𝐀𝐃𝐈𝐂𝐂𝐈Ó𝐍 𝐀 𝐓𝐔 𝐍𝐎𝐌𝐁𝐑𝐄

Casi como un corazón roto

Four pinks walls-Alessia Cara

(Cadillac-Michigan,11:00 a.m, Sábado)

~ Jennyfer ~

Dereck Van Eitel, Dereck Van Eitel, Dereck Van Eitel, ese nombre maldito.

Lo conocí por accidente, como con Marcus, a causa de decisiones aleatorias que me llevaron a estar a sus pies.

Yo buscaba empleo, tratando de hallar una forma de ayudar a mi madre y saldar mis deudas, dos meses después de estar buscando como loca todos los días después del colegio, me llego una llamada, fue la primera vez que hablé directamente con mi abuelo, era como un desconocido, casi se podía sentir la tensión ente los dos cuando nuestras oscuras miradas se conectaban. Era tan parecido a mi, pero a la vez tan diferente.

Dijo que podría ser una gran mercenaria, al principio no sabía a qué se refería, pero me entrego una carta escrita por mi padre que le ahorró la tarea.

Tienes que ser fuerte, decía una de las líneas, no los dejes entrar a tu cabeza, y menos a tu corazón

Me entrenaron durante semanas, siempre fui callada, obediente y me esforcé al máximo en las pruebas, hasta que me drenaron, convirtiéndome en ese cascarón perfecto que todo el mundo se quiere follar

Tenía quince años, era navidad, pero yo no quería ir a casa, fui al bar, y como en esa época solo se murmuraba mi nombre no vi problema en mostrar mi cara.

Llevaba mucho tiempo harta de todo, así que se me hizo fácil hacerme un cóctel con antidepresivos, no lo pensé muy bien, pero al final alguien pudo detenerme.

Sus ojos estaban tan tristes y sus manos tan tibias, su energía me perforaba los huesos y me hacía sentir tan enojada conmigo misma, después de eso juré nunca volverlo a ver, pero más temprano que tarde, lo vi una tarde de primavera haciendo tratos con una niña de mi edad, lo empecé a ver al rededor mío con más frecuencia hasta que sin notarlo, se volvió lo que más amaba en el mundo

Había estado 5 meses sobria, lo más que lo había pasado sin heroina, pero el sin duda se encargó en volverme a poner en aquellas andadas.

El era un verdadero experto en su trabajo, sabía convencerte sobre las cosas que creías necesitar, y cuando lo hacía, te daba la mejor de las recompensas, su cariño, tan tibio y tan corto, que al igual que las drogas siempre querías más

Más temprano que tarde me deje enredar, le di lo que quería; información, y desapareció, destrozando mi corazón.

Justo en ese momento apareció John, su familia se había mudado de Chicago justo a principios del nuevo año escolar y ninguno de los dos teníamos amigos que presumir, así que me entregó su amistad durante los meses más duros de toda mi vida, me ayudó a olvidar a Dereck, me ayudo en el trabajo y al final, después de conseguir el su propio puesto, como todos los demás, me dejó a mi suerte sin importarle que apenas era el principio de mi sufrimiento.

La verdad es que cuando conocí a Marcus mi plan era nunca volverlo a ver, desaparecer como niebla y seguir. No porque quisiera, yo sólo ya sabía el desenlace de nuestra historia. Pero al dar un paso atrás, por alguna razón me siguió, no estaba segura porque no se iba si tanto lo exasperaba, pero ahora, cuando ya me había acostumbrado a su presencia, no podía deshacerme de él. Claro está que mi vida es muy peligrosa, pero yo era capaz de cuidarlo, solo un poco de paciencia y que el obedezca todas mis reglas. Aunque, ahora Dereck me esta buscando, tal vez para terminar con mi frágil corazón de una vez por todas, y no estoy segura en que tal lejos irá para lograrlo.