Me Enamore De Mi Profesor

Capítulo 30.Viernes 30 de septiembre de 2016.

  Narra Ánica:
Estaba divirtiéndome demasiado con James, y me he dado cuenta que a pesar de que tenga veintiséis años, le gusta divertirse como a uno de diecinueve. Además, cuando se volvió a lanzar al agua hizo una mortal o un giro mortal, para atrás. No sé cómo se diga pero wow, no me esperaba eso de él. Él es muy divertido fuera de la escuela.

- Hacía meses que no me divertía así –Mencionas sentada alado de James en el borde de la piscina-
- Sí, yo tampoco, porque no he tenido tiempo, más que nada por eso –Dice y pasa un brazo por tu hombro-
- Me gusta mucho ir a parques acuáticos y a la playa, pero no lo sé –Te encoges de hombros- cuando he ido a fiestas en casas grandes con piscina o a fiestas en la playa, me puedo dar cuenta de que muchas chicas solamente van a lucirse, realmente no van a disfrutar el jugar con agua
- Pero afortunadamente tú eres de esas chicas que les gusta divertirse –Besa tu mejilla y sonríes-
- Sí, y tú también, y me gusta porque puedo aventarte agua sin que te enojes –Te inclinas un poco abajo y tomas agua con tu mano sana y se la echas a la cara, comienzas a reír-

Me levanté rápidamente y empecé a correr para que James no me alcanzara, y gracias a Dios que el suelo no estaba resbaloso a pesar de que tuviera un poco de agua gracias a que James y yo nos lanzábamos y salpicábamos hasta afuera de la piscina.
Cuando me alcanzó me tomó por la cintura y me alzó unos cuántos centímetros del suelo, quería zafarme pero él era mucho más fuerte que yo. Comenzó a hacerme cosquillas.

- Me he dado cuenta que las cosquillas son tu punto débil –Menciona y ríes-
- James por favor suéltame –Pides retorciéndote pero él se ríe contigo-
- No, te he dicho que me vengaría –Te hace todavía más fuerte-

Cuando vio que en serio estaba casi privándome de la risa, fue cuando me dejó de hacer las tormentosas cosquillas. Me bajó y nos lanzamos al agua; ambos estábamos flotando. Y pude ver que se veía tan sexy así, mojado, con las gotas resbalándole por la cara... y esa perfecta sonrisa que me gusta mucho mucho mucho.
Me acerqué a él y lo besé, oh puedo decir que sus besos son lo mejor en este mundo.
Ánica, ¿te das cuenta de que te gusta tu profesor de matemáticas? Un profesor al que no le has estado poniendo atención a su clase pero sí a sus perfectas facciones, perfectas y hermosas.
Un rato después, cuando el cielo tenía un tono entre anaranjado y rosa, decidimos entrar a la casa porque empezaría a hacer aire y sentiríamos frío. Me puse mi bata y James una toalla; entramos y pude sentir más fresco en la casa que allá afuera.

- ¿Te parece si primero nos duchamos y luego bajamos a comer? –Propone y asientes-
- Sí, pero que sea rápido porque muero de hambre

Me duché en el baño de la habitación de James y él se duchó en el baño de la habitación para invitados. Me puse un short y una blusa de tirantes porque nuevamente me empezó a dar calor, y me hice una coleta alta, dejando algunos mechones sueltos que no podía peinar.
Bajé a la cocina y vi a James con un jeans que dejaba ver un poco sus bóxers de Calvin Klein... y una playera negra, que hacía que marcara sus músculos, bíceps... Oh Ánica, eres tan afortunada.

- ¿Qué comeremos? –Preguntas y él te mira de pies a cabeza, te sonríe-
- No lo sé, puedo hacer espagueti a la boloñesa –Te guiña un ojo y sonríes-
- Quiero ver qué tal te queda –Mencionas y te sientas en la barra, sin dejar de verlo-
- Créeme, sé cocinar demasiado bien –Saca de la nevera salsa de tomate y unos cuantos ingredientes más-

James sacó de la alacena una bolsa de pasta para espagueti, sal y condimentos para la carne. Te quedaste mirándolo y no dejabas de observar sus movimientos... Y pudiste darles la razón a las chicas de la escuela y por qué eran tan arrastradas con él.
Estaba alto, tenía espalda ancha, buen trasero, parecía que hasta era un modelo de Calvin Klein, porque todo lo que traía puesto era de esa marca. Te gustaba mucho el lunar en el cuello en la parte derecha, su cabello... todo de él. Te quedaste embobada, mirándolo.

