-¿Así que te gustan los gatos?
- No sólo me gusta mí gato.
Camila y yo llevábamos como unas tres horas caminando, hablando de cualquier tema y se sentía increíble estar con ella.
-Oh ya, entonces si yo te regaló un pequeño gatito me lo regresarías apenas te lo de ¿verdad?
-No, solo que no se me gusta mas el señor bigotes, aparté de que es un regalo de mi abuelo, lo tengo desde que tengo memoria. El falleció cuando tenía unos 7 u 8 años, así que básicamente es todo lo que me queda de el.
Me sentía una total estúpida por hacerla recordar aquéllas cosas.
-En serio lo lamento mucho no quería ponerte triste. Perdóname
-Eh esta bien- dice acariciando mi mejilla- sólo tenias curiosidad como cualquier otra persona.
-Si pero soy una pésima persona por hacerte sentir mal, seguro y ya eche a perder la noche ¿verdad?.
Camila niega con la cabeza y se pone de puntillas para darme un suave besó, pongo las manos en su cintura para pegarla mas a mi y al final del beso nos abrazamos en un silencio perfecto sin preocupaciones, hasta que su voz lo rompe.
-¿Eso responde a tu pregunta?- me dice mirándome a los ojos con sus brazos rodeandome el cuello.
-Un poco pero aun sigo, pensando que lo arruine todo.
-Ok ¿si te digo que te perdono estarás quitándote esa culpa qué tienes?- asiento con la cabeza- entonces te perdono.
Doy un suspiro de alivio y la veo sonreír. Me acercó a besarla, lento, profundo, húmedo su lengua y la mía enrredandose entre ellas.
-Ya es tarde y tengo que llevarte a tu casa, que por cierto no tengo ni idea de donde está.- suelta una pequeña carcajada mientras se esconde en el hueco de mi cuello.
-No me quiero separar de ti. Y no preguntes porqué. Porque ni yo misma se la respuesta de esa pregunta.- dice aun escondida en mi cuello y siento su aliento chocar haciendo que se me ericen los cabellos de esa zona.
-A mi también me sucede lo mismo, pero creo que con cada segundo que pasa se hace aún mas grande. Y aun que no quiera hacerlo tengo que llevarte a casa así que vamos.
Caminos, ella abrazándome el brazo y yo con mi brazo libré rodeaba su cintura. Caminamos en silencio ella veía hacía enfrente mientras que yo me dedicaba a mirarla a ella, su perfil era perfecto, su nariz era pincelada y fina, su mandíbula era perfecta tanto que se merecía ser besada todo en ella era perfecto.
Llegamos a su casa era en una residencia de alta categoría pero nada exagerado, con juguetes tirados en el jardín.
-Hemos llegado, sana y salva señorita Cabello.-digo con una reverencia hacia ella.
-Muchas gracias Jauregui. Por todo por salvarme de ser devorada hoy- eso ultimo lo dijo con una risa a la cual me le uní yo- y por la cita fie maravillosa.
-No hay de que- nos quedamos viendo por unos minutos hasta que hable.- ¿te volveré a ver? Dime que si por favor si no moriré.
Solo ríe y de su pantalón saca una pequeña tarjeta con su numero telefónico.
-Llámame cuando quieras ahí estaré.- se acerca y me da un beso que me deja un tanto loca.- Nos vemos señorita Jauregui
-Hasta pronto señorita Cabello- digo para luego ver como se mete en su casa y yo solo puedo pensar durante el resto de la noche que es lo que Camila Cabello me esta haciendo.
ESTÁS LEYENDO
Circus. - Camren G!p
FanficPOV. Lauren Desperté cómo todos los días, con sueño y mas sueño, pero ese sueño no puede seguir gracias a mi mamá, que esta como loca gritando por toda la casa que ya me levante. En fin soy Lauren Jauregui, hija del gobernador Mike Jauregui y Clara...