Capítulo 19.Lunes 19 de septiembre de 2016.

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  - Yo el sábado fui al centro comercial, a comprar la ropa para la bienvenida –Él sonríe más- y bueno, pasé por una tienda departamental para bebés, creí verte –La sonrisa de él se borra poco a poco- ¿eras tú el que estaba allí?
- No... -Niega mirándote raro- lo más seguro es que me hayas confundido, querida –Ríe levemente y sonríes-
- Es que, juro que ese chico se parecía tanto a ti. Era tu doble, de verdad James –Sueltan una carcajada leve-
- ¿Se parecía mucho a mí en la cara? –Bromea y niegas-
- Nah, lástima que no pude verle el rostro

Narra James:
Mierda, casi estuve a punto de cagarla, qué bueno que no volteé porque no sabría qué explicación darle sobre que estuve en esa tienda para bebés.
Es que fui con Halston para comprar el carrito/carriola y un tipo de cuna donde metes al bebé y la cuna es portátil, MIERDA, SÍ, NO SÉ CÓMO SE LLAMA ESA COSA. Soy padre primerizo.
Y aunque Halston también es primeriza, pero ella sabía cómo se llamaba todo eso.

- Pues de seguro ese era mi doble –Te guiña el ojo y ríes-
- Sí, no te imagino siendo padre James –Murmuras y él asiente-
- No, ni yo me lo imagino... -Menciona más para sí mismo-
- Por cierto, ¿tú estarás en la fiesta de bienvenida?
- Sí... pero a la vez no quiero, no es por ser arrogante o un creído, pero muchas chicas no me dejarán en paz, querrán bailar todas conmigo y la verdad no quiero ser grosero, pero también quiero disfrutar
- Te entiendo... -Asientes-
- ¿Acaso a ti tampoco te dejan en paz los hombres? –Arque una ceja y niegas riendo-
- Claro que no, no soy como Chloe, de hecho su novio Matthew se ha peleado varias veces con chicos que coquetean con ella. Pero no, de hecho, no sé por qué Luke se fijó en mí... él era muy diferente a lo que yo soy
- Ánica, ¿por qué dices eso? ¿por qué crees que Luke no debió haberse fijado en ti?
- Porque... no lo sé, él era popular, tenía muchas chicas a sus pies y yo... no lo sé, muy pocos chicos se acercaban a mí, era algo que no puedo comprender
- Vous avez tort, belle –Dice James en francés-
- ¿Qué dijiste?
- Que estás muy equivocada, preciosa... -Te sonríe-
- No, no lo estoy... -Bajas la mirada, de la vergüenza que sentías en ese momento-
- Claro que sí, eres una chica demasiado, demasiado preciosa... -Toma tu mejilla y subes la mirada para verlo a los ojos, sonríes-
- ¿Tú crees que lo soy?
- Yo creo que eres mucho más que eso... -Responde y poco a poco se va acercando a ti. Pero el celular de James suena-

Aggggg, mierda.

- ¿Bueno? –Contesta-
- James, hola –Saluda Peta. James gira los ojos-
- Hola
- ¿Hoy viniste a la escuela? No te he visto, ni en la sala de maestros
- Sí, hoy vine
- ¿Dónde estás?
- Tuve que salir, y creo que llegaré unos minutos tardes a la clase que me corresponde...
- Oh, cariño, quería verte
- ¿Te parece si nos vemos saliendo? ¿a qué horas sales?
- A las 2:00, ¿tú?
- También, te busco al rato, adiós –Cuelga-
- ¿Qué sucede James? –Preguntas al ver su cara de fastidio-
- Nada importante, querida...

