Jugando a Casarme

Capitulo #22

"Game over"

––Angela––Escuchaba mi nombre a lo lejos––Angela, querida––Movieron mi cuerpo

La espalda me dolía con intensidad, mis parpados estaban más pesados que antes y todo a su alrededor estaba hinchado y me ardía. De mis labios corría una pequeña baba que limpie cuando logre enderezarme. Poco a poco abría mis ojos, mientras estos se adaptaban a la luz. Mire a la voz que me estaba llamando y la señora María apareció en mi camino. Luego mire a donde mi mano estaba sujeta a lo que parecía ser otra.

De pronto lo vi, vi a Derek con una máscara que lo ayudaba a respirar conectada. Lo vi pálido, con sus labios de un color opaco, su mano estaba debajo de la mía y yo la aparte para así poder concentrarme en la señora María quien movió mi hombro para que despertara de una vez.

––Deberías ir a tu casa un rato, bañarte, comer algo y descansar un poco––Me sonrió amablemente––No te preocupes, pronto va a despertar y apenas lo haga te llamare

De pronto fue cuando caí en cuenta, luego de hacer memoria y recordar, que apenas la señora María me llamo, Sean me trajo y me acompaño un buen rato cuando por fin nos dejaron ver a Derek, claro aunque nos dijeron que el no despertaría por unas cuantas horas, así que no he podido ni siquiera hablar con él y preguntarle qué fue lo que paso. Porque todo estaba bien, yo lo había visto, el me llevo donde Sean y parecía que todo estaba yendo bien, pero como solía decir mi abuela, ahora se sabe, pero más tarde no.

––Si tiene razón, por favor llámeme si ocurre algo y vendré enseguida––Le devolví la sonrisa y fue cuando llame a Adam para que me recogiera

Sé que dije que no veía a Derek como algo más que un amigo y no miento, esa es la verdad, pero no quiere decir que no sienta un gran afecto para con él. Eso no quiere decir que no me duela lo que le pase, porque sería mentir, la verdad es que quiero verlo bien, quiero que este bien y verlo sonreír de nuevo, que lea sus libros como de costumbre y que simplemente sea él, que vuelva abrir los ojos, eso es lo único que pido.

Espere afuera de la clínica, mientras yo iba por mi tercer bostezo. No había podido dormir muy bien eso está clarísimo. Y no solo porque dormí encorvada en una silla, si no que tanto pensar y la preocupación que tenía sobre Derek se volvió tan intensa que no me dejo dormir augusto.

Cuando por fin vi llegar a Adam, como pude y con las pocas fuerzas que aun conservaba camine a pasos largos y acelerados, ya que me moría por sentarme otra vez. El dolor en mis articulaciones se hacía presente cada vez que estaba de pie o hacia algún movimiento brusco.

–– ¿Aun no despierta? ––Pregunto colocando el carro en marcha

––El doctor dice que en cualquier momento––Soné algo decaída–– ¿Has sabido algo de Eliot?

––Pues si––Pauso, pero antes de poder contarme lo demás el celular suena e interrumpe el momento

Tome el teléfono con tal rapidez que me pareció muy rápido viniendo de mí. Cuando vi el nombre, de verdad que tenía la esperanza de que fuese la señora María para decirme que Derek ya despertó, pero para mi desgracia era un número desconocido.

–– ¿Si? ¿Con quién hablo?

––Es Violet––Me quede en silencio y ella hizo una pausa––Necesito contarte algo ¿puedes venir a mi casa?

Eso me parecía extraño, y no me daba muy buena espina eso de ir a su casa, pero... algo me llama la atención y es que me haya llamado a mí justamente sabiendo que yo le caigo realmente mal.