—Entonces, ¿el otro muchacho sólo estaba ahí por trabajo? —comenta Jung Yeop mientras revisa el informe preliminar de Myung Soo.
—Así es jefe. Era un joven que ofrecía servicios sexuales, pero su agencia no quiere proporcionarnos la información de quién lo contrató, a menos de que tengamos una orden. Aunque eso explica porque el asesino lo mató de un solo disparo. Su principal objetivo era Lee Ho Won. Estoy seguro de que sólo se trata de una distracción para nosotros.
—¿Y por qué está seguro de eso, detective? Hay dos personas muertas; es justo que nuestras investigaciones nos lleven a encontrar a su asesino.
—Señor, he llevado varios casos como este, y le puedo decir que no es necesario que pidamos esa orden —concluye Myung Soo, demasiado confiado. Jung Yeop lo mira a los ojos un momento y después asiente, continuando con la revisión del informe.
Myung Soo suspira en silencio y le es inevitable no pensar en el muchacho que conoció un par de horas antes: Lee Sung Jong. Recuerda su mirada llena de miedo y lo frágil que parecía el joven. El detective no duda que está metido en problemas y que había ido ahí para buscar ayuda, así que, la posibilidad de que regrese, se clava en su mente. Kim está seguro de que, la próxima vez que lo vea, no lo va a dejar ir hasta que le diga qué le pasaba.
—Quiero que regreses al hotel y vuelvas a interrogar al encargado de seguridad. También busca a la mucama que encontró los cuerpos, y habla de nuevo con ella. Tal vez haya algo que no nos dijo.
—De acuerdo, jefe. —El detective le ofrece una reverencia y enseguida se da la vuelta para regresar a su cubículo—. Ji Soo, iré de nuevo a Gangnam —le hace saber a su compañera, quien permanece frente al escritorio, revisando unos documentos.
—¿Quieres que te acompañe?
—No, gracias. Quiero que investigues si Lee Ho Won tenía problemas en la compañía para la que trabajaba. Consigue las direcciones y los números telefónicos de sus familiares y amigos.
—Está bien. —Myung Soo toma su chaqueta y se la coloca antes de darse la vuelta para caminar hacia el elevador, pero, de pronto, regresa sobre sus pasos; ha olvidado darle otra indicación a su compañera—. Ji Soo, si aparece un chico llamado Lee Sung Jong, dile que me espere.
—De acuerdo.
∞
—Te extrañé, bebé —dice Woo Hyun al deslizar su mano bajo la ropa interior de su alumno una vez que se deshace de su cinturón y baja la cremallera del su pantalón.
Sung Kyu suspira sobre su ensalivado beso y jadea al sentir la fría palma de su profesor tomar su húmedo miembro. Nam comienza entonces un desesperado vaivén y el más joven aprieta los ojos, mordiéndose el labio inferior para acallar un agudo gemido cuando siente a su cuerpo llegar al orgasmo, manchando la mano de su maestro en el proceso.
El pelirrojo entreabre los labios y su profesor lo besa de nuevo, enredando los dedos en sus cabellos mientras su lengua invade su boca. Woo Hyun se separa un momento y alcanza unos cuantos pañuelos desechables del escritorio (donde su alumno estaba sentado) para asearse la mano. Le planta otro beso en la frente y Sung Kyu dibuja una socarrona sonrisa.
—Salgamos este fin de semana —menciona de pronto Kim mientras juguetea con la corbata de su profesor.
—No puedo. Iré a una conferencia de literatura y saldré de la cuidad por varios días —responde, besándolo de nuevo en la frente—. Tal vez el siguiente.
Y Sung Kyu siente que su pecho se llena de decepción. No puede permanecer por mucho tiempo sin sentir el calor de Woo Hyun envolverle el cuerpo. El muchacho empieza a considerar que, a esas alturas, ya ha perdido totalmente la cabeza por su maestro, cuando, en un principio, creyó que sería al revés. Kim había estado seguro al inicio de la relación, que Nam se enamoraría de él como un loco. Pero, aún no pierde la esperanza de que él dejara a su esposa para estar a su lado por siempre.