Narra Ánica:
Terminando el receso, fui a mi clase correspondiente, aunque sé que no haría nada. Pero es que James me acompañó, la clase que le tocaba dar estaba a tres salones del mío, por eso.
Saliendo de la escuela, fui a una tienda de regalos que estaba cerca del instituto, era para comprar los regalos de mis hermanos. Pues mañana Dylan cumplía dos años y pasado mañana Harper cumplía doce. Lo que había guardado, lo gasté para comprar dos pequeños regalos para ellos.
Pasé por un restaurante y ¿vi a James con Peta? ¿James y mi maldita maestra de baile?
Entonces sí era cierto lo que Kourtney me dijo el viernes, que vio a James y a Peta entrar a la biblioteca, que iban tomados muy cariñosos. Aggggg, zorra.
Aunque pude darme cuenta de que él escuchaba lo que decía, pero no le dedicaba una sonrisa o estaba cariñoso con ella.
...Pero ella lo miraba con esa sonrisa coqueta que conozco, cuando estaba un profesor temporal (Cuando una maestra le dieron dos meses de incapacidad porque estaba embarazada), él era muy guapo, realmente. Y pues como hay muchas arpías en la escuela, no sólo me refiero a alumnas, sino también a maestras, y ella era una de las primeras en hacer filita para que ese profesor le hiciera caso.
Me fui a mi casa con un pequeño enojo.
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Narra James:
A veces Jane podía desesperarme, ella quería que le diera corazones y flores, que le diera amor. Pero no, ella no me interesa como una pareja formal. Sólo para pasar el rato y ya, pero es tan estúpida que no se da cuenta o no le molesta que yo sea así con ella.
Llegué a mi departamento y fui por un vaso de agua, en la barra vi las fotos del ultrasonido de hace unos días. Y recordé el día sábado, cuando estaba con Halston comprando las cosas para el bebé.

(Flashback)
- Yo el sábado fui al centro comercial, a comprar la ropa para la bienvenida –Él sonríe más- y bueno, pasé por una tienda departamental para bebés, creí verte –La sonrisa de él se borra poco a poco- ¿eras tú el que estaba allí?
- No... -Niega mirándote raro- lo más seguro es que me hayas confundido, querida –Ríe levemente y sonríes-
- Es que, juro que ese chico se parecía tanto a ti. Era tu doble, de verdad James –Sueltan una carcajada leve-
- ¿Se parecía mucho a mí en la cara? –Bromea y niegas-
- Nah, lástima que no pude verle el rostro
- Pues de seguro ese era mi doble –Te guiña el ojo y ríes-
- Sí, no te imagino siendo padre James –Murmuras y él asiente-
- No, ni yo me lo imagino... -Menciona más para sí mismo-
(Fin de Flashback)
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Martes 20 de septiembre.
Narra Ánica:
Hoy llegué a la escuela, creo que tenía más ánimo que otros días, era porque es cumpleaños de Dylan, mi hermanito. Y quería contarle a James, porque me gusta que él me escuche.
Ahora quise en el tercer módulo, cuando nos tocaba, él llegó al salón y fui a saludarlo. Le hablé bajito para que no escucharan las demás. Le dejé una nota discretamente.

*¿Te molesta si te pido que vayas a las gradas de las canchas de futbol? Es que ahora quiero estar al aire libre. Te esperaré *

Me senté en mi lugar y vi que James estaba leyendo mi nota, subió la mirada y me sonrió. Supongo que eso era un sí.
Me di cuenta de que tenía un lunar en la parte derecha del cuello, luego abajito uno más pequeño, pero estaban casi juntos.

- Hey... -Dice James subiéndose a las gradas-
- Qué bueno que viniste –Mencionas-
- Esta vez te traje una hamburguesa, porque, ¿quién no ama las hamburguesas? –Ríes-
- James... me encantan las hamburguesas –La tomas- pero me siento mal que siempre me traigas algo que comer –Mencionas avergonzada y él niega-
- No te sientas mal, puedo permitírmelo y no me molesta. Anda –Hace un gesto indicándote que la comas- de hecho me sorprende que no hicieras un gesto de asco, la mayoría de las chicas prefieren ensaladas
- Pues es porque les da vergüenza con los demás, porque no quieren verse feas para los hombres. Les da pena cuando las invitan a salir y dicen preferir una ensalada para que ellos no piensen que puede comer más, para que ellos piensen que le gusta cuidarse... Pero, están mal, ¿a quién no le gusta la grasa? –James ríe, mirando lo tierna que eras. Le das una mordida- yo prefiero no privarme de las cosas que me gustan, como por ejemplo el chocolate, tiene muchas calorías, ¿y? Lo prohibido atrae –Dices después de tragar-
- Sí, tienes tanta razón –Responde mirándote- Por cierto, ¿qué me querías decir?
- Bueno, no es tan importante en realidad –Te encoges de hombros- sólo te quería contar que estoy feliz porque hoy mi hermanito cumple dos años... -Sonríes-  

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