Querido Dario...

Ofensa

No es tan malo estar aquí en las montañas, ayer Esteban rodó cinco metros por la nieve cuando intento impresionar a un par de chicas que iban con su amigo músculos. Ese tipo daba jodido miedo, Caleb dijo que de seguro se metía cosas raras para tener ese cuerpo de actor porno... No le iba a preguntar como es que sabía eso de los actores porno, porque le entendí.

Mis padres dijeron que debíamos pasar tiempo de hermanos, y que ellos por mientras irían a pasear. Sé que solo quieren tiempo solos, ellos dos, posiblemente tenga un hermanito en nueve meses. Me río alto y cubro mi cara, me acuesto boca arriba y escucho atento el sonido de la regadera, Caleb se estaba bañando.

No sé a donde fue Esteban, sólo salió y ya, lo cual me preocupa. Tiene dieciséis años, es un niño y me preocupa que este tan noche sólo, ¿qué puedo decir? Soy un tanto protector. Cogo mi celular, viendo el hermoso fondo de pantalla que tengo. Elina jugando con un listón con Gerardo y sonrió, es inevitable no hacerlo.

La puerta de nuestro cuarto se abre, guardo mi celular y espero el ver quien es, abro mi boca con sorpresa. Es Esteban, pero viene con los ojos llorosos y la ropa mal puesta, ¿Qué mierda? Me levanto rápido, caminando hacia él y Caleb a penas sale de la ducha.

- ¿Qué te pasó? -le pregunto poniéndole mi mano sobre el hombro.

- Esteban, ¿te golpearon? -Caleb en verdad suena preocupado, se acerca un poco más y hace una mueca, cuando hielo sé el porqué de esa mueca. - Dios, ¿te bañaste en alcohol o algo así?

- Yo...

- Mierda, Esteban, apestas a licor. -me quejo dando un paso atrás.

- Es que...

- Nuestros Padres pondrán tu culo en la pared a lado de la puerta de entrada. -volteo a ver a Caleb, no capto su comentario.

- ¿Por qué ahí? -le pregunto curioso.

- Para que cada vez que pasen le den una nalgada, tiene lógica.

- Creo que sería mejor en la cocina, hay más armas por usar.

- En la entrada están los paraguas.

- Cierto.

- ¡Soy gay!

El grito de Esteban nos hace voltear a verlo, el lugar está muy silencioso, peor que aquella vez que Elina y yo nos dimos nuestro primer beso, pero este es mío veces mas intenso. Da miedo.

Caleb se pasa una mano por la nuca, yo me quedo ahí como idiota viéndolo y ahora la única pregunta que pasa por mi mente es: ¿Ayer era al chico musculoso que quería impresionar?

Muchas personas tendrían otras preguntas, pero la mía es esa y ninguna otra, bueno si hay otra. Es menos importante. Esteban comienza a sollozar, Caleb le palmea la cabeza y sonríe, yo sigo sin hacen nada.

- ¿Desde cuando? -pregunto y Esteban me voltea a ver muy feo.

- Desde que llevaste a tu estupido amigo friki. -dice entre dientes, se ve gracioso enojado y... WO, WO, WO... ¿qué?

- ¿Cuál friki amigo?

- Rodrigo.

- Ese cabrón ha andado con más mujeres que Caleb, él no es...

- No es gay, es bisexual. -oh.

- ¿Te jodiste al amigo de Dario? -Caleb estalla en carcajadas, Esteban y yo solo lo vemos cómo: pudrete. - Dario, tu amigo jodió con nuestro hermano.

- No quiero hacerme una imagen de eso, callate. - suelto un suspiró, aprieto el hombro de Esteban y éste me voltea a ver, le sonrió. - ¿Papás lo saben?

- Creo que papá sospecha, mamá no sé y tu mamá...creo que ella si lo sabe.

- Bueno. -Caleb le toma la mano a Esteban y lo hace irse a sentar a la cama, después nosotros nos sentamos a su lado. - ¿Qué fue lo que pasó?

- De acuerdo. -toma aire y lo expulsa lentamente en un suspiro, sorbe por la nariz. -ayer le estuve echando los perros al musculoso ese que estaba cerca de donde andábamos deslizandonos en la nieve y cuando caí, mientras ustedes se partían el culo de la risa, él fue a ayudarme. Me dio su número, yo le di el mio y chalala, chalala. -rueda los ojos. - me envió un mensaje en la madrugada, me pidió que nos viéramos en la tarde y acepte, pues no había nada de malo. Sólo platicariamos y ya... -en serio me quiero reír en este momento, "platicar" Ajá. - Salí hoy en la tarde, nos vimos, platicanos y tomamos, fue muy lindo, muy atento y...

- ¿Te llevo a su habitación? -Caleb arquea una ceja, Esteban asiente en respuesta.

- Supongo que tuvieron sexo.

- Supones bien. -susurra.

- Saltemonos esa parte, por el bien de Caleb y yo, ¿Por qué llorabas? ¿Te lastimó?

- No...

- ¿Entonces? -Caleb frunce el ceño, Esteban -suelta un sollozo y entonces dice algo que jamás creí escuchar de los labios de mi hermanito.

- Tiene novia.

Y soltó en llanto. Caleb hizo una mueca, abrazo a Esteban de los hombros y sonrió, yo en cambio quiero ir a matar a quien uso el culo de mi hermano... tal vez no sonó tan bien, pero era verdad.

- ¿Quieres que usemos el paraguas en él? -le pregunto en susurro, sonando serio y Esteban suelta entre una risa y lamentó, es gracioso.

- Si, pero le ponen Chile a esa cosa antes de metérsela.

Los tres soltamos la carcajada, la noche transcurrió algo rara porque no es normal que tu hermano sea gay (no se ofendan) y llegué de inmediato a contarte sus hazañas sexuales, conoce más que yo. Que ofensa.