—Entonces, vamos a un hotel mañana. Me muero de ganas por tenerte dentro de mí —dice al fin, aunque, de cierto modo, su petición se escucha como una desesperada súplica.
Y Woo Hyun sonríe con picardía antes de sujetarlo de la cintura y ayudarlo a bajar del mueble. Atrapa de nuevo sus labios por un instante, y después se deja caer en la silla tras él. El profesor abre las piernas, invitando a su joven alumno a acercarse un poco más. Sung Kyu parpadea unas cuantas veces, observando con deseo al mayor desabrochar sus pantalones y bajar su ropa interior. Y Kim se acomoda entre sus muslos, tomando la base de su pene con ambas manos antes de hacerlo desaparecer en su boca.
Woo Hyun ahoga un jadeo, sujetando de los cabellos al muchacho mientras éste lo observa con los ojos inyectados de lujuria. Sung Kyu acelera sus candentes movimientos, y Nam no tarda mucho en disparar su caliente semilla directo en su garganta, soltando un último gemido de placer.
∞
—Ya le dije todo lo que sé, detective Kim. Así que no creo que pueda serle de mucha ayuda —asegura la mujer del servicio cuando la encuentra en la lavandería del hotel.
Pero Myung Soo no está conforme con su declaración; la mirada insegura de la mucama le dice que está ocultando algo más, y que ella, tal vez sólo tiene miedo.
—Le recuerdo, señora Park, que, si al final de la investigación se descubre que no estaba diciendo toda la verdad, será acusada de complicidad en dos homicidios —comenta seriamente, clavando su fría mirada en la de la asustada mujer—. Por favor, sólo quiero protegerla.
Tragando saliva con dureza, la camarera cierra los ojos por un momento antes de ceñir las manos sobre su falda. Suspira largamente y se muerde los labios con nerviosismo. Después, al pensarlo un poco más, asiente a las palabras de Myung Soo y abre sus ojos de nuevo.
—Ese día, antes de que encontrara los cuerpos, me topé con un joven en el pasillo. Me saludó y mencionó que ya era tarde. Miró su costoso reloj de pulso y me sonrió antes de subir al elevador. Recuerdo que tenía una inscripción en el extensible; un dibujo de un infinito con algunas letras en el centro. Me parece que es el emblema de una universidad muy prestigiada —explica ella con los ojos húmedos—. No pude ver su rostro, llevaba una gorra, lentes oscuros y un tapabocas. Pero estoy segura de que era un hombre joven por el tono de su voz. —Myung Soo frunce el ceño y la testigo baja la mirada.
—Revisé los videos de seguridad, y el encargado dijo que el sistema había estado teniendo fallas. En la grabación que nos entregaron, sólo se puede ver a una de las víctimas entrar a la habitación, además, confirmamos a todos los huéspedes de ese día con el registro.
—Eso fue todo lo que vi detective. Por favor, no le diga a nadie. No quiero involucrar a mi familia, ni perder mi empleo —dice la mujer con la voz entrecortada, a la vez que deja escapar las lágrimas. El detective siente pena por ella y saca un pañuelo del interior de su saco.
—No se preocupe. Esto es extraoficial —le asegura, ofreciéndole el pequeño lienzo.
Ella le dedica una reverencia antes de darle las gracias. Entonces la camarera regresa a su labor en la lavandería del hotel, y Myung Soo sale del edificio para abordar su auto, pero antes de ponerlo en marcha, saca su móvil y llama a su compañera.
—¿Descubriste algo más? —pregunta Ji Soo, intrigada, al otro lado de la línea.
Kim sonríe de lado y asiente para sí mismo.
—Claro que sí. Y creo que este caso está casi resuelto.
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¿No podías amarme? | WooGyu/MyungJong
FanfictionSung Kyu está enamorado de su profesor de literatura; un hombre maduro, casado y quien lo ha arrastrado a un mundo de mentiras y sumisión. ☆CONTENIDO ADULTO ☆Temática BL ⃒ Woo Hyun - Sung Kyu (WooGyu) / Myung Soo - Sung Jong (MyungJong) ☆Universo Al...