Vamos por ti

4.6K 267 5
                                    

NARRA JADE

Llegamos por fin a la estación de policía en donde hablamos con quien estaría a cargo del caso,  diciéndole que teníamos que ir donde los padres de ese idiota sin más en el auto ibamos mis suegros, Matt y yo acompañados claro por dos patrullas con cuatro policias al interior de cada una, llegamos a la casa de los padres de Jack y yo me tome la libertad de tocar la puerta en lo que me abrió la madre de dicho.

-Eh,¿si? ¿en qué puedo ayudarte?

-Oh hola señora un gusto -dije con tono irónico - queríamos hacerle unas pequeñas preguntas sobre su bastar... Digo su hijo

-esta me mira con cara de espanto- Estoy ocupada en este momento podríamos quedar para otro día... -esta comenzó a cerrar la puerta de la casa lentamente-

-coloqué mi pie derecho impidiendo así que la cerrara por completo - ¿segura? Esque ellos están impacientes por hablar con usted...  -detrás de mi aparecieron nuestros amigos policías -

Ella terminó por abrir la puerta dejando pasar a todos,  algunos uniformados registraban la casa mientras que otros interrogaban a los padres y pues yo ahí brindando mi ayuda,  por supuesto.

-¿DÓNDE ESTÁ DANIELA, JODER?

-habla mi suegro- Matt llévate a Jade a fuera por favor

-habla Matt- si yo me la llevó

-¿Qué? No no me llevarás a ningún lado.

-este me carga en su hombro fácilmente- Eres muy gritona e histérica para esta vida,  vamos.

-¡SUÉLTAME!

-Shh... Todo estará bien...  -me terminó sacando de la casa, me bajo de su hombro y me sentó en una banca que estaba cerca- cariño te he dicho varias veces que gritarle a la gente no es correcto.

-Sólo trataba de ayudar...  La necesito Matt...  Sólo eso...

-Lo sé, ya verás que darán con más información y daremos con Daniela, ahora tranquila ¿si?

-Bien...

Pasó una media hora y salieron mis suegros con lágrimas de emoción en sus ojos,  por otro lado se llevaban detenidos a los padres de Jack por ser complices de lo que hizo su hijo, secuestro.  Se acercaron a mi y me dijieron entusiasmados.

-Sabemos donde está.

Me puse a llorar con la emoción de saber que por fin la vería de nuevo,  nos subimos rapidamente al auto y nos encaminamos hacía donde estaba ese maldito infeliz.

¿Por qué pasa esto?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora