GRACIAS MAMÁ

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Te encuentras frente a la tumba de tu madre, aquel bloque de cemento que tiene grabado el nombre de "Orihime de Cifer" sirviendo como identificación, en este sitio se encuentra la mujer que te trajo al mundo. Lo sabes desde que tuviste uso de razón tu padre y tus tíos se habían encargado de contarles historias de ella, pero nunca se atrevieron a decirle por qué y el cómo murió, esto último te enteraste a tus escasos 2 años y medios, guardaste silencio y guardaste el dolor de saber que al nacer tu madre murió.

En las historias de tu padre y tus tíos siempre relataban las expresiones físicas, su comportamiento, su personalidad, sus gustos y el amor por los días soleados. En las noches sueñas con tu madre y siempre era el mismo sueño que deseas algún día hacer realidad; que te estrecha entre sus brazos y sentir sus labios sobre tu frente y tus mejillas hasta dejarte extasiado de tanto amor, pero, al despertar la realidad era diferente.

A pesar de tu corta edad tu capacidad de comprensión y de habla es mayor a la de otros niños, entendías que tu madre ya no está en este mundo, tratas de comprender que había llegado su momento de partir "una vida por otra, mientras unos llegan otros se van" realidad dolorosa.

Te sientas sobre el pasto y llevas tu pequeña mano a la foto de la lápida y no puedes evitar hacerte la misma pregunta una vez más ¿en qué me parezco a ti? Te veías una y otra vez en el espejo buscando alguna similitud, por tu tío siempre expresaba que eres igual a tu padre; en personalidad, en la capacidad de decir las cosas, en tu rostro, tu tono de pie y tu cabello, pero no quieres es igual a tu padre solo quieres ser igual a ella, no solo en tus ojos sino en todo lo demás, deseas tener más de la mujer que te dio la vida.

Miras al cielo y recuerdas a tu padre, era un buen padre a pesar de su apariencia fría ante lo demás contigo era completamente distinto, se esmera en hacerte sonreír en cumplir la tarea de padre y madre que sabias que era difícil realizar. Tus labios surcaron una pequeña sonrisa al recordar una pelea que tuviste con tu primo, haciéndote enojar y saliendo a relucir un comportamiento diferente al habitual, y la sonrisa y el brillo en los ojos de tu padre al verte de esa manera por tu comportamiento, en medio de tu confusión tu tía se puso a tu altura y con sus ojos cristalizados, delineo con su dedo cada parte de tu rostro y sonreía con nostalgia al contarte la razón

"A pesar que tu tío diga que te pareces a tu padre, yo no lo veo así y tu padre piensa igual...Dei dijiste que querías saber en qué te pareces a tu madre, te diré que no solo tienes en sus ojos, tienes su sonrisa, cuando eres descuidado en algunas cosas, en el tipo de comida que te gusta que es incomible, cuando te enojas haces sus expresiones sacando por completo a tu amada madre"

Aquellas palabras te causaron felicidad y tranquilidad. El cielo se encuentra completamente despejado, un día totalmente soleado que en otro momento disfrutarías, pero hoy no podrías hacerlo, porque hoy es tu cumpleaños y el día que tu madre murió. No podías en ocasiones evitar sentirte culpable de haber nacido porque tu nacimiento fue la causa de la partida de tu madre, pero no podías decirlo en voz alta porque sabias que esas palabras lastimarían enormemente a tu padre.

Bajas tu mirada y tu rostro refleja la más profunda tristeza. No sabes que decir, solo lloras en silencio, tan largo y profundo es el silencio para llegar a expresar todo lo que tu corazón siente.

––Hola...Ma-mamá –– Musitas entre sollozos. Tomas aire para continuar aquella solitaria conversación –– te extraño mucho, me estoy portando bien, hago mis tareas y ya hice muchos amigos, sabes ellos siempre hablan de sus mamás y la rica comida que les preparan y veo cómo van a recogerlos a la escuela. A veces pienso que si tú estuvieras todo sería distinto.

A pesar de tener a tu padre, eres consiente que hay un vacío en tu corazón, uno que nunca podrás llenar.

––Mira mamá hice un dibujo donde estamos nosotros tres –– señalaba la hoja que habías sacado de tu bolsillo y mencionas las personas que hacen parte de él –– aquí está mi papá, esta eres tú y este soy yo junto a mi pastel. Yo...nosotros estaremos bien no te preocupes –– sonríes sabiendo en tu corazón que eso no era posible.

LAZOSDonde viven las historias. Descúbrelo ahora