Me Enamore De Mi Profesor

Capítulo 34. Viernes 7 de octubre de 2016.

  Narra Ánica:
Esta semana no he podido estar con James como me habría gustado, pero sé que no soy mala persona he intento ayudar a Sabrina, pero jode mucho; los cuatro días que nos toca clase con James, le ha hablado y cuando él llegaba al salón, se sentaba en la butaca/silla más cerca de su escritorio.
Y para mi mala suerte, Sabrina se hizo muy amiga de la maestra de baile, ¿algo más me puede suceder que no sea bueno?
Pero le pedí permiso a Jade para ''ir con Kourtney a su casa'' y aceptó; últimamente no me ha dicho ya casi nada porque está feliz porque finalmente le han dado trabajo a Ray, porque Dylan ya camina y habla mucho más (Jajaja, tan solamente en una semana), y porque su hermana (Mi tía Pamela) está con ella, quién sabe si mi tía ha cambiado para bien.
James me dijo que me fuera caminando hacia el parque que está a unas cuatro o cinco cuadras de la escuela; que allá me alcanzaba. Iríamos a su departamento, pero qué más me gustaría volver a ir a su casa...

- ¿Jade te ha dado permiso o te has escapado? –Pregunta James mientras va conduciendo-
- Sí, me dio permiso; es que ahora está feliz por unas cuantas cosas sin importancia –Respondes mirando por la ventana-
- Hey, qué bueno que has sacado 10 en el examen de mi materia, realmente estudiaste; y has sacado un 8
- Sí, realmente estudié –Respondes-

Estudié pero la guía que me dio él cuando me pidió que fuera a la biblioteca; tenía todo lo que habíamos visto en tres semanas, pero que no puse atención; y la guía que nos dio él, era muy diferente y casi no tenía muchos ejemplos. James se toma en serio lo de ser maestro, no deja que nadie le pida ser una excepción y ni hasta yo; si realmente hubiera sido disparejo, me hubiera puesto un 10 cerrado.
Desventajas de tener algo con él, jajajajajajajajaja. Jajaja (Carita triste).

- Espero que en las demás materias hayas estado igual o incluso mejor –Menciona sin despegar la mirada de la carretera-
- Yo también, pero dejemos hablar de mis exámenes, ya tengo suficiente con ir cinco días y estar en exámenes esta semana –Pides girando los ojos-
- No señorita, tienes que sacar las mejores calificaciones, y si sales baja de promedio, te escogeré a ti para ser tu tutor –Remoja su labio inferior-
- ¿Qué? ¿un tutor? Pero si en primer y segundo semestre no lo tuve... -Pones una mano en tu frente- y sé que eres muy exigente, no James –Ruegas- te prometo en esta segunda fase saldré con 9 y 10, te lo demostraré

Me cagaba en la reputa madre que James quisiera ''formarme'', él no es mi padre; es mi profesor... mi sexy profesor. ¿Así es de controlador con todas sus novias?
Me pregunto si será amigo o pariente de Christian Grey, ese hijo de puta quiere controlar a Ana en todo, y también es millonario, y también está rebueno y lo que le sigue. Ya solamente falta que James me azote con una fusta y me haga su sumisa, carajo.

- Mira, será en beneficio de los dos –Entra al estacionamiento del edificio- vendrás a pasantías por la tarde a la escuela, trabajamos un rato y lo que resta estamos juntos... -Aparca el auto en el lugar que le corresponde a James-

Uhm... pensándolo bien no sería una mala idea, después de todo.
Jajajajajahshjddagaahywq, soy una maldita bipolar, ¿se nota mucho? Ya Ánica, sí se nota.

- Lo pensaré –Te cruzas de brazos-
- No, yo lo pensaré, porque de mí depende todo –Ríe divertido-

Imbécil. Lo pensé, pero no se lo dije.
Subimos al ascensor y llegamos a su piso, entramos al departamento y vi una bolsa... era de una tienda para mujeres embarazadas.

- James, ¿qué es eso? –Preguntas viendo la bolsa, pero sin tocarla o husmearla. James se acerca a tomarla lentamente, para poder disimular-
- Mi hermana Ali está embarazada... -Te sonríe de lado- va por su segundo hijo y le compré esto para que lo use, realmente la quiero mucho y quiero darle este detalle cuando la vaya a visitar mañana
- Oh... eso es genial –Mencionas sintiéndote una completa estúpida-
- Sí... -El sonido del iPhone de James suena y desliza su dedo para responder- ¿Hola?
- James, hola –Saluda Halston animadamente-
- Hola, ¿cómo estás? –Pregunta con una sonrisa leve-
- Estoy bien, ¿entonces sí vendrás mañana a mi casa?
- Claro que sí, de hecho te compré un detalle para que te lo pongas... te quedará estupendo Halston
- No tienes que comprarme nada James... pero gracias por la intención
- No te preocupes, nos vemos mañana; espero poder llevar a mamá, ¿de acuerdo?
- Sí, hace mucho que no la veo –Dice emocionada-
- Bueno Hals, pequeña, te dejo, mañana te iré a ver, adiós –Se despide-
- Adiós James –Cuelga-

