Cazadores vs Brujas

Capítulo 24

Era una muralla de brujos que los escoltaba hacia el gran salón, la mirada de los cuales estaba inundada de satisfacción haciendo juego con su sonrisa vengativa. Estos brujos los querían muertos, querían la sangre de cada uno derramada en suelo mágico, conservada en pequeños frascos como trofeo, símbolo de su victoria. Aiden sintió el incontrolable escalofrío nadar por su sangre, impregnándose en sus venas. No esperaba que fuesen demasiados; eran ocho cazadores contra decenas de brujos. Tragó saliva, recordándose a sí mismo lo que era y quién era. Educado para cazar, entrenado para matar. El odio hacia su persona apaciguó el pánico. ¿Desde cuándo se había vuelto tan débil? En un pasado un solo cazador se enfrentaba a más de diez brujos; ocho cazadores eran suficientes... casi.

Llegaron a las grandes puertas que indicaban la entrada. Sus amigos se prepararon empuñando su principal arma. Él sostuvo con firmeza la ballesta, posicionando las municiones con cautela.

Abriéndose las puertas, un número menor mas no insignificante de brujos los estaba esperando. Vastas burlas e insultos ensordecieron la sala. El cazador buscó entre ellos a Lisette, no aceptaba la posibilidad de que ella le hubiese tendido una trampa. Tenía que confirmarlo antes de cometer un ultraje, no tenía mucho tiempo.

Siendo el último del grupo en entrar, sus ojos se condujeron hacia los cuerpos inconscientes que flotaban en el centro del escenario. Reconoció el cabello corto de Kristen, los lentes de Dominique, el rubio cabello de Nastya y el rojo del de Timothy. La presencia de Daniel, por supuesto, no podía olvidarse de él; y de la otra chica, el cabello rubio cenizo, lacio y largo, la piel pálida, no la había visto nunca pero supo que se trataba de Allison.

Sus pensamientos empezaron a dar vueltas. No tenía sentido tener a dos brujos en esa condición si estaban en su contra, ¿una distracción, quizá?

–No hagan nada hasta que yo les diga –ordenó Legend–. Cualquier brujo que se interponga en su camino está muerto, ¿entendido?

***

La tensión en los hombros de Phoenix empezaba a agobiarle. No se negó a colaborar, era su deber como cazadora, para eso había nacido. Aun así no creía que fueran la única presa, los brujos que los habían acompañado durante toda esa odisea también lo eran. Quería defender esa teoría.

A medida que se acercaron al escenario, logró localizar el cabello esponjoso de la chica que un Aiden intranquilo buscaba, a pocos centímetros de ellos. Ella por su parte buscaba a Dimitri, cuando este la distinguió, esbozó una sonrisa alentadora. No se harían daño, nada ni nadie podría obligarlos a enfrentarse. Quiso correr hacia sus brazos, para reafirmar lo que estaba más que claro.

Lisette se volvió hacia Aiden. Cuando lo vio, Phoenix notó cómo la expresión en su rostro se relajó, no tanto como esperaba. Sus orbes indicaban la preocupación que sentía al ver a sus mejores amigos siendo carnadas de su madre; impotente a actuar. Ella estaba en lo cierto, los brujos no los habían engañado. Tenía que decirle a Legend, tenía que saber que ellos también iban a ser de ayuda.

Lamentablemente su advertencia fue interrumpida por la voz de la Dama Gris. Una voz escalofriante combinada con la dulzura de una nana, se escuchaba en toda la sala simulando ser proferida a través de un parlante. Se detuvo en seco, dando media vuelta para ver hacia el estrado donde estaba de pie.

– ¡Nuevas noticias! –Esbozó una sonrisa– La guerra en Mayfies ha cesado. Con un gran número de bajas me complace anunciarles que estamos ganando –vítores de los brujos se alzaron–. Después de esta noche, ya no necesitaremos que se ataquen entre sí. Es una ventaja que hayan reducido el porcentaje.

A su alrededor, varios brujos asintieron.

–La luna llena está por llegar a su punto, tengo el honor de presentarles a nuestros sacrificios –más y más y más ovaciones–. Sangre de Mortal, sensible e indispensable en nuestro organismo que acabara con la especie regándose como pandemia. Sangre de Brujo, mágica e incontrolable, que da el poder de dominar la misma naturaleza. Sangre de Cazador, exclusiva e impetuosa, capaz de ver más allá de la realidad, la primera y última raza que ha logrado hacernos frente y asesinarnos.