Capítulo 22 (3/4)

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*Narras tú
Había pasado la noche con pensadillas y hace demasiado que no me pasaba. Cuando me levanté, miré a Ashton que estaba despierto y con unas que le llegaban al suelo.
Ashton: has conseguido descansar algo?
Yo: sí, un poco; y tú?
Ashton: no mucho pero no me importa.
Yo: descansa ahora.
Ashton: no quiero, quiero estar contigo empezar a hacer algo bien en nuestra relación y creo que para empezar vendría bien contarnos todos los secretos primero.
Me quedé en silencio mirándole para que empezará él contando.
Ashton: lo que te dije ayer era todo verdad, también he estado preparándote una sorpresa que te enseñaré más tarde, y en una semana me tengo que a una gira por Estados Unidos y estoy intentando que te vengas conmigo porque pasaremos 2 mese fuera o así.
Yo: se te olvida que no puedo coger un avión.
Ashton: hasta los 7 meses puedes, ya lo miré ayer por la tarde.
Yo: bueno... ya veremos.
Ashton: es tu turno.
Yo: yo... emm... no tengo nada.
Ashton: si que tienes, por qué hay sangre en tu brazo?
Yo: es que eso te va enfadar y no quiero.
Ashton: ya sé lo que es y no me he enfadado pero quiero que seas sincera porque sin sinceridad no llegamos a nada en esta relación.
Yo: pues ayer la ira y la tristeza me pudo y no pude evitar volver a coger la cuchilla y... bueno... ya sabes.
Ashton: anda déjame vértelos, pequeña.
Me subí la manga de la camiseta y Ashton me lo miró. Se levantó y al poco volví con agua oxigenada y gasa para curármelos pero quité el brazo rápido.
Yo: eso escuece mucho, no hace falta.
Ashton: si que hace falta.
Me agarró el brazo y me los curó. Luego me subió el desayuno a la cama y desayunamos. Ashton quería hacer unas cosas que no me quería contar. Salimos de casa y fuimos a una tienda de tatuajes.
Yo: te vas a hacer uno?
Ashton: sí, sigues queriendo el piercing de la nariz que me dijiste hace tiempo?
Yo: sí pero duele.
Ashton: aquí no te hace mucho daño así que si quieres de lo pago.
Yo: venga vale.
Entramos, Ashton se fue por su lado y yo por el mío para que me hicieran el piercing. La verdad es que no me dolió mucho, solo me lloró un poco el ojo y ya. Pasó como una hora hasta que salió Ash.
Ashton: ya estoy, te queda muy bien el piercing.
Yo: gracias, qué te has hecho?
Ashton: esta tarde te lo enseño que ahora está lleno de sangre y no se ve mucho.
Volvimos al coche y fuimos a la casa de Ash. Me dijo que le ayudará a recoger todos los libros y películas del salón pero no sabía del todo para que era. Mientras él recogió la ropa y la comida de la cocina. Cuando estuvo todo lo subió al coche.
Íbamos en coche y Ashton se paró a un lado de la carretera y me puso una venda en los ojos.
Ashton: estamos llegando y quiero que esto sea una sorpresa.
Volvió a arrancar y unos minutos después me estaba abriendo la puerta y ayudando a salir del coche.

Del sexo al amor (Ashton Irwin hot)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora