Dark Souls

Capítulo 18: Revelaciones

"Los humanos definen la confusión como la falta de orden o claridad, o como un error. Creo que lo que siento ahora va mucho más allá de eso, creo que estoy tan desconcertado y perdido que ni siquiera puedo explicarlo.".-Naren

Candy

Tengo que salir de aquí, no sé cómo, pero tengo que hacerlo. El Oráculo parece estarme contemplando a través del vacío de sus ojos y juro que puede adivinar lo que pienso. Estoy en graves aprietos dado que la única persona que puede llevarme lejos de aquí y mostrarme el camino de regreso es justamente la que me pone en peligro.

Entonces, en contra de mi voluntad y con el dolor que me produce que esto ocurra, asumo que hay solo una forma de escapar con vida y que por dolorosa que sea es la única salida que me queda. Tengo que pelear con Bastian, tengo que enfrentarme a él.

-Tu tiempo ha llegado, Princesa- habla con claridad la voz del Oráculo y yo asiento con firmeza, consciente de que puedo triunfar o perder para siempre luego de esto

-Gracias- es todo lo que digo y las puertas a mis espaldas se abren para permitirme salir de allí

Mientras recorro los pasillos, con la frente en alto y la mirada fija en el objetivo, planifico mis pasos a seguir en caso de derrotar o al menos dejar inconsciente a Bastian una vez que salga del castillo. En primer lugar, tendré que encontrar el modo de volver al campamento que abandonamos y despertar a Elijah y Eva porque por mucho que no la tolere, tampoco quiero que acaba sin vida a manos de los Príncipes. A continuación escaparé y buscaré por cielo y tierra a mis amigas, rezando con todas mis fuerzas para que estén sanas y salvas.

Quiero golpearme por haber sido tan imbécil de no leer las señales antes: las cartas breves que le llegaban a Elijah cuando quería saber cómo se encontraba el resto, la excesiva amabilidad que repentinamente experimentaron los Príncipes para con nosotras, todo estaba ahí, justo frente a nuestros ojos. Y no supimos verlo a tiempo, pero ahora sí.

Me apresuro hacia la entrada del enorme lugar pasando del guardia que me recibió inicialmente y justo cuando estoy allí, a punto de cruzar el umbral, despliego mis enormes alas blancas en lo ancho, resplandeciendo y llenando la oscuridad de poderosa luz.

-Estoy lista- susurro para mí y salgo al exterior, observando a Bastian que se despega del muro y en el que estaba reclinado y comienza a caminar hacia mí

Antes de que pueda alcanzarme, levanto una mano y lo impulso hacia atrás, provocando que se golpee fuertemente contra unas rocas, varios metros más allá.

Sin embargo, con su condición poderosa y sobrenatural, no tarde en recuperarse y observarme extrañado, más bien descolocado.

-Candace- señala- ¿Qué estás haciendo?

-Deja las actuaciones de lado ahora mismo- sentencio y mi voz suena increíblemente firme y determinada- Quiero saber qué planes tienen para nosotras o juro por mi padre que lucharé contigo hasta que me los digas

-¿De qué hablas?- inquiere nuevamente- ¿Cuáles planes?

Utilizo toda mi fuerza para levantarlo en lo alto pero él escapa rápidamente y entonces toda mi mente se nubla por completo, debilitándome hasta hacerme caer de rodillas.

Candace, escúchame, murmura una voz en mi mente y aunque intento desprenderme de ella simplemente no lo consigo, está adherida a cada esquina de mis pensamientos.

-¡Sal de mi cabeza!- exclamo pero sé que no lo hará

No sin que antes me escuches. ¿Qué es lo que pasó? ¿Por qué has reaccionado así? ¿Y qué quieres decir con "nuestros planes"? He tenido los mismos planes que tú durante meses.