Capitulo cinco.
Sentí el aturdidor ruido de mi celular, gruñí y al instante que lo hice dejo de sonar. Mis fosas nasales se llenaron de un rico olor a vainilla. Suspire y me moví, me choque con el cuerpo de Destiny, bien, tenía que abrir los ojos.
Abrí uno y después el otro, aun el sol no salía, pero dentro de todo había más luz que anoche. Destiny me estaba dando la espalda y su pelo estaba desparramando por toda la almohada. Suspire y me acerque a ella mientras ponía una mano por su cintura.
Mi celular sonó de nuevo. Estire la mano y mire la pantalla, ayer me había olvidado apagar la alarma semanal que me despertaba a las siete. Lo cambie para que sonara a las nueves y volví a abrazarme a Destiny. Ella jadeo y se movió un poco.
-Tu estúpido celular me despertó.- La voz ronca me sorprendió, levante las cejas. Se volteó y su cara quedo frente mi pecho.
-Lo siento.- Le susurre, ella suspiro y luego rio. –Anoche me eh olvidado apagarlo.- Se acerco un poco más y puso una pierna entre medio de las mías. Me beso el pectoral y apoyo su frente ahí. Yo me estremecí. Tome su barbilla con mi mano y levante lentamente su cabeza, la mire dos segundos, así recién despierta, con su carita soñolienta y la bese, corto y lento.
-Ahora no me podre dormir.- Gruño, yo reí.
-¿Vamos a desayunar?- Le pregunté. Ella me miro y luego se vio así misma.
-¿Me pusiste esto vos?- Pregunto con el ceño fruncido. Yo trague saliva.
-Sí ¿Hay algún problema?- Pregunte, ella negó con la cabeza. -Está bien, vamos a desayunar.- Se separo un poco de mi y se sentó en la cama, dándome la espalda. Tomo su ropa que estaba en una silla y se saco lentamente la remera, aun dándome la espalda. Yo la miraba mientras me mordía el labio. Tenía buen cuerpo, ni flaca, ni gorda, normal. Con un lindo trasero redondo, y sus pequeños pechos, la hacían tan hermosa.
Después de ponerse la remera suya, se paro lentamente y se saco el pantalón, lentamente. Ella se dio vuelta y me sonrió, me sentí avergonzado enseguida. Se termino por abrochar su pantalón y me miro. -¿No tenes pensado cambiarte?- Pregunto, yo asentí y hice lo mismo.
Estacione el auto enfrente de una cafetería y mire a Destiny, tecleaba algo en su celular mientras se mordía el labio inferior, miro para el frente y luego a mí.
-¿Bajamos?- Le pregunte con las cejas levantada, ella guardo su celular y asintió. Bajo del auto y yo también, caminamos juntos hasta dentro.
-Le estaba avisando a mi mamá que me había quedado a dormir en casa de Camille.- Nos sentamos en una mesa.
-Está bien ¿Queres café?- Le pregunte. Ella asintió. –Bien, ya vengo.- Me dirigí a el mostrador. Una chica con su cabeza llenas de rulos y unos ojos chocolate me miro y sonrío. Le devolví la sonrisa algo incomodo.
-¿Qué va a pedir?- Preguntó, mientras pestañaba repetidamente, estaba sintiéndome incomodo.
-Dos cafés, gracias.- Le dije, ella asintió. Tecleo algo en su computadora e imprimió un papel.
-Espere a ser llamado a su número.- Me dio el papel con un numero y nuestro pedido, le asentí y me volví a la mesa, Destiny miraba por la ventana, el día estaba nublado.
-¿Linda la camarera?- Me pregunto cuando me senté a su lado. Yo la mire confundido y bese su mejilla.
-No.- Le dije sin despegar los labios de su mejilla. Me separe mientras la miraba. –Tenemos que hablar.- Ella se quedo unos segundos en silencio.
-¿De qué?
-Sabes que si esto siga sucediendo, no le tienes que decir a nadie ¿Verdad?- Ella asintió. –Ni siquiera a Camille.- Ella me miro y se mordió el labio, me sentí un poco mal, pero no me iba a arriesgar.
ESTÁS LEYENDO
Los secretos de un consejero y su alumna.
FanfictionNo tenían muchas cosas en común, sus edades eran distintas, sus maneras de caminar no coincidían y mucho menos la estatura (él para besarla tenía que agacharse o de lo contrario ella encontrar un murito para parase y llegar al puerto de su boca) cas...