Capítulo XXIII~ ¿Puedes vigilarla?

326 16 9
                                    


POV Myle

Es extraño estar sin ti, si muero por ti en una sola tarde imagínate de ahora en adelante. Nunca creí atreverme a dejarte ya que eras mi costumbre. Que repentino giro dio mi vida.

La luz insoportable de la mañana me despierta, el sol sale y ese balcón hace que me invada por completa. Con dificultad me levanto de la cama, Ana ya despertó, supongo que no lleva mucho pues se escucha la regadera y su cama sigue destendida, eso me recuerda arreglar la mía. Terminando con la cama, busco ropa que aún sigue en mi maleta, lo primero que veo es una falda tableada azul marino, no sé para que la tengo si no la uso, razón por la cual fue lo primero que vi ya que tengo a la mano la ropa que usualmente me pongo. La aparte a un lado buscando algo mejor que ponerme aunque las palabras de Ana me llegaron a la mente: "Ve este rompimiento como un nuevo comienzo, cambia un poco tus rutinas". Si visto diferente sería un cambio ¿no? Es decir, casi nunca uso faldas solo cuando Mikey no lavaba ropa pero repito CASI NUNCA USO FALDAS y mucho menos vestidos, mi ex novio era muy celoso como para dejarme salir así sin estar acompañada de él.
Si mi vida dio un giro, puedo hacerlo yo también, por mí misma.

Terminé vistiendo la falda, unos tacones que no pasan de los 10 centímetros y una camisa azul pastel que quedó perfecto con el juego. El baño esta abierto asi que me dispongo a entrar para cepillarme los dientes ya arreglarme un poco. Justo cuando empezaba a cepillarme Ana abre la cortina dejándose ver tal y como llegó al mundo, desnuda. Mis ojos se abren como platos al mirarla por el reflejo del espejo y me trago la pasta de dientes, es la primera vez que la veo así, me avergüenza un poco y a ella no parece molestarle.

-¡Ah, Myle! Buenos días- dice con un ánimo que en estos momentos admiro de ella -¿Ya desayunaste?- Dios esta mujer no tiene vergüenza, ni siquiera se ha puesto una toalla.

-N-no, aún no...- desvío la mirada, nunca me percaté de que Ana tenía un cuerpo de envidia, no logro entender por qué no tiene novio.

-¡Hey, que linda te ves! El azul te sienta genial.

-Gracias, a ti también te quedaría bien si al menos te vistes.

-¿Eh?... ¡Oh! ¿Te da pena verme desnuda? Tranquila no tengo otra cosa que tú no tengas- burla.

-Pechos sí, Ana- la miro con obviedad.

-Oww pero si tus pechos son... ¡Pequeños milagros!

-Que mala eres para mentir ¡y cubrete con algo! Me haces sentir mal...

-¡Lo digo en serio! Hacen que te veas más pequeña, son firmes y bien formaditos además de que te hacen ver como muñequita.

Esta chica en serio me sube el ánimo aunque sea un poco pues mi rompimiento no sale de mi cabeza.

-Gracias, en serio me ayuda saberlo...- en serio me ayuda

-Eres hermosa en cada aspecto Myle- me alaga mientras al fin se cubre con la toalla -Pobre del quien te pierda...

-Tal vez..- encojo un hombro y sin mostrar interés continúo por lavarme los dientes pero su último comentario me llegó hasta Miguel, tonta tortuga.

Final POV

El par de amigas acabaron con su arreglo de aspecto, Myle parecía una chica sacada de revista de modas juveniles, se veía más como una estudiante guapa que una joven a punto de ir al trabajo. Saliendo del departamento de Ana las miradas en ambas cayeron como rayo, ese par se veía como para dar una buena mirada, los vecinos babeaban y ahora lo hacían el doble con la nueva vecina, esas piernas delgadas y sexys atraían pero destacaba más su bello rostro.

ENAMORADA DE UN PATÁN (TMNT LEMON)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora