•Miranda•

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Después de encontrarme a James en Yoyo, una tienda de yogurt de helado, salimos de ahí, se preguntarán, o no, si comi helado, pero no, no comí nada.

-No hay dinero Sam- dijo James

Y bueno no he comido nada desde anoche.
Luego de salir, caminamos por la calle, no sé cuánto hemos caminado pero sé que fue mucho, nunca he venido aquí, casi no conozco la ciudad, casi siempre me llevan en carro, bueno he ido caminando a muchas partes, pero solo que estén cerca de mi casa.

-James- dije

-¿Si?- dijo sin apartar la mirada de la calle

-Tengo hambre

-Quiero que entiendas que no hay dinero

-Eso lo sé, entonces ¿te puedo pedir algo más?

-Espero que no sea un unicornio

-¿Qué?

-Bueno, me estás pidiendo cosas que sabes que no puedo darte-Suspiré tratando de ignorar lo que había dicho

-Te decía que... ¿No puedes caminar más rápido? Digo, pareces tortuga.

-Iría más rápido si supiera a donde ir

¿Así que no sabes?

-Entonces detengámonos, tal vez por algo de comer

-Sam...

-!No voy a vivir si no como, por lo menos dame agua James!

-Bien- contestó

Caminó, Más rápido gracias a Dios y todos los ángeles que se reunieron en mi petición, hasta que llegamos a un lugar de comida rápida. Le pedí a James que pidiera una simple hamburguesa para "que no muriéramos de  no-tengo-dinero-sitis"  y me senté en una mesa en la esquina del lugar deje mi maleta a un lado de mi asiento. Una chica pelirroja se acercó a mí mesa.

-Hola, hmm.. Disculpa.. Es que bueno, quisiera saber si está ocupado este lugar, porque el restaurante está lleno y bueno no tengo donde sentarme.

La mesa tenía cuatro sillas y bueno quería ser amable, tal vez así me sentiría bien conmigo misma porque el día hasta ahora no ha sido perfecto.

-Espero a alguien pero si, las otras dos sillas están desocupadas.- dije

Se sentó y puso su charola en la mesa.

-Esto es un poco incómodo- murmuro, actúe como si no la escuchara.

Pronto llegó James, al acercarse con la charola se quedó mirando a la chica, tenía una cara confundido tal vez tratando de decirme "que hace aquí" La chica notó su presencia y levantó la mirada, me di cuenta de que James al verla cambio su cara y puedo admitir que se le nota que la chica le gusta, no lo culpo, ella era realmente linda.

-¿Qué hace aquí?- dijo

-No había lugar, intente ser amable- asintió y se sentó

-Me llamo James- está definitivamente no era su forma de coquetear, su voz siempre sonaba atractiva, incluso sexy pero ahora sonaba amable.

-Soy Miranda- contestó

-Yo Samantha, ahora espero que no quieras unirla a la familia también, James- la chica agacho la cabeza y pude notar como mi hermano se sonrojó, pude sentir su pie golpeando mi pierna por debajo de la mesa.

-James, ¿donde dormiremos hoy?- pregunté ignorando a Miranda

-No lo sé, déjame pensar en paz Samantha

-Uy discúlpame

-Em. Disculpen no pude evitar escucharlos- dijo la chica- Mis padres pagan la renta de dos departamentos y uno está desocupado, no sé si quieran estar ahí, sería completamente gratis- dijo

WOW! Es realmente sorprendente la suerte que tenemos, tal vez después de todo ser amable te trae cosas buenas. Mire a James y él tenía una cara de asombrado pero feliz.

-Si- dijo- estaría perfecto. Esto es vergonzoso pero gracias, ¿podemos ir ahora?

-Si, y no te preocupes es un placer- dijo Miranda con una sonrisa, esta chica realmente es hermosa.

21 Charlas Amorosas #P.cookie2016Donde viven las historias. Descúbrelo ahora