"No matter what they say" (Álvaro Auryn)

"Cueste lo que cueste"

ÁLVARO POV

Carlos logró tranquilizarme junto con Adrián en el pasillo de la clínica.

No entendía la actitud de Blas y estaba demasiado afectado con lo que había sucedido con Sam.

Quería salir de aquí e irme a buscar a Sam como loco, no iba a permitir que se casara con Luke.

Después de unos minutos salieron de la habitación David y Dani bastante cabreados.

-¿Qué ha pasado? - preguntó Carlos.

-Será mejor que nos vayamos en casa, allí os lo contaremos - dijo David quitando importancia.

No muy convencidos nos fuimos hasta el coche y en media hora estábamos en casa.

No era capaz de cruzar esa puerta, la mayor parte de los rincones de la casa me recordarían a Sam.

Puede que cambiemos mucho de casa pero en todas hay algo especial y vivimos momentos especiales.

Me paré en frente de la puerta unos segundos y los demás se dieron cuenta.

-Tranquilo, todo va a estar bien - me animó David.

Asentí con la cabeza y entramos.

-¿Nos vais a contar lo que ha pasado con Blas? - dije un poco cabreado.

-No quiere saber nada más de nosotros.

Esas palabras de Dani me dejaron anonadado. Blas no podía haber dicho esas palabras.

-Ha sido un topo, nos ha traicionado, por eso no pudisteis escapar de la ciudad, por eso siempre nos encontraban en todos los lugares en los que estábamos. Él estaba detrás de todo eso.

Me levanté del sofá y comencé a negar con la cabeza. Él no podía haber hecho eso, era imposible. Confiábamos en él como si fuera nuestro hermano mayor, era el que nos ayudó cuando no teníamos nada, el que nos acogió en su casa cuando empezamos con todo esto.

-Eso...eso es imposible - dije tartamudeando, la palabras casi ni me salían.

-Ahora todo cuadra - susurró Carlos.

......

1 semana, 7 días, 168 horas desde que sucedió todo.

Me estoy volviendo loco, hemos buscado por todas partes de la ciudad y no está en ninguna.

Adrián no sabe en qué lugar puede estar. Si no está en ninguno de los que hemos buscado, significa que está fuera de la ciudad.

Me levanté y bajé a la cocina.

-Buenos días - dijo Carlos que ya estaba levantado.

-No puedo más Carlos, un día más sin ella y me voy a volver completamente loco.

-La vamos a encontrar Álvaro, cueste lo que cueste.

Asentí y cogí una taza de café. Estábamos en silencio cuando mi móvil sonó. No sabía quién podía ser.

-¿Si? - contesté confuso.

-Álvaro, soy yo - era la voz de Sam.

Casi se me saltan las lágrimas de la emoción.

-¡Sam! ¿Dónde estás cielo? ¿Estás bien? - tenía que saber si estaba bien, si Luke la había puesto una mano encima.

-Tranquilo, estoy bien - esas palabras no me sonaron muy convincentes pero no era la ocasión para que se abriera, teníamos que ser fuertes los dos.