Dia 6. Elección y batalla.

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He vuelto a casa y como era de esperar había una nota en mi mesa de estudio.
"Hola Tojino:
Voy a serte claro, ya se que has elegido colaborar con Matt en vez de conmigo, pero te diré algo, a él no le importas, ni tú ni tu hermana. Le da igual si la pobre Kushiri muere. ¿Quieres a tu hermana viva verdad? Pues ayudame en secreto y no le pasará nada. Hay una nota en el cajón de esta mesa. Contiene lo mismo que la que ibas a entregar ayer a Minote. Dejala en su taquilla cuando nadie te vea. Y si te ve di que es una carta de confesión y que no se lo diga a nadie."

Nuevamente me encontraba en un dilema. ¿Hacia caso a Silken y corría el peligro de entrar en prisión y de que no recuperen a mi hermana, o ayudo a Matt y tanto mi vida como la de mi hermana corren peligro?"
Me hice la mochila y salí al instituto. De camino me encontré a Mitaka, la chica que le mola a Tokuari.

-Ey Tojino.

-Hola Mitaka, ¿que tal?

-Bien, un poco asustada por lo de ayer, es raro ver a policías entrar en nuestro instituto, parecía que fuesen a arrestar a un asesino o algo.

-Si, jajaja. Me lo contó Nojiari, ayer estuve malo.

Estuvimos hablando un rato más hasta llegar a clase. En la entrada del instituto estaba Matt junto a un agente totalmente trajeado y con gafas de sol que le tapaban los ojos.
Pero... Le notaba algo diferente.

-Hola Matt, ¿que haces aquí?

-Ah, es verdad, se me olvidó decírtelo, me he cambiado a este instituto para investigar a los alumnos. Tal y como me dijiste ayer, es bastante probable que Silken sea en realidad un alumno de tu escuela. Así que estaré en tu clase primero para investigar a los alumnos de la dicha, y después iré a otros cursos. Así hasta dar con él. Es un proceso lento, pero puede que sea eficaz.

-Espera, para el carro, ¿has dicho que vas a estar en mi clase?

-Si, eso he dicho.

Lo que faltaba, el rarito que trabaja con mi tía en mi clase...

-Por cierto, ¿que tienes en el labio?

-Ah, es mi piercing. No suelo llevarlo por cuestiones de trabajo, pero ahora estoy en un ambiente más relajado y puedo llevarlo.

Entre en mi aula con Matt siguiendome de muy cerca. Notaba como su respiración chocaba contra mi nuca, provocando un escalofrío en mi espina dorsal.

Al entrar en clase todos hablaban, como siempre excepto Jishiari, que leía, todo normal.

Me dirigí a mi pupitre para dejar mis cosas. Me giré y vi que Matt aún me seguía.

-¿Me vas a seguir mucho más tiempo?

-No conozco a nadie, y para no molestar me quedo contigo.

A mi ya me molestas...
El profesor empezó a dar clases y Matt no paraba de tomas nota en todo momento. Ah, y si, estaba sentado al lado mía.

-¿Que se supone que haces?

-Tomo nota sobre el comportamiento de los alumnos y alumnas y descarto quien puede ser Silken.

Llegó la hora del recreo y Matt se puso en una esquina de la cancha de baloncesto para seguir apuntando quien podía ser el temible asesino de los agentes del FBI. Que ridículo, ¿ que alumno de aquí podría ser Silken? Nadie era tan inteligente como para hacer algo así. Aproveché para ir a las taquillas y dejar la nota en la de Minote cuando apareció Matt de la nada, pegandome un susto.

-Joder, que susto me has dado Matt.

-¿Que le has metido en la taquilla a Minote?

-Ah, eso, no es nada tranquilo.

-Si no es nada, ¿ no te importará si la rompo y abro la carta verdad?

-¡No, ni se te ocurra!

-Entonces dime que es.

-Vale, te lo diré, pero con una condición. No le digas nada a nadie, ni a mi tía ni a ningún alumno de mi clase ¿vale?

-Esta bien.

- Es una carta de amor. Me gusta Minote.

Matt no cambió su expresión facial. Creo que estaba empezando a dudar de mi veracidad.

-Ah vale, entonces, se lo diré.

-¡No!- grité yo.- te he dicho que no le digas nada nadie. Me lo has prometido.

Matt torció un poco el labio.

-Bueno vale, no diré nada.

En lo que hablábamos apareció Minote con un cigarro, apagado, en la boca y la llave de su taquilla en la mano derecha.

-Oh mierda, vámonos Matt.

Matt no solo paso de mi, si no que además fue en dirección a Minote.
Se paró en frente suya, impidiéndola el paso.

-¿Te importaría apartarte por favor?

Matt la miraba fijamente a los ojos. Cogió su mano desde la muñeca y miró su palma. Luego empezó a recorrerla de arriba a bajo con la mirada.

-¿Se puede saber que coño haces, rarito?

-Te miro, ¿no te importará verdad?

-Si, me importa. Y ahora aparta de mi camino.

Trató de empujar a Matt, pero este le agarró la mano nuevamente. Acercó su otra mano hasta la cara de la joven y la acarició levemente. La siguió arrastrando hasta su boca, y cuando llegó ahí hizo un rápido cambio de ritmo y le retiro el cigarro de la boca.

-Confiscado. Eres muy joven para fumar y estropearte los pulmones.

-¡Devuelveme mi puto cigarrillo friki de mierda!

-No quiero.

El puño de Minote se cerró y fue directo a la cara de Matt, cuando consiguió parar el golpe con la mano con la que sujetaba a Minote.
De su bolsillo sacó un dulce y se lo puso en la boca a la muchacha.

-Toma, esto como mucho te provocará una caries.

Matt se alejó con el cigarro en mano y la mirada perdida.

Al salir de clases le pregunté sobre sus sospechosos:

-Solo tengo 3, Jishiari Kadoku, Kunomi Arikimo y Mirka Rukashi.

-¿El ruso?

-Mirka no es ruso, nació en Japón, lo que pasa es que su madre es de Moscú.

De pronto Tokuari apareció y cogió a Matt del cuello de la camiseta.

-Escucha friki, vuelve a tocar a Minote y te juro por dios que acabas en silla de ruedas.

-Solo le he quitado un cigarrillo, y lo he hecho por su bien.

Del bolsillo sacó el cigarrillo y un mechero. Se puso el cigarro en la boca y se lo encendió.

-¿Me estás chuleando friki?

-Yo tengo 21 años, ella 17. Yo puedo fumar por ley, ella no. ¿Entiendes la diferencia?

-Te voy a...
Tokuari levantó el puño para golpear a Matt, cuando algo lo paró.

-¿Que se supone que haces Tokuari?

-Fu... Fumoari...

Fumoari Kuzu, un chico un año mayor que yo. A pesar de eso me debe de sacar unas 3 cabezas. Es musculoso y puede que vaya todos los días al gimnasio.

-Dejale en paz, y si vuelves a molestarle, te mato.

Tokuri se fue acojonado y yo volví a casa.

SilkenDonde viven las historias. Descúbrelo ahora