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Narra Sofía

Hoy era sábado, por lo que no tenía nada que hacer. El día anterior había hablado con Charlie, oí su grave voz, su carcajada, incluso pude sentir en qué momentos sonreía... Se me revolvía el estómago nada más de pensarlo. Pero he de decir, que fue mejor de lo que esperaba. Menos porque Charlie es el idiota de siempre.

Desde entonces no hemos hablado ni por teléfono, ni por Instagram, ni por Whatsapp. Me parecía un poco incomodo que pudiera ver mi perfil de Whatsapp, aunque no podía evitarlo si es que quería darle mi número y hablar con él.

Mis padres ni sabían nada sobre lo de Charlie. Casi ni les conté qué había pasado entre él y yo cuando solo nos escribíamos notitas en mi diario. ¿Pero a caso es que tengo "algo" con Charlie? ¿Tuve "algo" con él? Nunca lo pudimos aclarar ya que él se tuvo que ir. A veces me pregunto qué hubiese pasado si Charlie se hubiera quedado.

A la hora de cenar, ayudé a mi madre a colocar los platos y los cubiertos en la mesa. Entonces ella empezó a servir la comida y yo fui a llamar a mi padre para que viniera a comer con nosotras. Nos sentamos todos mientras mi madre aún servía parte de la comida. Cuando ya estaba a punto de darle un mordisco a la cena, empezó a sonar mi teléfono en la cocina.

-Voy a ver quién es, podría ser importante. Perdón.

Después de disculparme vergonzosamente, me levanté y me dirigí a la cocina dispuesta a atender el teléfono.

-¿Si?

-¡Sofía! Te llamo para decirte lo irritante que eres -dijo la característica grave y ronca voz de Charlie.

-Si soy tan irritante, ¿para qué llamas? -contesté un tanto molesta.

-Porque es más divertido restregártelo en la cara. Puedo aguantarte con tal de hacerte rabiar -respondió tras una carcajada.

-Charlie, ahora no puedo con tus tonterías, estoy ocupada.

-Haciendo qué -dijo más serio de lo normal.

-Hm, ¿lo que haría alguien normal a esta hora? Solo hay una hora de diferencia de aquí a Londres, deberías saberlo -hice una pausa, esperando a que lo adivinara él solo. Sin embargo, no respondió, así que se lo dije sin rodeos-. Estoy cenando.

-Perdón.

-Está bien, te llamo luego. Adiós.

Ni siquiera le dejé despedirse, colgué el teléfono y fui al comedor donde me esperaban mis padres. Ya me estaba tardando bastante y no quería preocuparles.

-¿Quién era, Sofy? -preguntó mi madre curiosa.

-Nadie importante.

Al decirlo me di cuenta lo seco que sonaba aquello así que añadí algo más. Aquí fue cuando se me fue del todo.

-Bueno sí era importante pero no fue nada. No fue... Nada. Era un chico, no sé...

Sí, en aquel momento me entraron los nervios por las tonterías que había dicho. Por un momento mis padres parecieron no preocuparse. Pero oh, qué equivocada estaba.

-Sofía, ¿era tu novio? -preguntó mi madre, lo que me cogió por sorpresa y por tanto me hizo toser bastante mientras que mi padre se reía a carcajadas por la situación.

-¡No! -negué más alto de lo que pretendía-. Mamá, no tengo novio ni me interesa tener uno.

-Eso no es lo que decías hace unos años con ese tal Charlie -añadió mi padre en voz baja, pero lo suficientemente alto para poder oír lo que dijo.

-Charlie es un amigo. Nada más.

-¿"Es un amigo"? -citó mi padre lentamente cual frase celébre remarcando el "es"-. ¿Tienes algo que contarnos, Sofía?

A veces me molestaba que mi padre fuera sorprendentemente observador.

-Yo... Hm... -la mirada de mis padres caían sobre mí, lo que me ponía más nerviosa. Decidí contarles la verdad, no tenía escapatoría-. He estado hablando otra vez con Charlie.

-¡Te lo dije! ¡Sabía que iba a pasar! -exclamó mi madre-. Dame mis 10€ Ben -añadió refiriéndose a mi padre.

-¿¡Qué!? -exclamé sorprendida y confundida a la vez.

-Está bien, toma -mi padre se sacó jn billete de 10€ del bolsillo y se lo entregó a mi madre.

Me costó entenderlo, pero de repente todo encajó.

-¿Se han apostado 10€ en si iba a volver a hablar con... Charlie? -dije asustada y asombrada, lentamente-. Desde cuándo... ¿Por qué...?

Mis padres se rieron ante mi confusión. ¿Qué clase de padres se apuestan algo si su hija habla con un chico?

-Están locos -añadí.

-Lo sabemos, pero admite que tú también -respondió mi padre.

Todos nos reímos y seguimos riendo. Mi madre me preguntó un poco más sobre Charlie y mi padre dijo que si me hacía algo se iba a asegurar de que camine en una silla de ruedas.

Qué puedo decir, amo a mi familia.



N/A:

¡Feliz día internacional del mostacho! Nadie me ha felicitado aún :'c

Para quien no lo sepa mi apodo es mostacho y no sé, me hizo ilusión :')

¿Les está gustando la historia?

Quiero que sepan que muchas cosas van a pasar 7u79 Denle las gracias a mi creatividad.

Adiós mis rechidos y padrísimos lectores, (no soy mexicana wey)

-Mostacho :{3
A.K.A. GB <3

OUR LIFE; 2Donde viven las historias. Descúbrelo ahora