45

371 21 0
                                    

Era lunes por la noche y yo seguía en la oficina, como iba a tomar un par de días libres porque finalmente zayn y yo nos iríamos de vacaciones, tenía que dejar todo listo en la oficina. Estaba concentrada respondiendo unos meils cuando escuché que tocaron mi puerta, giré la cabeza y casi me da un paro cardíaco cuando vi que era Alonso.

– ¿Tú?, ¿qué haces aquí? – pregunté más que sorprendida.

– Buenas noches, yo muy bien, aunque no tanto como tú – exclamó con una gran sonrisa entrando y se quedó de pie del otro lado del escritorio.

– Buenas noches ¿cómo estas?

– Que diferencia, primero los saludos y luego lo que quieras.

– Ahora sí me puedes decir a que debo el honor de tu visita.

– Mi mamá me pidió que te entregara esto – respondió entregándome un sobre blanco en el que estaba escrito mi nombre con una hermosa letra – le has caído de maravilla ya que ha sido muy selectiva con los invitados no sé que le hiciste, pero te quiere ahí.

– Alonso, pero yo... ¿tú quieres que yo vaya?

– Sería divertido, va a ser en Miami, imagínate, el mar, la playa, el sol, la arena, tú y yo desnudos al anochecer – respondió mientras caminaba y se paraba junto a mí, recargado en el escritorio, yo hice un poco la silla para atrás, nerviosa – además, mamá no te perdonaría tu ausencia y sabe dónde encontrarte y no querrás conocerla enfadada.

– Trataré, pero la verdad no te lo aseguro.

Me dio una de esas sonrisas arrebatadoras que elevaba mi pulso a mil y entonces recordé lo que había fantaseado con él en varias ocasiones, mi corazón se aceleró ante semejante idea, no imaginé que pudiera cumplirla, lo bueno es que pasaban de las ocho y no había nadie más en la oficina, salvo los vigilantes pero se encontraban en la planta baja, así que decidí arriesgarme.

– Necesito ir a la oficina de mi jefe por unos papeles – dije para despistarlo, quería tomarlo por sorpresa.

– Está bien, te espero.

Le di una pequeña sonrisa y salí, entré a la oficina de Carolina y le agradecí su vanidad como nunca antes. Me miré en el espejo que tenía pegado detrás de la puerta y arreglé un poco mi cabello, no sé para que con lo que tenía planeado hacer. Caminé de puntas a mi oficina y lo vi sentado sosteniendo y mirando una foto mía con zayn, se me había olvidado que la tenía ahí. Cerré despacio la puerta de la oficina y le puse el seguro, caminé tratando de no hacer ruido y cuando estuve a su lado, le quite el portarretratos de la mano y lo puse con la foto hacia abajo sobre el escritorio.

Ardiente Tentación (Alonso Villalpando Y Tu)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora