Cap.22; Vive...

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Maria: Bueno, ¿montamos la tienda de campaña?

-: Si.

Nos pasamos una hora montándola y acabamos agotadas. Empezamos a meter las linternas, las cámaras y todo dentro de la tienda hasta que me di cuenta de que sólo había un saco para dormir.

-: Maria, creo que se nos ha olvidado un saco en la entrada.

Maria: Pues no pasa nada no al menos que yo te de asco porque entonces duermes aquí fuera con los tres grados que harán por la noche. - dijo con una sonrisa maliciosa.

-: No tranquila que me gusta compartir saco. - me acerqué a ella - Sobretodo si es con la chica más bonita del mundo y a la que más quiero, después de mi madre claramente.

Maria: A si, ¿y quién es esa? - dijo jugando.

-: Tu boba, tu. Mi bebé.

Maria: Hay, ¿sin ti que haría yo? -me besó en la mejilla y seguidamente yo hice un puchero el cual ella se encargó de cubrir con un besó.

-: Vamos a comer.

Extendimos una manta en el suelo y sacamos los bocadillos y la bebida.

-: Buen provecho.

Maria: Lo mismo digo.

Al terminar recogimos y cogí la cámara para ir a pasear por el bosque.

-: Tu sabes para donde vamos, ¿no?

Maria: Si confía en.. ¡Aahhhh! - se cayó por un pequeño precipicio de dos metros.

-: ¡Maria! ¿Estas bien?

Maria: Si sólo me he rasguñado un poco. Ayudame a subir.

Le extendí la mano rápidamente para que la cogiera. Empecé a hacer fuerza mientras que ella subía poco a poco hasta que al final se sentó en el suelo.

-: Enseñame que te has hecho.

Me mostró su brazo el cual tenía dos cortes pequeños.

-: ¿Te encuentras bien?

Maria: Si porfa sigamos. Quiero mostrarte algo muy especial.

La seguí hasta me pidió que cerrará los ojos. Caminamos unos pasos más hasta que dijo que habriese los ojos.

MelepeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora