Choque De Mundos

Capítulo 5

Chicos a partir de ahora van a haber spoilers de The hidden oracle y de Lady Midnight.

Leeis bajo vuestra responsabilidad :/

- ¿Por qué les dijo que eramos semidioses? -preguntó Alec extrañado una vez llegaron a la casa Grande.

- Es mejor que piensen eso. Ya os lo dije, no quiero que tomen decisiones precipitadas sobre la situación.

- ¡¿Qué situación!? Ni siquiera nosotros sabemos lo que va a pasar. La Clave dudo que acepte libremente un grupo de gente altamente armada y con poderes. Podeis estar en un gran peligro si la Clave se entera.

- Nosotros no queremos la guerra cazador.

- Yo tampoco quiero otra guerra. No es a mi a quien tienes que decírselo.

- Es mejor que descansemos -dijo Magnus agarrando a Alec por el brazo tratando de tranquilizarle-. Ha sido un día largo para todos.

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Will acompañóa Nico hasta su cabaña como hacía siempre. Normalmente hablaban de lo que habían hecho en el día pero esa noche era lo último que querían hacer.

- ¿Qué crees que va a pasar ahora?

- No lo sé, Nico, no lo sé. Solo espero que no nos afecte demasiado.

- Yo también lo espero.

Se miraron con un poco de tristeza, Nico se apoyó ligeramente en Will y se elevó los escasísimos centímetros que separaban sus bocas.

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Ryan estaba tranquilmente entrando en la cabaña de Hermes cuando un bulto de mantas le dio en la cara.

- Esa es tu cama - dijo uno de los chicos (Ryan creía recordar que se llamaba Connor)-. Disfurta.

Ryan le echó una mirada de odio y se tumbo en la cama de espaldas a todos los demás de la cabaña.

- ¡NUEVO! Que crees que estas haciendo. Tienes que contarnos como llegastes aquí y como conociste a esos dos -esta vez fue otro el que habló, Ryan no sabía quien era pero tampoco le importaba.

- Ya os lo dijo Quirón, son dos semidioses de hace algunos años.

- Ya se lo que dijo Quirón, pero creo que nos miente. Y tú no quieres mentirme, cierto Ry?

Ry, él recordaba cuando su madre le llamaba así. No iba a dejar que un estúpido como ese le llamara así.

- No me llames así.

- ¡Que no te llame así! Mira Ry aquí el lider de la cabaña es nuestro amigo Connor, pero el que manda de verdad soy yo y si me da la gana de llamarte Ry te llamo Ry.

- A mi no me mandas.

- No te pongas gallito nuevo, no puedes contra mi -se acercaba cada vez más a Ryan, se estaba quedando sin espacio-. Si me diera la gana ahora mismo podría echarte de la cabaña y  ver que tal te las apañas con las arpías -una sonrisa escalofriante cruzó el rostro del chico.

-No te conviene amenazarme, tengo amigos...

- Sí claro amigos -soltó el otro antes de que Ryan pudiera continuar. No estaba muy seguro acerca de llamar a Will, Nico, Alec y Magnus amigos pero era lo mejor que se le había ocurrido-. Un hijo de Ares, un hijo de Apolo y un hijo de Hecate, el único que podría ser un problema sería el hijo de Hades, pero despierta Ry. Te trajeron aquí pero no son tus amigos.

- Y tú que sabes.

- Acaso vinieron a verte despues de la cena para hablar contigo o algo. No. No te ilusiones, me aseguraré de que no tengas ningún amigo despues de esto.

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Magnus y Alec se desvistieron y se metieron en la cama que les había dejado Quirón. Magnus se giró y comenzó a besar a Alec en el cuello.

- Magnus no.

- ¿Por qué no garbancito?

- Creí que ya habías pasado la fase de los motes cariñosos.

- Nunca pasaré de esa fase contigo - dijo Magnus mientras seguía besando y bajaba al hombro de Alec.

- Magnus en serio no.

- ¿Qué te pasa Alec? -preguntó Magnus poniendose serio.

- Nada, solo pensando en todo lo de hoy. La Clave podría incluso declarar la guerra a los semidioses si los considera una amenaza. O podría ser como hicieron con las hadas.

- No sirve de nada que nos preocupemos ahora por eso.

- Además Izzy está ahora en el instituto, embarazada, sin poder moverse y yo no estoy con ella. Rafe y Max están allí mientras ellos tienen que ocuparse de Jonathan y de Izzy y querría estar allí para ayudar pero les he dejado solos.

- Esto no lo podías ver venir, nadie habría podido.

- Lo sé pero...

- Pero nada. Mañana hablaremos con Quirón y luego volveremos a casa. Ahora tienes que relajarte -solucionó el brujo con una sonrisa traviesa.

- Magnus...

Sin darle tiempo a terminar Magnus se lanzó directamente a sus labios. Alec se relajó y le devolvió el beso mientras el otro bajaba su mano deteniendose en los músculos de su abdomen y luego bajando un poco más.

A.N Ya podeís imaginar como acabaron u.u

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En el instituto todos esperaban saber más sobre Alec y Magnus. Solo habían recibido un mensaje de fuego diciendo que estaban bien y que pasarían allí la noche. Ellos les mandaron un mensaje de vuelta diciendo que Izzy seguía igual, que Max y Rafe se habían portado bien y que ya estaban durmiendo.

- ¿Cómo creeis que es ese lugar? -preguntó Clary para romper el silencio.

- Ellos decían que era un campamento -contestó Simon-. Yo lo imagino como el campamento al que fuimos cuando teniamos diez años. Cabañas, un muro de escalada, un bosquecito y un par de armerías -terminó con una sonrisa.

- ¿Creeis que deberíamos avisar a la clave?

- Desde luego que no -dijo Jace-. Si los avisamos seguramente vayan contra ellos, esos chicos iban armados y, según lo que nos dijeron, mataron a un par de demonios en la cafetería. Si todos son como ellos la clave no les dejará tranquilos si los considera una amenaza.

- Es mejor que esperemos. Cuando llegue Alec y Magnus decidiremos que hacer, no creo que esten allí mucho tiempo...

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Quirón no sabía que hacer. Si los cazadores de sombras seguían siendo como el brujo decía no quería que supieran nada sobre su campamento o sobre el romano. No quería otra guerra. Ya tenían encima el problema de Nero. No, no podía dejar que todo eso les pasara por encima a los jóvenes semidioses.

Estaba a punto de irse a su habitación cuando dos semidioses entraron corriendo. Desde que Apolo descubrió los árboles de Dodona siempre había semidioses escuchando atentos a posibles profecías.

- ¿Los árboles hablaron?

- Sí tenemos todo apuntado, creemos que puede ser una profecía.

- Decídmela.

- La muerte, el sol y el desconocido

El ángel y el demonio

Un grito mudo del fuego

Una llamada de socorro

Desde las tierras antiguas

Donde una se perdió

Hasta las tierras nuevas

Donde uno ascenderá

- Volved al oráculo a vigilar si dice más, mañana justo después del desayuno os quiero aquí para una reunión.