LAZOS

CAPITULO 23 EL DÍA QUE TE PERDÍ PARTE 3

Cuando el pelinegro empieza a sacar su mano del interior de la mujer, se produjo un ruido proveniente de la puerta.

Sentí como mi alma se salía del cuerpo, la respiración me faltaba, nunca me imaginé que esto sería posible, ¿qué hacia ella aquí? ¿cómo supo?

A los pocos minutos de haber salido el pelinegro de su casa, orihime había recibido una llamada de parte de Ichigo, extrañamente preguntando por su esposo, pero ella al decirle que no se encontraba pudo escuchar como el joven soltaba una maldición, acompañado de la frase "me da tristeza orihime darme cuenta que ese imbécil no te valora" la incomodidad por las palabras del peli naranja causaron irritación en ella y antes de que ella pudiera colgar prosiguió "¿tú sabes donde esta ese idiota en estos momentos?" Esas palabras causaron curiosidad en ella, ¿cómo el sabia donde estaba su esposo?  al final le dio una dirección y el numero de un apartamento.

Ella se vistió y se fue a esa dirección, muchos pensamientos cursaron su mente, ¿que estaría haciendo su esposo en ese edificio? ¿porque le había mentido? Tenía miedo, pero quería saber lo que estaba pasando, pero al mismo tiempo no, pero si él no quería dar respuesta, tenía que verlas con sus propios ojos, para dejar de atormentarse. Al encontrarse frente al apartamento sentía su corazón acelerado, las manos heladas, con un miedo palpable, abrió la puerta encontrando a su esposo retirando la mano de la intimada de la mujer que tanto daño le había hecho en el pasado.

Sostenía el Pomo la puerta con fuerza, la peli naranja se encontraba en estado de shock su rostro pálido y las lágrimas amenazaban con salir, pero ella luchaba para mantenerlas dentro. Sentía su cuerpo frió y no podía dejar de temblar ante el cuadro que sus ojos veían. Observa el pelinegro semi-desnudo y sus dedos cubiertos de sangre, con dificulta su mirada se desplaza a la mujer, su rostro figuraba miedo y trataba de cubrir su cuerpo. Correr, ese fue su primer pensamiento pero su cuerpo no se movía, sentía que la respiración le hacía falta y se comenzaba a sentirse mareada.

- Respira – le dijo el pelinegro tratando de conservar la calma, dio un paso adelante para acercarse a ella

Al mirar que él se acercaba dio un paso hacia atrás – ¡No me digas que tengo que hacer! – espeto con rabia

En un momento sale lo más rápido que puede de la habitación y Ulquiorra por unos segundos trata de asimilar lo que había pasado, cuando reacciono toma su camisa y sale detrás de ella. Pero antes de salir Halibel dijo unas palabras que no escucho con exactitud por la prisa de detener a su amada.

Las lágrimas que tanto lucho por retener empezaron a salir, se abre el ascensor, escucha la voz de Ulquiorra llamándola y ella oprime lo más rápido que podía el boton para que la puerta se cerrara, el pelinegro al no alcanzar a llegar al ascensor, baja corriendo las escaleras.

Esto no podía estar pasando, debí contemplar esa posibilidad, pero ya no había caso haberlo hecho, esas eran las consecuencias por haber tomado esa decisión, perderla...pero nunca imagine que la perdería para siempre. Al tratar de alcanzarla, mi mente solo tenía presente la cara de orihime al verme en esa situación, me sentía culpable, me maldecía, pero sabía que ella estaría en peligro si no hacía algo. Bajé lo más rápido que podía, quería explicarle que las cosas no eran lo que parecía, que tenía razones de peso para hacer lo que hice. Pero cuando llegue al primer nivel del edificio solo vi cuando ella se marcha en el carro, no lo dude y fui por mi carro para ir detrás de ella

***

Se escuchó un gran estruendo proveniente del cielo, la lluvia volvió a caer con más fuerza, la peli naranja se encontraba manejando a toda prisa su vehículo, se sentía aturdía, lo único que tenía en su cabeza era la imagen de su marido con su amante, se preguntaba ¿por cuanto tiempo la estuvo engañando? ¿Será que siempre fueron amantes y el fingió durante todo este tiempo amarla? Si lo hizo era un buen actor, verle la cara de estúpida mientras ella se enamoraba cada día más de él. Hundió mas acelerador, sus lágrimas caen con profundo dolor, el hombre que tanto amo la había traicionado, todo su cuerpo temblaba, no dejaba de sollozar se sentía herida, sentía un vacío dentro de su pecho.