"Recuerda"

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SAM POV

Las palabras de Álvaro me dieron fuerza, quería despertarme, decirle que estaba aquí con él, apretarle la mano y no soltarle nunca. Pero no podía, era incapaz de mover un solo músculo de mi cuerpo.

Debido a eso mi cuerpo entró en estado de pánico, me faltaba el aire y la sensación de agobio aumentó. Un pitido muy molestó sonó y empezaron a tocar todos los cables que tenía por el cuerpo.

Me quitaron la mascarilla de oxígeno y pude respirar mucho mejor, pero me seguía faltando el aire.

Abrí un poco los ojos y vi un montón de médicos a mi alrededor. Estaban alterados, sin saber que hacer conmigo mientras yo intentaba hacer todo lo posible por respirar.

-¿Eres asmática? - preguntó una enfermera que estaba a mi lado.

Negué con la cabeza porque no podía decir ninguna palabra.

-¡Es un ataque de asma, traer un inhalador! - gritó un médico.

La chica que estaba a mi lado salió corriendo mientras yo me centraba en respirar. No pasaron ni 10 segundos cuando la chica regresó con un inhalador. Yo nunca había utilizado uno de esos así que tuvieron que hacerlo ellos por mí.

Después de tranquilizarme y de que me quitaran algunos cables me explicaron que sufría de asma. Lo que a veces parecían ataques de ansiedad cuando me ponía muy nerviosa, era asma.

-Esto siempre contigo, puede salvarte la vida - dijo una enfermara señalando el inhalador.

Asentí con la cabeza.

-Hay dos chicos esperando fuera, les digo que pasen.

-Sí por favor.

Quería estar con Álvaro, abrazarlo hasta sentirme segura de nuevo. La enfermera salió y un minutos después Álvaro entró junto con Carlos.

No pude aguantar las lágrimas y comencé a llorar. Corrió hacia mí y me abrazó con cuidado porque tenía el brazo izquierdo escayolado.

-Shh, tranquila cielo - me dijo al oído.

Después abracé también a Carlos. Tenía que contarles todo lo que pasó, contarles que he matado a mi propio hermano y que mi madre y el padre de Álvaro están muertos por unos disparos que salieron de la nada.

-Tengo que contaros todo lo que pasó - dije quitándome las lágrimas de los ojos.

-Tienes que descansar, no hace falta que nos lo cuentes ahora mismo.

-Álvaro, tengo que hacerlo, necesito soltarlo todo de una vez - mi tono de voz era de desesperación.

Álvaro se sentó a mi lado en la cama y Carlos cogió una silla.

-Después de que tu padre te pegara, aparecieron disparos de la nada, no sabía de donde venían y automáticamente nos tiramos todos al suelo. Intenté llegar hacia a ti - miré a Álvaro y le cogí de la mano - pero Dean llegó mucho antes que yo. Te estaba apuntando con una pistola, te iba a matar.

Me esperé unos segundos para tragarme el nudo de la garganta y poder seguir adelante.

-Tenía que dispararle, tenía que salvarte la vida. Le di en la pierna derecha y te soltó pero no se dio por vencido. Él también me disparó, pero era tanta la rabia que sentía en mi interior que le disparé. Maté a mi propio hermano, no dejé de disparar hasta que no me aseguré de que su cuerpo estaba sin vida.

No podía aguantarlo más, la culpa invadió todo mi cuerpo, sentí escalofríos y las lágrimas comenzaron a salir por sí solas.

Álvaro me abrazó y no dijo absolutamente nada, sabía que por mucho que dijera nada iba a cambiar toda esta situación.

"No matter what they say" (Álvaro Auryn)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora