No le encuentro sentido.
Ni a ti.
Ni a mí.
Ni a nosotros.
Ni a nada.
Te fuiste: con un 'te quiero', un 'no llores', un 'adiós'. Y parece mentira que después de tanto tiempo esas palabras sigan resonando en mi cabeza.
4 meses después volviste, solamente por unos minutos, añadiendo un 'nunca te he odiado y nunca he dejado de quererte', acompañado de un beso y de los abrazos más bonitos que jamás sabrás darme.
10 meses después sigo aquí, por suerte. Buscandote en cada rincón de Madrid, y por todos y cada uno de los sitios en los que solíamos besarnos; pero me da asco solo poder encontrarte entre toda esa mierda de recuerdos y no en el estúpido presente.
Quizá necesites tiempo, quizá necesites cambiar, o quizá no necesites nada para darte cuenta de cada uno de los detalles que voy dejandote por el camino: un absurdo mensaje que el alcohol me hace enviarte, una sonrisa traviesa mientras estás hablando y no me miras, una lágrima que se escapa justo en el momento en que te vas y no te despides de mí.
La pared aún guarda esa mierda te "dibujo" que hiciste con un mechero, el día en que te despertaste y las únicas palabras que articularon tus labios fueron "te amo" en mi oído izquierdo.
Mi pierna aún guarda aquella vez que me quemaste con un cigarro.
Mis ojos aún guardan lágrimas que faltan por derramarte.
Mis oídos aún guardan susurros.
Mi cabeza aún guarda recuerdos, besos, palabras, miradas, sonrisas, segundos, días y meses.
Mi corazón aún guarda el amor que te he dado y el que me queda por darte el resto de mi vida.
Qué triste saber que tu pared no guardan ninguno de mis dibujos, que tu pierna no guarda ninguna quemadura porque detestaba el tabaco, que tus ojos no guardan lágrimas porque nunca has llorado por mí; ni si quiera tus oídos guardan alguno de mis susurros. Tu cabeza directamente ni me recuerda y tú corazón, amor, tú corazón está vacío. Nunca has sabido quererme ni sabrás hacerlo.
No te encuentro sentido alguno, mi vida.
Vuelve.
Vete.
Vuela.
Pero no hagas que deje de quererte nunca, por favor. Es la única cosa a la que le encuentro sentido, aunque no estés aquí, aunque te hubieses ido hace 10 meses con un 'te quiero', un 'no llores' y un 'adiós'.