Pánico

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Heart like yours- Landon Jacobs, Hayden Coplen, Jason Suwito & Willamette Stone.

(Cadillac-Michigan, 8:45 p.m., Domingo)

~Jennyfer~

El dejar de estar con él a la fuerza y empezar a quererlo fue una verdadera tortura.

El siempre trato a las personas bien, él era así por naturaleza; tan encantador, tan natural.

Él no se daba cuenta cuando esto pasaba, y gracias a eso, la gente se iba tan rápido como venían. Él perfectamente podría ser uno de aquellos chicos populares que siempre trataban de hablar con él, pero siempre que alguno de ellos se acercaba él decía exactamente lo que no debería decir y se iban, parecía que casi lo hacia apropósito.

Él estaba seguro con nosotros, al menos eso pensaba yo, ya que yo también lo estaba. Pero las chicas trataban a toda costa llevárselo lejos del grupo, y sobre todo de mi. Mi teoría es que pensaban que alejándolo de nosotros; los chicos raros, él se comportaría diferente, pero no, él también era raro sin o con nosotros.

Todos hacían bromas al respecto, pero yo solo sonreía, tratando de no ser tan obvia y para dejar de verlo hablaba también yo con otros chicos, pero no eran los suficientemente interesantes. Todos se parecían a su manera. No se como explicarlo, pero ninguno me incitaba mentalmente, ninguno lograba sacarme de mi oscura nube de estrés y baja autoestima, ninguno me miraba, ninguno de verdad podía verme como era de verdad. Además, casi todos los temas de conversación giraban alrededor de la relación imaginaria entre Marcus y yo que llevaba tiempo rumoreándose.

Todo mundo había escuchado las historias. Todo el mundo conocía a alguien que conocía a alguien. Era algo que todos sabían, era algo que la mayoría hablaba y que ninguno ignoraba y actualmente el simple hecho de estar parados juntos nos volvía automáticamente novios, y yo no quería eso.

Mi soltería era clave para que mi negocio funcionase, yo atraía hombres para venderles droga y ellos regresan después de un tiempo porque por alguna razón pensaban que haciéndome el "favor" de comprar mi producto, mágicamente me iba a enamorar de ellos.

Ya había experimentado esa escasez de clientes cada una de las veces en las que volví con John. Pero esta vez se sentía diferente, se sentía como si no fuera tan fácil deshacerme de este fantasma.

Las chicas se alejan en cuanto yo las miro cerca de Marcus, y los chicos hacen lo mismo con él. La gente trata de alejarnos uno del otro lo más posible para intentar convencernos que nosotros estamos mejores con ellos, pero cuando el otro llega, la batalla acaba y nosotros ganábamos la guerra.

Pero yo no sabía si él disfrutaba esta atención o si todo su teatro simplemente era porque quería ser el chico que destrozó el corazón irrompible de Jennyfer Moonlight ¿y si esta aprovechándose de mi?

.

Buscaba paz, trataba de relajarme, de obligarme a cerrar los ojos y no pensar en nada más

Flotaba, está vez de verdad. Sin ayuda de hongos, ácidos o polvos. Todo era trabajo del agua.

El cielo era rojo gracias a las luces y no había nadie, sólo yo.

Aquel lugar era una alberca privada que tenía mi abuelo dentro de su mansión. La usaba para fiestas con políticos, mafiosos y prostitutas de renombre. Pero esta vez era sólo yo y el lejano recuerdo de una canción que solía cantarme mi madre cuando mi ansiedad atacaba. Sobando mi espalda lentamente mientras me dejaba acurrucarte en ella, cuando aún era demasido pequeña como para que me dejará hacerlo.

𝐀𝐃𝐈𝐂𝐂𝐈Ó𝐍 𝐀 𝐓𝐔 𝐍𝐎𝐌𝐁𝐑𝐄Donde viven las historias. Descúbrelo ahora