cuenta? Llevaremos nuestros celulares por si los policías nos llaman. Yo tampoco puedo quedarme aquí sentado esperando una señal. — dice para después besar la frente de ella.
— Suena bien — ella murmura. Los ojos de ella se humedecen al instante — Lo siento, Harry, lo siento tanto. Eres tan dulce conmigo y yo simplemente soy una grosera contigo. No me mereces, lo entiendo. Sólo espero que sepas que... aunque me cueste decirte a pesar de nuestros problemas... te amo.
— No llores — limpió sus mejillas — Yo siempre estaré enamorado de ti, cielo. Me tienes como la primera vez en el que te conocí. Eres el ser más precioso, mereces todo el amor. Por algo supe que eres para mí, por algo decidí casarme contigo, por algo tuvimos dos hijos. Dos hijos que nos necesitan juntos. Dos hijos a los cual esperan que crezcamos con ellos. Cada minuto contigo lo tengo en mi memoria, ya sean malos o buenos. Todo en ti es parte de mí.
Ariana lo abrazó, lo abrazó con bastante fuerza. Lloró en su camiseta, a él no le importó. ¿Por qué fueron tan idiotas como para pelear? ¿por qué ella fue tan ciega de ver la realidad? ¿por qué se comparó con la jefa de su esposo? Fue un momento de inseguridad y miedo de perderle, pero la que estaba arruinándolo, fue ella misma por sus miedos.
Se separó y besó cortamente los labios de él. Harry sonrió un poco y no dudó en besar la mejilla de ella.
Ambos salieron a buscarlo por las oscuras calles. Ariana tomó la mano de Harry. Tocaron puerta por puerta por la casa de todos sus vecinos para preguntar sobre su hijo y resultó que nadie sabía. Ya cansados de estar casi tres horas caminando, decidieron no parar y seguir. Llamaron a la policía para saber si ellos sabían algo y nada. Eso los preocupó más. Ariana sollozó y Harry sintió sus ojos llorosos. Se sintió el padre más terrible del mundo por no ir por su campeón al momento de que él corrió la última vez que lo vio.
— Mi pobre bebé, ¿estará pasando frío? Su hora de dormir ya pasó, ha de estar cansado y hambriento — Ariana dijo con su voz entrecortada.
— Prometimos nunca separarnos de él... y que seríamos los mejores padres para nuestro pequeño — él continuó — Dios, quiero pegar mi cabeza contra el suelo.
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Life Was | Harry Styles
Fanfiction❝Mis padres no pueden divorciarse, yo sé que ellos aún se aman.❞ Copyright © 2016 osnapitzanie