Del sexo al amor (Ashton Irwin hot)

Capítulo 3

*Narras tú

Me quedé dormida en mitad de la peli.

Ashton: _____, despierta, ya ha acabado

Yo: mm... vale... *dije medio dormida*

Ashton: te llevo a casa?

Yo: vale, y te quedas a dormir si quieres

Ashton: vale

Me levanté de la cama e hice una mueca de dolor ya que me seguía doliendo un poco.

Ashton: estás bien?

Yo: me duele un poco todavía

Ashton: mañana te acompaño al médico

Yo: no hace falta

Ashton: sí que hace falta

Yo: vale...

Nos vestimos los dos, pasé al baño y me peine un poco.

Ashton: ya estás?

Yo: sí, vamos

Era casi de noche ya. Fuimos al coche de Ash, se sentó en el asiento del conductor y yo en el del copiloto y me pasé el camino entero mirando por la ventanilla. ~sólo era sexo y una vez~ ~¿qué estás haciendo?~ ~pff no lo sé ni yo~. Llegamos a mi casa y bajamos, vivía sola, ya que mis padres murieron hace bastante ya pero me seguía molestando un poco, esto fue hace ya un año, cuando todavía estaba con Ash y él me apoyó y me ayudó a salir adelante. Pero eso acabo hace 4 meses cuando lo dejamos porque era famoso, esa fue su excusa. Paró el coche en frente de mi casa pero no me di cuenta por lo exenta que estaba del mundo real.

Ashton: hemos llegado ya

Yo: lo siento, estaba medio dormida

Ashton: tranquila, no pasa nada

Bajamos del coche, abrí con mis llaves y entramos en mi casa. Teníamos hambre los dos así que fuimos a la cocina y metimos dos pizzas en el horno.

Yo: Ash, podemos intentarlo otra vez?

Ashton: no sé

Necesitaba llegar a un orgasmo con placer y no con dolor como antes. Se hicieron las pizzas y nos las comimos en el salón.

Ashton: _____ creo que mañana lo volvemos a intentar, no quiero volver a hacerte daño

Yo: no lo harás, Ash, lo necesito, por favor *dije desesperada*

Ashton: mañana, te lo juro

Yo: pff duermes en la habitación de siempre

Me fui corriendo a mi habitación y me tiré en la cama. Necesito tener un orgasmo de placer. Me acordé de una caja que de dio Belén y me dijo «para después de hacerlo con mi hermano». Me levanté rápido y la busqué, cuando la encontré la puse en la cama y la abrí desesperada, esperando que me sirviera de algo. Era un consolador y una nota:

  »Sé que mi hermano la perderá contigo y como seréis novatos los dos, te dolerá y mucho. Entonces él no querrá repetir por miedo a volver a hacerte daño, pero tú estarás necesitada, ya que querrás llegar a un orgasmo con el mayor placer del mundo. Entonces el consolador es para que consigas llegar con placer y a lo mejor así mi hermano te hace llegar a uno también«.

Me di cuenta que Belén nos conocía muy bien a mí y a Ash. Cogí el consolador y quité la caja de la cama. Me quité los pantalones y las bragas, me puse de rodillas en la cama y me lo metí.