THIXOFOBIA [Fanfic: KaiSoo]

PARTE I [DESCONOCIDO]: Capítulo 4.2, Familia

SeHun había logrado mejorar bastante en la escuela y sus padres no podían estar más orgullosos. Estaban realmente sorprendidos de lo inteligente de su hijo. Él por su parte sentía un peso menos de encima al saber que sus padres no peleaban por su causa y la de sus malas notas; y todo era gracias a ChanYeol, así que no podía esperar a verlo en el nuevo colegio.

Por otro lado, tenía una nueva preocupación. Su padre planeaba casarse con la mujer con la que había estado saliendo. Ella no le caía mal ni nada por el estilo pero sentía un poco de envidia de cómo siempre hablaba de su hijo y, no quería que todo se volviera una competencia con un sujeto al que no conocía.

A lo que SeHun platicó con su padre, él y su novia no comenzarían ningún tipo de planes para boda hasta que el hijo de ella llegara a Corea ya que el chico vendría desde Barcelona. El chico era dos años mayor y entraría a la misma escuela que él a concluir la primera etapa de nivel medio. Claramente el entraría en el ciclo escolar de febrero probablemente atrasándose un poco. Eso a SeHun lo tenía sin cuidado.

Se suponía que una vez que el niño prodigio llegara a Corea y completara todos los trámites del cambio, él y su madre se mudarían a casa de su padre. Por otro lado SeHun ya estaba viviendo en aquella casa debido a que su madre estaría viviendo en Japón un par de años por cuestiones de negocios; la mujer obviamente quería llevarse a su hijo pero por una muy grande razón, o mejor dicho por una muy alta razón, su bebé decidió quedarse.

*****

MinHo se encontraba un poco nervioso debido a que estaba dejando atrás todo lo que fue parte de su vida por muchos años y no sólo eso, sino que ahora tendría un nuevo padre y un nuevo hermano. El realmente esperaba que pudieran llevarse bien, no quería que hubiera problemas. Su madre le había dicho que SeHun era un niño tranquilo y adorable.

Su madre, todo lo hacía por el amor a su madre.

Camila Montreal; cabello color chocolate, 161cm, ojos café y una lisa piel bronceada gracias a su herencia latina, hija de Guillermo Montreal el cual era el séptimo en la línea al trono en España y que desobedeció a su padre casándose con la embajadora de Portugal la cual era mitad brasileña y mitad portugense y así generando que, cuando Camila naciera fuera parte de la gran familia real de aquella nación.

En una de las tan comunes reuniones de alcurnia que había en casa del rey, o su abuelo como ella lo conocía, conoció a JeonWoo Choi quien era hijo del presidente de Sur Corea. Ambos jóvenes iban acompañando a sus respectivos padres unos pasos atrás mientras aquellos reían y alardeaban de lugares y conocidos; ninguno pudo evitar cruzar miradas.

Camila no creía que los asiáticos pudieran ser apuestos pero realmente estaba dispuesta a cambiar esas ideas que tenía, más aún cuando aquel chico le hablaba con un perfecto castellano.

—¿Os gustaría bailar señorita? Así pudiésemos escapar de esta charla —Le sonrió mientras extendía su mano.

Camila aceptó.

Nadie le dijo que terminaría perdidamente enamorada de ese chico de pequeños ojos. Nadie le dijo que él llegaría a su escuela para poder terminar su carrera a su lado. Nadie le dijo que se casaría con el que creía el amor de su vida y un par de años después tendrían un bello hijo de cabello castaño y grandes ojos al que llamarían MinHo Choi, a petición de la abuela paterna que no quería que ni su nieto ni su hijo olvidaran sus raíces. Nadie le dijo que JeonWoo moriría a los treinta años atravesado por una bala en su cráneo mientras intentaba protegerla de un loco que odiaba a la familia real.