- Ahora sólo queda que esperemos a que esté, como en veinte minutos –Menciona y reaccionas, ni siquiera te habías percatado de cuánto tiempo había pasado-
- Ah, sí –Asientes- pues tenemos que esperar a que la pasta se cosa bien –James ríe al darse cuenta de que estabas distraída, mirándolo-
- Cada día conozco algo nuevo de ti, Ánica –Dice acercándose a ti y acaricia tu cabello- y por ejemplo hoy, puedo darme cuenta que no eres una persona que puede disimular las cosas
- ¿P-por, p-por qué lo dices? –Preguntas algo nerviosa por su cercanía a ti, tenía tomado un mechón de tu cabello que estaba húmedo. Y estaba entre tus piernas que estaban colgando porque estabas sentada en la barra. Te diste cuenta de eso cuando bajaste la mirada, la volviste a subir-

James es la segunda con la cual siento nervios de estar tan cerca con él. Con Luke perdí los nervios hace demasiado tiempo... pero con James no lo sé, tiene algo que me pone la piel de gallina y hace que mis labios tiemblen. Creo que tal vez es por la forma en que me mira... me distrae.
Pero, ¿cómo no estarlo? Mi sexy profesor se ha fijado en mí y soy la única chica (espero) que está con él así, y al hablar puedo ser muy torpe porque se me van las palabras. No quiero que vaya a pensar que me da dislexia cuando está cerca de mí.

- Pues porque hay dos razones –Acaricia tu labio inferior- la primera es que, soy una persona demasiado observadora. Puedo darme cuenta de que poco a poco estás sonrojándote, tus manos comienzan a sudar y tu respiración se entrecorta, y también puedo saber que tu corazón está latiendo más de lo que late usualmente. Y la segunda es porque en lo que estaba cocinando, no me quitabas la mirada –Te mira fijamente- y te distraes mucho

Pues claro imbécil, me distraigo porque eres demasiado guapo y porque me es tan sexy que un hombre como tú esté cocinando; ya nada más falta que te quites la camisa y estés cocinando así. Oye, no sería mala idea.

- ...Y eso me gusta –Termina y cuando ibas a hablar, se acerca a ti para besarte-

Un rato después estábamos comiendo el delicioso espagueti a la boloñesa que James preparó especialmente para mí, para mí solita. Y puedo decir que cocina bien. ¿Alguna otra cualidad en este hombre? Creo que me gustaría descubrirla.
Estaba un poco cansada por toda la fuerza que hice al nadar y correr con James, así que nos fuimos a la cama algo temprano. Y no quería dormir en la otra habitación, así que me fui con James. Y comenzamos a ver una película, casi terminándose me quedé dormida.
Me desperté como a la 1:00 am y me dio mucha sed, bajé y vi que James estaba en el comedor con su laptop, y solamente se veía la luz azul de la pantalla; porque todo estaba oscuro. James no se dio cuenta de que fui a la cocina, así que tomé agua y después fui hacia él.
Llegué por detrás y lo abracé, él no se espantó, solamente pude ver en el reflejo de la pantalla de la laptop que sonrió. Besé su mejilla y lentamente bajé a su cuello.

- ¿Qué haces James? –Preguntas y él sin quitarse de ti, sigue escribiendo. Al parecer le era placentero que estuvieras ''complaciéndolo'' mientras escribía-
- Solamente estoy preparando la clase para el lunes, ese día me toca solamente los sextos semestres –Responde- pero ya lo he terminado; y sirve de que tenemos nuestro fin de semana libre –Cierra la Mac y se voltea a la izquierda para besarte-
- Esa es una buena idea... -Mencionas entre besos-

¿Pero qué me está pasando? Yo soy la que ha tomado la iniciativa... Y eso me da un poco de miedo, estamos yendo algo rápido... Pero sé que hay personas que sin conocerse se han besado y han hecho otras cosas peores. ¿Lo que estoy haciendo no es malo, verdad?
Porque estoy segura de que no quiero parar con esto, me gusta James.