capitulo 29

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Pov Christian

Una luz en mi cara me obliga a abrir los ojos, siento como la cabeza quiere estallarme en mil pedazos- ¿Dónde estoy?- cuando mis ojos se adaptan a la luz me doy cuenta que me encuentro en mi habitación, lo que no comprendo aun es como carajos llegue aquí. Hago un recuentro mental de lo sucedido y son muy confusas las imágenes que llegan a mi cerebro- esperando alegremente a que Ana llegara, encuentro con Leila, discusión con Leila, luego tomar como un idiota hasta el punto de casi no recordar nada más. Pero que idiota soy. Como dejé que esa tipa se metiera en mi mente e hiciera que reaccionará de tal manera, y ahora recuerdo algunas otras cosas como el hecho de hacer llorar a Ana, luego un golpe propiciado por ella- sin darme cuenta acaricio la mejilla donde me golpeó, bueno no era para menos fui un completo idiota así que estoy seguro que merezco todo su odió. Será mejor que me de prisa y valla a la oficina a pedir una buena disculpa a Ana por mi espantoso comportamiento de ayer. Este dolor de cabeza no me deja ni respirar así que en definitiva necesito un baño con urgencia.

Una vez aseado y creo que con mejor semblante que como levante, salgo a la cocina por algo que comer y mejor que tomar, ya que me siento la garganta muy seca. Gail al verme no puede evitar la molestia que siente, lo cual me indica que esta muy enojada conmigo

-hola Gail. Buenos días- le digo como un niño esperando el regaño que no demora en llegar

-no le veo nada de bueno señor Grey- y por el tono no digo enojada, lo que esta es que hecha humo por las orejas- como es posible que llegaras en el estado en que llegaste anoche, jamás me imagine verte así, siempre he presumido lo maduro y responsable que eres por Dios, llegaste prácticamente muerto- me dice bastante alterada-  no te imaginas el susto que me diste, y entiendo que no soy nadie acá para decirte que hacer, pero por favor evita para la próxima tomar tanto como anoche.

-lo siento Gail, sé que mi comportamiento no fue el correcto, y lamento que te asustaras tanto por la condición en la que llegue, pero ayer surgieron cosas y situaciones que me tomaron por sorpresa, prometo controlarme- le digo muy apenado con ella, sé que me quiere mucho y que por eso se preocupa por mí.

- ah y para completar llegaste diciendo algo así como "no quiero que tú te parezca a ella Ana, no tu eres mejor que eso" no sé realmente que significa pero se nota que te afecto mucho algo y también por las condiciones en las que estabas y lo que dijo puede que hallas lastimado a esa chica, así que te aconsejo que comas algo y organices tu vida.- las palabras de Gaíl me dejan mucho que pensar y sé que algo tuvo que pasar para que Ana me golpeara según lo poco que recuerdo es que hasta la hice llorar y que soy un total animal. Tal como me dice Gaíl como algo y voy a mi habitación a cambiarme una vez listo me dirigí al salón por Taylor para ir a la empresa, estoy ansioso por ver a Ana y si es posible ponerme de rodillas y pedir disculpas hasta que me perdone. Taylor está bastante serio y opta por tratarme de manera indiferente y como si ante el no estuviera su amigo y a adoptado totalmente el papel de empleado, una vez llegamos a la empresa me siento tan impaciente por llegar a verle, el trayecto en el ascensor se siente muy lento para mi gusto. Cuando las puertas se abren mi vista se dirige automáticamente a su lugar de trabajo pero desafortunadamente su puesto esta vacío, me preocupa pensar que renunciara debido al comportamiento, mentalmente voy rogando a Dios que me este equivocando ante ese pensamiento. Andréa se acerca a mí de manera profesional como siempre

-buenas tarde señor Grey. Por la hora ya no lo esperábamos por acá- dice ella frunciendo en ceño un poco aunque luego se recompone

-buenas tardes Andréa, si a la final me pareció adecuado venir a adelantar trabajo pendiente antes de nuestro viaje el lunes. –le digo restando importancia- y la señorita Steele no vino hoy? –pregunto con precaución

Mi Empleada MI amor. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora