11. El pasado y el presente.

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"-¿Te gustaría ser mi novio?- preguntó el azabache con una sonrisa de oreja a oreja y con su mano extendida hacia el rubio de ojos verdes.
-¡GAH! ¿N-No está mal si son dos hombres?- Craig frunció el seño molesto y negó con la cabeza.
-Sólo está mal si tu no quieres.
-P-Pero yo si quiero...- Tweek alzó su mano y rápidamente la juntó con la de Craig.
-Entonces yo creo que no hay problema"

Bebe miraba a Kenny con una ceja alzada mientras este le sonreía divertido, sus cejas se movían de arriba hacia abajo y ante sus gestos la chica no pudo evitar reír.

-¿Estás lista?

-Nací lista

-Uy, ella- Kenny agitó su mano de un lado a otro y la rubia volvió a reír. Logrando que el rubio también riera- Bueno... Uno... Dos... Tres. ¡Acción!


Kenny comenzó la coreografía con una sonrisa marcada en sus labios, Bebe dejaba escapar un par de risas mientras ambos se movían al ritmo de Sugar.

El rubio no había mentido cuando dijo que sabía bailar, y ahora mismo se lo demostraba a la rubia al moverse con ritmo y agilidad a su lado, haciendo rostros graciosos y logrando hacer reír a la chica de paso.

Por primera vez después de mucho tiempo, Bebe sentía que podía bailar sin tener que escuchar susurros de odio a sus espaldas, y se sentía tan bien que creía que podía llorar de felicidad.

Mientras se movía, las voces de odio, de resentimiento, iban desapareciendo, y toda esta frustración se iba y era reemplazada por la sonrisa que le daba el rubio mientras ambos movían su cuerpo al ritmo de la música.

Cuando la música terminó ambos se miraron con una gran sonrisa, sus pechos se movían agitados debido a los constantes movimientos, pero no era nada de lo que se tuvieran que preocupar.

-Hey, fue un gran baile ¿no crees?- Bebe se encogió de hombros mientras recibía la toalla que le entregaba el chico y se limpiaba su rostro y cuello con esta.

-Pudo haber sido mejor.

-¿Insinúas que soy malo haciendo coreografías?- Kenny puso una mano en su pecho, ofendido.

-Malo no, el peor de todos.- Bebe no pudo evitar reír al ver como Kenny dramatizaba y se tiraba al suelo "dolido por sus palabras"

-Nunca más te fiaré mis habilidades como bailarín- Kenny se limpió su frente con otra toalla y seguido la puso en la cara de la chica, logrando que esta gritara de asco.

-¡Kenny! ¡No seas cerdo!- a pesar de eso, la chica había vuelto a reír ante el acto del contrario.

-Vamos, de todas formas te vas a bañar después- Kenny se encogió de hombros y besó la frente de la chica, sin importarle si esta estaba sudada- Ya es hora de ir a dormir, buenas noches Bebe.

-Buenas noches Kenny...- Y una vez el rubio se fue, Bebe dejó escapar su última sonrisa en el día.

Jamás se había divertido tanto al bailar.

Sueños (Borrador)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora