Aparté las manos de Fumoari y cogí mi fusil del suelo.
-¿Donde vas?
-A matar a Silken.
-No puedo permitir que mates a nadie más. Ya es suficiente. Las ordenes de Matt son de arrestar a Silken, no de ejecutarlo.
-Me da igual lo que diga Matt, voy a matar a Silken.
Jishiari se puso en medio con los brazos abiertos, impidiendome el paso.
-Pues tendrás que matarme a mi antes...
Apunté a Jishiari en la cabeza y no aparté mi mirada.
-Apartate o te disparo.
-Ya basta, Fumoari, baja y ayuda al resto, yo me quedo aquí.
Dejé pasar al grandote mientras seguía apuntando a Jishiari.
-Tojino, no te dejes llevar por las emociones. Piensa, eres un agente del FBI, no un sicario. Así que por favor, suelta el arma.
-Diez.
-¿Diez?
-O te apartas en 10 segundos, o te vuelo la cabeza.
-Si haces eso irás a la cárcel.
-¿Y que más da ir a la cárcel? No me queda a nadie. No seria muy diferente allí.
-¿Acaso te olvidas de tu hermana? ¿Quien la cuidará cuando no estés?
Seguí apuntándole, aunque con más dudas que antes.
-Apartate, por favor, estás en mi camino.
- Ya te he dicho que no te voy a dejar matarle.
-No voy a matarte Jishiari, pero te vas a quitar si o si. Por las buenas o por las malas.
-Esta bien... Pero con una condición. No mates a Silken, si lo haces te echarán del cuerpo.
-No prometo nada.
Relegué a Jishiari y avancé.
Cuando llegué hasta donde supuestamente estaba Matt, le vi tendido en el suelo y con un disparo en el pecho. Me acerqué corriendo.-¿Estás bien?
-Si... Ayudame a levantarme.
Apoyé su brazo en mi hombro y lo levanté. Le senté en una silla que había cerca.
-¿Qué ha pasado?
-Silken me disparó cuando me distraje durante un momento. Suerte que pude ver su cara...
-¿Has visto quien era?
-Si, y mis sospechas no eran para nada erróneas. Silken es Mirka...
No puede ser... El hombre que ha matado a mis padres, a mi tía y a una de mis mejores amigas... Es el que en su día fue mi mejor amigo.
-Ese...cabrón... ¿Dónde cojones está?
-Ha huido a la planta de arriba. Pero no vayas sólo, te acompañaré.
-Ni se te ocurra, quedate aquí. Solo te pido una cosa.
-¿De que se trata?
-¿Me lo puedo cargar?
-Haz lo que veas conveniente.
Matt me dio los cargadores que le quedaban y subí. Me encontré con unos pocos rezagados. Pero conseguí matar a todos. Llegué a la planta de arriba y un grandullón me tapó el camino.
Le disparé hasta vaciar todo un cargador, pero seguía en pie.-No vas a pasar de aquí, enano.
Le vacié otro cargador, pero se mantuvo firme. Me iba acercando poco a poco. Cuando estaba a escasos metros, me lanzó una granada, la cual cogí y y se la devolví, estallandola en su cara. De su cara solo quedaba parte de la carne que rodeaba a su ojo derecho. Cayó al suelo y, obviamente, murió.
Ya no sentía nada al matar a alguien. Le había quitado la vida a tantas personas que el echo de matar a una más me era indiferente. Registré el piso, pero no lo encontré. Mi móvil empezó a sonar.-¿Minote?
-¡Sal fuera, rápido!
-¿Que pasa?
-Dentro del edificio...
La llamada se corto.
-¿Minote, me oyes? ¡Minote!
De pronto, un olor a quemado retumbó en mi sentido olfativo. Me giré y vi que una enorme llamarada se dirigía hasta mi.
Cuando me dispuse a correr, un golpe en la cabeza me tumbó al suelo.-Tiempo sin verte, Tojino.
Esa voz...
-¡Mirka!
Pegó una patada a mi fusil y el fuego lo consumió.
Me cogió con fuerza del brazo y me estampó contra la pared.- Esta vez no te voy a dejar escapar Tojino.
Estaba mareado por el golpe. Me sujetó y me llevó cerca del fuego. Volví en mi lo bastante rápido para golpearle en el abdomen y me solté. Me puse en pie y me alejé del fuego.
-Serás...
Mirka se levantó, y cuando lo hizo lo recibí con una patada, que lo tiró al fuego.
Sus gritos retumbaron por todo el pasillo. Salí corriendo de allí en dirección a la salida. Mis pasos eran torpes dado por el mareo que aún rondaba por mi interior. Noté entonces, que una mano se apoyó en mi.- ¿Estás bien Tojino?
Era la hermana de Tokuari. Asentí con la cabeza y me ayudó a salir de allí.
Una vez fuera me atendieron los pocos médicos del hospital que seguían vivos y con un buen estado físico.
Me acerqué a Minote.-¿Que ha pasado con Tokuari?
-Se lo han llevado, y dicen que es posible que pierda la pierna. Pero su vida no corre peligro.
-¿Y Matt?
-También se lo llevaron. Pero esta bastante mejor que Tokuari.
Prefiero no decir nada a cerca de lo de Mirka hasta decírselo a Matt primero.
El resto estaban bien.-Bueno, creo que ya lo sabrás, pero han muerto Mitaka y mi tía.
-Ya, me informó de eso Jishiari. Siento mucho lo ocurrido. Si quieres puedo quedarme con tu hermana un tiempo hasta que...
-Si, te lo agradecería mucho.
Tras esto decidimos volver a nuestras respectivas casas, mañana sería todo muy distinto.
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Y bueno, como el capitulo ha sido un pelin corto, me gustaría poner aquí una pequeña dedicatoria a los pocos que seguís mi historia. Gracias por estar ahí durante estos escasos 19 capítulos.
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Silken
Mystery / ThrillerTojino Kudomo es un joven estudiante de 17 años con una vida aburrida y repetitiva. Un día de vuelta al llegar al instituto encuentra un sobre cuyo contenido era una cuchilla de afeitar duchada en sangre y una pequeña nota: " stalking you".