Narra James:
Ánica no dejaba de mirarme con una sonrisa al escuchar todo lo que le decía a Halston; le hice creer a Ánica que Halston es mi hermana... pero lo había olvidado, la bolsa de la tienda para Halston... hoy iba a venir Ánica; y otra cosa más que sospeche, estoy muerto.
Ambos fuimos a la cocina para hacer de comer, hoy quería albóndigas, me encantaban las albóndigas; y Ánica es muy buena haciéndolas, ella me dijo eso.

- James... -Dices después de darle un trago a tu vaso de agua de frutas-
- ¿Sí querida?
- Cuando estés más grande, ¿no querrás tener hijos? –Preguntas, él te mira raro-
- Oh no lo sé, tal vez –Se encoge de hombros- por ahora quiero divertirme y salir...
- Tampoco los querrás tener después de los treinta, ¿o sí? –Él suelta una leve carcajada-
- No... -Niega- bueno la verdad es que no lo sé; ahorita solamente pienso en mi trabajo, en salir, fiestas, tomar...

Sobre todo tú Ánica; ¿qué estás haciéndome? Lamento estarte mintiendo sobre mi hijo, ¿pero acaso me aceptarás con uno? No quiero que te sientas abandonada cuando esté con él, mucho menos quiero que pienses que entre Halston y yo hay algo; ella es mi amiga.
Pero... ahorita que estoy diciéndote esto, realmente son mentiras, hace unos meses estaba enojado conmigo mismo porque no quería un bebé (No porque no quiera mantenerlo) pero... creí que era un error.
Ánica... lo siendo, David no es un error... es mi hijo. Lo amo muchísimo aunque aún no nazca; pero... todo esto está confundiéndome. Quisiera decirte la verdad porque estás comenzando a formar parte de mi vida, y créeme que te tengo un gran cariño, tan profundo.

- ¿Quieres ir a dar un paseo? –Pregunta James con una leve sonrisa-
- Oh, claro que sí –Le devuelves la sonrisa-
- ¿Te parece Central Park? –Propone y asientes-
- Claro, me encantaría; solamente deja lavo los trastos –James te toma del brazo-
- No, no, no, no... Cuando regresemos los lavo yo, tú eres mi invitada –Te jala y caminan hacia la puerta-

Pasé una mano por su cintura y así fuimos caminando hasta el ascensor... Ánica me gustaba.
Creo que lo he dicho y pensado millones de veces, pero son pocas, muy pocas.
Ella se acercó al vidrio/pared transparente, para ver cómo bajábamos, y veía toda la ciudad, realmente me gustaba que estuviera así. Le tomé una foto, pero ella no se dio cuenta...
Si yo solamente la quisiera para coger/follar, me la fajaría aquí mismo; es más creo que ni hubiéramos salido de mi apartamento, pero Ánica...
¿Por qué siento esto? Digo, no es algo malo y no me arrepiento de conocerla, pero... sé que soy su profesor y una gran edad de diez años nos separa; aunque no me vea de veintiséis; pero de todas formas, y tendré un bebé.
Pero no, eso no tiene porqué apartarme de ella, por lo tanto mantendremos nuestra... ¿''relación''? a escondidas y no le diré que seré padre en tres meses. Lo siento Ánica.

- Un día te llevaré a mi restaurante –Dice James mientras ambos van caminando-
- ¿Tu restaurante? –Volteas a verlo, pero subes la mirada porque estaba mucho más alto que tú-
- Sí, bueno... es restaurante mío y de otros cuatro amigos; cuando estábamos en la universidad, decidimos invertir en ello. De hecho los que trabajan allí son Logan y Carlos; Kendall tiene otro trabajo pero también es dueño y Dustin también, pero de todas formas a veces vamos a ver qué sucede o cómo van las cosas

Narra Ánica:
Ahora sabía por qué James tenía más dinero; no es que siendo un maestro en una escuela pública te vaya mal; de hecho ganas el dinero suficiente y muchos de mis maestros tienen dinero, lo digo porque he visto cómo visten y qué auto traen. Y por eso James tiene dinero, por ser maestro y porque tiene un restaurante... qué buenas inversiones hace.

- Sí, quiero ir un día de estos –Le sonríes y él pasa un brazo por tu cintura-