Marceline:
Seguía esperando que regresará, quería huir nuevamente pero seria bastante obvio de mi parte salir huyendo mientras ella no estaba.
La espere no se cuanto pero se me hizo eterno, luego la visualice entrando a la habitación con algo en las manos, traía un par de Sándwiches y jugo para ambas.
-Toma-
Dijo Dulce Princesa.
-Gracias, siento no responder hace rato, es que yo.......-
-Estabas nerviosa, lo se, también lo note-
Nuevamente estaba paralizada, pero ella me saco de mis pensamientos.
-¿Estas bien?-
Dijo mientras daba una mordida a su sándwich.
-Si....lo siento-
Di una mordida al Sándwich, estaba exquisito. -Esta muy Bueno-
-Gracias, me encanta que te guste-
-Es que esta tan bueno, hacia tiempo que no comía esto, siempre como manzanas o Fresas por lo general, bueno si sorber el rojo de las cosas se le puede llamar comer-
- Te ves tan Linda comiendo lo sabias Marcy?-
-Eh....No?-
-¿Segura que estas bien?-
-Si....si.....lo estoy no tiene importancia-
-Entonces no te molestara que haga esto.-
Marceline:
La observe con detenimiento, no sabia a que se refería con eso, estaba a una distancia peligrosa de mi, no sabia si podría controlarme un momento más, pero seguía sin dejar de Verla, ella se acercó lentamente a mi, su respiración y la Mía se mezclaron, me beso, sus labios eran dulces al igual que Ella y su exquisito aroma me invadían a cada momento, no quería separarme en verdad lo necesitaba, incline un poco la cabeza para hacer ese beso más duradero y profundo.
Nos separamos por la Falta de aire pero nuevamente volvimos a unir nuestros labios en uno solo, era la mejor sensación que había tenido en toda mi vida, la pasión aumentaba cada vez había más roces y caricias este ya no era un beso normal, ahora era uno lleno de lujuria y deseo, sentí que mi estómago se achicó y me detuve, yo la reina vampiro tenía miedo de llegar a hacer algo más.
-Debo irme Bonnibel, ya es tarde-
-Espera... La reina Vampiro preocupada por llegar tarde? Eso nunca te ha importado Marcy ¿Porque ha de cambiar ahora?-
-No lo se- baje la cabeza.
-Bueno, antes de irte....¿Puedo despedirme?-.
-Claro- nos acercamos nuevamente y ella dejo un único y dulce beso en mis labios, estaba un poco desorientada, ella causaba esto en mi, salí de el lugar en dirección a mi casa.
