Capítulo XXIV

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Buenas noches, o madrugadas, por aqui les dejo lo último que he podido escribir... que les puedo decir, me siento fuera de lugar últimamente, así que disculpen algún error o palabras fuertes, traté de medirme. 

Disfrutenlo y porfa no olviden votar si ha sido de su agrado.



ÉL

Mi cabeza tenía ganas de pasar el resto del día recordándome la pesada noche que tuve, la vigilia involuntaria y el agotamiento físico. Me había tomado ya dos pastillas y el efecto que debió tener aún estaba ausente, aunque todo mi ser indicara a gritos que tenía que reposar yo no lo pensaba hacer.

Desde las 6 decidí salir del cuarto, me rendí tratando de capturar el sueño, ya no encontraba que hacer para distraer la mente, había bañado a crixuz, había puesto en orden el desastre de vidrios que aún se encontraban en la sala de estar, y ahora rondaba por la casa sintiendo el despertar de la ciudad que ya empezaba a ponerse en marcha para su dia a dia. Sin embargo aquí seguía yo, atrapado en los episodios de ayer, que rehusados a salir de mi cabeza danzaban uno tras otro trayendo consigo un espiral de emociones que solo despertaba más ansiedad y frustración.

Si Oguard había vuelto o no, no lo sabía, realmente aun no me había largado por la puerta solo por Rebecca, ayer fui un idiota al dejarla sola sintiéndose mal, no puedo evitar comparar mi conducta con la del idiota de mi padrastro, ¿con que cara puedo decir que no se preocupa por ella si se larga dejándola así? Y yo había hecho exactamente lo mismo. Miré el reloj en la pared de la cocina que marcaba las 9 de la mañana, ya no soportaba mas estar aquí encerrado, debía despejar mi mente, sin pensarlo mas subí de prisa las escales sintiendo como cada pisada se clavaba sin piedad en mis sesos, pero no paré, tenía que hacerme pagar por mis tonterías de algún modo ¿no?

Con una franela negra y unos jeans gastados colgué mi morral al hombro, baje igual que antes por las escaleras centrado en el celular donde tenía unas llamadas perdidas, pero antes de poder comprobarlas me topé con alguien al final de la escalera desviando mi interés, Oguard estaba allí impidiéndome el paso.

-no creas con lo de anoche que has ganado, que puedes seguir bajo MI techo sin rendirte a mis reglas y hacer lo que te viene en gana, esto no se queda así, aun no cantes victoria niñito de mierda, si tengo que desaparecerte de mi vida por las malas entonces así será-

-soy bueno con las cosas malas por si no lo habías notado, Si aún no has visto mi peor cara es por respeto a mi madre, no creas que el mérito es por ti-

-si no he visto tu peor cara es porque aun no te la he partido a pedazos mocoso impertinente-

-cuando quieras puedes venir a intentarlo, pero justo ahora voy saliendo, será la próxima- 

paso por su lado golpeando su hombro al pasar con todos mis sentidos alerta con la posibilidad de una respuesta por su parte, pero nada, no oigo nada solo el golpe de la puerta al cerrarla tras de mí. Agradezco mentalmente que Rebecca esta vez no estuviera presente y emprendo mi camino.


***

El Gym está lleno de personas realmente les está yendo bien, hace días que no me daba una vuelta por el lugar, seguramente el padre de Camila debe estar extrañado o incluso molesto por mi ausencia.

Busco a Cami por el primer piso y la veo recostada a la dispensa fundida en una revista, podrían estar robando el mostrador y ella en otro planeta

-con esas ganas que muestras por trabajar no entiendo cómo pudo venir más personas en mi ausencia- digo recostándome de la vitrina

-¡Sebas! Jajaja pensé que ya te habías aburrido de hacer el intento por lucir bien, ya sabes, los feos como tú no tienen remedio-

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⏰ Última actualización: Aug 09, 2016 ⏰

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