Dia 9. Amenaza y entrenamiento

25 5 4
                                    

Me desperté bastante tarde puesto que me costó mucho dormirme. Minote ya no estaba al lado mia, intuí que ella se fue temprano.
Bajé a la cocina y oli lo que parecía ser café con tostadas. Me asomé por la puerta y vi que Minote, aún en ropa interior, había hecho el desayuno.

-Venga dormilón, que dentro de 2h viene Matt a recogernos.

-Oye, ¿lo de ir en sujetador por las casas de tus compañeros es costumbre o solo lo haces conmigo?

Minote se aguantó la risa.

-Ni que te importase mucho verme semidesnuda. Además, te he hecho el desayuno. Sientate.

Minote desplazo un poco la silla y se sentó. Yo hice lo propio.

-Gracias por el desayuno, ¿a que hora te has despertado?

- A las 8 o así, aunque me ha costado un poco levantarme, me tenías bien sujeta entre tus brazos jejeje.

¿Que coño? ¿La estaba abrazando mientras dormía? No, tiene que ser una broma. Mi cara debió de estar tan roja que Minote empezó a reírse a carcajadas.

- Todos los tíos sois iguales, Tokuari siempre esta diciendo lo muchísimo que quiere a Mitaka, pero llego yo, le doy un beso y ya me está diciendo de follar. ¿Acaso eso que tenéis ahí abajo os atrofia el cerebro o que?

-Si estuvieses en nuestra situación lo entenderías.

Mientras seguíamos conversando en lo gilipollas que te vuelve tener una polla, llamaron al timbre de la puerta.

-¿Matt?- pregunté.

-No, es muy pronto.

Me asomé por la mirilla de la puerta y no había nadie.

-Qué raro, habrá sido algún idiota.

Al girarme, Minote me agarró y me puso una navaja en el cuello.

-Pero... ¿que coño haces Minote?

-Pues si, Silken tenia razón... Eres muy fácil de matar.

-Joder, no me des estos sustos idiota.

-Jajaja, perdón, bueno, vamos a desayunar de una vez, que tengo hambre.

Tras desayunar fui a la ducha y me vestí, después fue Minote, que aún seguía comiendo.

- ¿No se te cansa la mandíbula?

- ¿Y a ti la mano?

-¿Que insinuas?

-Nada, me toca en la ducha ¿no?

-Supongo.

-Bueno, no vayas a entrar a mirar.

Al cabo de un rato salió, ya vestida, tampoco podía notar mucha diferencia, puesto que llevaba ropa muy "fresca".

Ambos estuvimos hablando un rato más hasta que llegó Matt.

Nos llevó a todos a la comisaria central.

-Bien, como ya dije el otro día, iréis con vuestro nuevo profesor. Todos excepto Tojino y... Fumoari, vosotros entrenareis conmigo.

-Jajajajajaja, ¿pero que dices Matt? Fumoari es más fuerte que tú, no hay necesidad de que lo entrenes.

Dijo Kunomi.

-Bueno, será mas fuerte, pero es más lento. Fumoari, te aconsejo que vengas conmigo, los que van allí es para ganar fuerza y aprender técnicas básicas de combate, los que venís conmigo es como un curso superior. Por favor, ven.

Fumoari se quedó mirando a Matt un rato y él no apartaba su mirada. Ambos se observaban mutuamente. Cinco minutos después Fumoari asintió sin decir una palabra.

Matt nos guió hasta una sala.
Una vez allí...

-Vale, atacadme los 2 a la vez.

Fumoari se abalanzó como un toro. Lanzó un terrible golpe a la cara de Matt, y este lo esquivó. Siguió lanzando golpes al aire durante un largo rato de 30 minutos. Tras esto Fumoari se cansó e hizo un parón, el cual Matt aprovechó y golpeó su pómulo derecho con una patada voladora. Fumoari se tambaleó y una vez más intentó golpearle, en vano. Matt le golpeó en la rodilla. Fumoari se tambaleó, pero aguantó el equilibrio.
Yo tan solo me limité a observar.
El grandote acabó de rodillas frente a Matt.

-Bueno, lo que ya dije, eres muy fuerte, pero demasiado lento.

Matt le dio un leve con los dedos en la frente.

- Y tú Tojino, haz algo la próxima vez. Bueno, estoy algo cansado, seguimos mañana.

Al salir de la habitación note a Fumoari más distante de lo que suele ser.

-Oye, siento mucho no haberte ayudado...

-No te preocupes, de echo agradezco que no intervinieras, no hubise sido justo un 2 contra 1.

Mi móvil entonces empezó a sonar.

- ¿Si?

-Pasame con Matt, rápido.

-¿Quien eres?

-¿No te acuerdas de mi?

-Oh mierda...

Fui corriendo hasta la cafetería, donde había ido Matt.

-¡Matt, es Silken! Dice que quiere hablar contigo.

Estuvieron unos largos 10 minutos hablando.

-Ok, puede que sea muy pronto para ti Tojino, pero vas a necesitar esto.

Matt me dio una pistola y 2 cargadores, todo cargado hasta los topes.

-Vamos a la Torre de Tokyo en 5 minutos, dile a los demás que se preparen Robert.

-Si, jefe.

Monté en un coche con Matt, Tokuari y Jishiari.

-Bueno, se ve que nos controla más de lo que pensamos, ha esperado a que sea nuestro primer día para que vayamos a por él... Se tiene algo entre manos.

Dijo Jishiari.

-Si, llevas razón. Por cierto, usad la pistola en solo en caso de emergencia, y si disparais apuntad a los pies, no queremos matar a nadie. Tienen el seguro, solo tenéis que tirar de esa palanquita y ya podreis disparar, pero no los quitéis hasta que lleguemos.

Fuimos a la Torre de Tokyo y no había nadie. De repente, una voz empezó a hablar desde unos altavoces.

-Saludos agentes, soy yo, el famoso Silken. Creo que es hora de que vayamos conociéndonos un poco más ¿no creeis?
Pero no va a ser tan fácil, yo también tengo "amigos".

La gente de a pie empezó a colocarse máscaras blancas e inexplesivas, solo con 2 agujeros para los ojos y 2 para la nariz.
Debían de ser unos 2000 transeúntes que nos rodeaban.
Nosotros eramos 50, contando a los policías anti disturbios.

-Estamos jodidos.

Añadió Mirka.

-Vale, hora de calmarse chicos, no entréis en pánico.

Dijo mi tia.

-Está en el 2- edificio entrando por la derecha. Allí es donde más gente hay. Cubridme el culo, vamos a entrar.

Todos obedecimos a Matt y nos juntamos. Lo bueno está por comenzar...

SilkenDonde viven las historias. Descúbrelo ahora