Capitulo 5: zona desconocida

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La luz que entra hace que mis ojos se aprieten mas tratando de impedir que los pequeños rayos de sol se filtren entre  mis parpados. Me envuelvo con las suaves sabanas hasta la cabeza y me hago bolita, mi cuerpo entero se siente pesado, no hay manera que hoy llegue temprano a clases. La cama no ayuda ya que hoy parece estar mas suaves que nunca, suspiro y en eso mi sentido del olfato capta una fragancia varonil en ellas, dulce pero no lo suficientemente fuerte.

Una alarma se enciende en mi interior al no reconocer la habitación en la que me encuentro. La cama es enorme toda negra con sabanas de seda, esta está contra la pared frente a un gran ventanal que va desde el suelo al techo, el piso es de madera oscura y se encuentra despejada, sin ninguna prenda de ropa tirada por ahí. En si la habitación tiene un estilo moderno y se encuentra ordenada perfectamente a excepción del bulto que forma mi cuerpo e la cama.

Me quedo viendo fijo mis manos, como todas la mañanas, sin pensar en nada, mi mente se encuentra totalmente bloqueada. La ansiedad y el pánico se hacen presente, cada vez mas intensos. Agarro las sabanas con ambas manos haciendo puños y tratando de liberar tensión de alguna manera, pero seguido de hacer esto siento un dolor en los nudillos de la mano. Claramente están hinchados.

Un flash back del momento en que golpee a hace viejo motociclista, seguida de esta imagen aparecen como en cámara rápida el resto de acontecimientos sucedidos en ese día. 

Como si fuera posible la ansiedad creció haciéndose una bola gigantesca obstruyendo mi pecho. Definitivamente estaba teniendo la peor suerte del universo y ahora sumándole el echo de que nose donde mierda estoy y que seguramente fui secuestrada por uno de esos alcohólicos amantes de los fierros después de haberme desmallado.

Me levanto con dificultad, pierdo el equilibrio y me aferro a una lampara, esto no funciona provocando que caiga al piso causando un estruendo que retumba en la habitación. Cierro los ojos con todas mis fuerzas esperando que quien sea que este en la casa no lo escuchara, ya que eso aria que mi plan de escapar sigilosamente haya fallado. Cuento hasta diez y nada. Cruzo sigilosamente la habitación hacia la salida, porque claramente salir por el ventanal no era una opcion gracias a mi falta de habilidad en el parkour.

En el trayecto paso frente al espejo, viendo así que solo llevaba una camisa que me llegaba hasta la mitad de los muslos. La simple idea de que alguien me haya cambiado por ende tocado provoca un escalofrio en mi, pero nose compara a las sacudidas que hace mi cuerpo al pensar en el simple hecho de que hayan.. bueno de que hayan abusado de mi.

Odio esto, odio no saber, no recordar si habían o no abusado de mi y al mismo tiempo no quería por nada del mundo revivir alguna escena de esa suposición que me estremecía.

El sonido de una tostadora me saca de mi estado de shock. Escaneo el cuarto en busca de algo que me sirva para defenderme de el enemigo. Solo consigo un jarrón muy lindo que me provocada lastima el romperlo si fuera necesario. La verdad deseo con todo mi ser que no lo sea.

Abro lentamente la puerta de manera que solo quede una pequeña abertura por donde podría ver. Del otro lado se extendía un pasillo a la derecha y al final de este una amplias escaleras que bajaban. Me armo de valor y salgo, veo mi entorno y me percato de que estaba despejado, me dirijo hacia las escaleras que dan a la salida. Mi pecho se infla de esperanza al ver junta a esta una mesita con unas llaves encima. Solo tenia que ir, tomar las llaves abrir la puerta y huir lo antes posible. Con el plan en marcha, bajo lo mas rápido que puedo sin hacer ruido, cuatro cinco seis escalones después me encuentro a dos metros de mi salida, ya puedo sentir el alivio que se avecina.

En el primer paso que doy  hacia adelante noto un movimiento por el rabillo del ojo, giro la cabeza en esa dirección y no puedo evitar abrir mi boca y soltar una exclamacion al ver a unos ojos grises que me penetren desde el umbral de la cocina.

Instintivamente apunto con el jarrón por delante de mi  en forma de defensa, pero este esta inestable gracias al temblor de mis manos. Camino para atrás alejándome de el lo mas que puedo al ver que el pretende avanzar en mi dirección.

-¿ Quién eres?. tartamudeo

El sonríe mostrando una perfecta dentadura- Tu héroe.

Mi cara de confusión debe haber sido mucha porque suelta una pequeña carcajada que me hace confundir aun mas. Me quedo estática en mi lugar mientras lo veo acercarse a mi, toma cuidadosamente el jarrón que tengo entre las manos y lo deje a un lado, mis brazos quedan extendidos hacia adelante haciendo dome sentir estúpida por la imagen de retrasada que seguramente estaba dando, pero no podía hacer mucho ya que no encontraba la manera de moverme o de articular alguna palabra ya que me encontraba en un estado donde solo podía enfocarme en darle una lógica a todo esto.

Siento como desliza sus manos por mis brazos deteniéndose hasta llegar a mis muñecas paa después bajarla y dejarlas a mis costados, alzo la mirada y lo encuentro observándome pero de una manera totalmente diferente de hace un momento. Ahora sus ojos reflejan preocupasion y es tan real que me despierta confianza hacia el, que hasta este momento no me había tomado el tiempo de mirarlo realmente y si que era un placer mirarlo.
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N/A: Hola queridas bueno porfin pude subir el capitulo, perdon por tardarme,es q estaba con con temas del colegio etc. Buenos besos y las quierooooo



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