Capítulo 12.

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Ya ha pasado más de una semana desde aquel día de la fiesta en la cual Nick había confesado sus sentimientos hacia mí, y también desde que comenzamos a ser novios. Por suerte, creo que nadie sospecha de nosotros, pero últimamente hemos estado más juntos que de costumbre en las entradas, en los recreos, en los almuerzos, en las salidas del bachiller, así que sería medio tonto de parte de los demás que no comiencen a sospechar algo.

Aunque lo prefiero así por el momento. Si se llegan a enterar de lo que pasa entre nosotros dos, no solamente lo sabrá mi padre, que luego pasará a decírselo a mi madre (así es, todavía no se los he dicho), sino que también lo sabrá Samantha, y éso que sería un gran problemón.

Hoy, lunes, papá vuelve a dar clases después de estar casi una semana sin hacerlo. Ayer a la noche lo llevamos a sacarse los puntos de su operación, y mi tía dijo que ya puede volver a trabajar. Los días que él no fue al bachiller, mamá tenía que llevarme hasta allí, así aprovechaba a ir más temprano a su trabajo en el nuevo local de fotografías que, por lo que veo, la tienen mucho más cómoda y satisfecha que el anterior.

Ahora estamos papá y yo en el auto, de camino hacia el bachiller. Estoy con los nervios carcomiéndome entera. Mi pierna derecha se agitaba frenéticamente de forma involuntaria, y cuando la detenía volvía a agitarse cada vez más rápido.

No pude evitar sacar mi celular del bolsillo, y teclear con nerviosismo en la pantalla casi quebrada.

"Estoy yendo con papá al bachiller. ¡Aléjate de mi casillero, ahora!", le envié un mensaje de texto a Nick.

Desde el lunes pasado, Nick se ha predispuesto a esperarme en mi casillero para recibirme. Obviamente no con un beso para no despertar alarmas de alerta a los chismosos, pero sí con un abrazo, en lo que era inevitable que algunos estudiantes que pasaban a nuestro lado voltearan a vernos, aunque luego nos ignoraban y seguían con sus vidas.

O éso creo yo.

Como sea, aprovechando que Nick llega más temprano que yo al bachiller, él me espera en mi casillero para darme un abrazo, y no quiero que papá presencie éso. Todavía ni él ni mamá saben de mi relación con Nick, y creo que sería algo súper humillante que mi padre se entere de éso de ésa manera, o sea, al verme abrazando a Nick. O que vea a Nick esperándome en mi casillero.

No sé cuál de las dos cosas que podría ver papá sea peor. Si que me vea abrazando a Nick cuando ingrese a la institución, o que vea a Nick parado justo al lado de mi casillero, sabiendo que hay como más de mil casilleros en donde quedarse.

Mi celular vribró, y pude ver que Nick me respondió.

"¿Por qué? No me digas que todavía no se lo has dicho...", decía el mensaje de Nick.

Ahora mismo sentía que me ponía de todos los colores.

"Todavía no, pero pronto se lo diré. Te lo prometo.", le respondí.


"Éso espero. Apenas estamos saliendo una semana y ya me siento harto de ocultar lo nuestro."


"A mí tampoco me gusta, pero se lo diré en cuanto pueda. Te lo prometo, en serio."


"Ok, nos vemos más tarde."

Sentí que papá me miró por un segundo.

—¿Con quién te escribes? —preguntó, mirando devuelta al frente—.

Automáticamente presioné el botón de Apagado de mi celular.

Complicada. «Muda 3»Donde viven las historias. Descúbrelo ahora